Detrás del reciente fallo judicial en el que se ordenó a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), encabezada por la ex velocista Ana Guevara, “sacar las manos” de la Federación Mexicana de Esgrima (FME), hay una disputa por el presupuesto y el control político de las federaciones deportivas en el país.
“Las federaciones deportivas son centros de poder, y quien domine ese centro de poder tendrá mayores privilegios, ya sea dinero, control social, reconocimiento… cualquier cosa que el poder les genere. Dominar las federaciones obviamente le da un beneficio a la Conade y a los grupos disidentes, por llamarlos de alguna manera”, nos explicó el geógrafo social Dante Celis.
El académico, que ha estudiado la situación del deporte en México y su relación con el poder político y económico, añadió que tener el control de una federación deportiva e imponer a gente afín en sus directivas también facilita el manejo de los recursos para becas, entrenamientos, competencias, uniformes y todo lo necesario para fomentar esta actividad en nuestro país.
El 8 de marzo de 2024 se informó que una jueza administrativa de la CDMX otorgó un amparo a favor de la FME para que la Conade reconozca su registro como federación deportiva, así como a su consejo directivo. Igualmente, el fallo judicial da marcha atrás a un “comité de transición” impuesto en la dirección de la FME e integrado por funcionarios de la Conade.
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Lo anterior, luego de que en septiembre de 2023 la Conade desconoció a la FME y le revocó su Registro Único del Deporte, con el argumento de que la instancia no está afiliada a la Federación Internacional de Esgrima. Según lo reportado por diversos medios informativos, la sentencia de amparo a favor de la FME crea un precedente legal que beneficia a otras federaciones deportivas en las que la Conade ha metido mano con tal de controlarlas.
Y es que en diversos conflictos que datan al menos del sexenio pasado -como te contamos en esta nota-, la Conade ha sido parcial y ha tenido disputas por el control de federaciones como las de box, tae kwon do o basquetbol, por mencionar algunas.
“Una raya más al tigre”
“Ana Guevara tiene muchísimas acusaciones e investigaciones en su contra, por eso mientras más grupos afines tenga en las federaciones deportivas, pues será mucho más difícil que le encuentren errores. Para ella es fundamental tener a su gente”, nos señaló Dante Celis al respecto de estos conflictos en el actual sexenio.
El doctor en Geografía por la UNAM resaltó que estas confrontaciones con las federaciones deportivas son añejas, y que en buena parte se deben a temas de corrupción, desvío y desaparición de recursos o entrega discrecional de becas. En ese sentido, el especialista nos dijo que esta situación refleja la incapacidad de la Conade y de la gente de Guevara para solucionar estos casos.
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“Actúan como el actual gobierno: por ejemplo, si en las estancias infantiles hay corrupción, cerramos las estancias, es decir, pareciera que la solución es siempre lo radical, y no hay posibilidad de conciliación o de que se investiguen los rasgos negativos. Lo de las federaciones va por ahí: se acusa corrupción y desvío de recursos, eliminamos la federación. Se mete en el mismo costal a todas las personas”, lamentó Celis.
Sobre el papel de Guevara en la Conade, el también maestro en Geografía Humana por el Colegio de Michoacán nos apuntó: “ha sido un grave error mantenerla (en el cargo). Hay muchos elementos para pedirle que se vaya, pero mantenerla también es una forma de demostrar poder (por parte de AMLO). Son muchas cuestiones negativas… la expresión de las deportistas, su descontento, muchos conflictos políticos. No tendría por qué seguir”.
Deportistas, las personas más afectadas
Y en medio de las pugnas, los más afectados son las y los deportistas, sobre todo de alto rendimiento, nos dijo Dante Celis. Por ejemplo, recordó, a los selectivos de natación –con cuya federación la Conade también tiene conflicto– se les han cortado de tajo los apoyos: “eso afecta al deportista, pues básicamente de eso vive, y se abre la puerta a patrocinadores que solo buscan un beneficio propio, lo cual de manera indirecta da una mala imagen al gobierno”.
“Que no haya lugares para entrenar, que el deportista no sepa si lo que va a competir va a valer o no, si lo van a desconocer o no… eso le genera angustia, estrés, desconcentración sobre todo al de alto rendimiento, que se dedica las 24 horas. No saber ni a quién rendir cuentas, a quién pedirle un recurso”, nos indicó el coautor de la investigación Los organismos deportivos internacionales: la FIFA y el COI vistos a través de la geografía política.
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Misma situación ocurrió con la Federación Mexicana de Esgrima, abundó Celis, pues -a pesar de la confrontación con la Conade– siguió organizando torneos y los deportistas no saben si participar o no, o si clasifican y al final les quitan su lugar, lo que deriva en caos y afectación directa al deportista.
“Ahora se supone que las becas están más vigiladas, y se les quita a deportistas que llevan un año sin competir, pero que se están preparando para un evento en específico. Si la federación no es reconocida, pues no hay forma de defender al deportista y sale completamente dañado”, agregó el especialista.
“Por eso la pugna por las federaciones es tan voraz. Varias de ellas están ligadas a diferentes sectores políticos. No es casualidad que en el sexenio de Peña Nieto se perseguía a algunas y en este sexenio se persigue a otras. Es ver quién se alinea o no, quién da beneficios y quién no. Es posible que en todas las federaciones haya actos de corrupción, pero al final es cuestión de grupos de poder”, concluyó el profesor de la UNAM.
