Monreal ejerce el arte de la simulación para “quedar bien con Dios y con el Diablo”

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El senador Ricardo Monreal está en un “juego de simulación y de dos pistas” al haber votado contra el Plan B de la reforma electoral, ya que aún mantiene su cercanía con el presidente Andrés Manuel López Obrador y también con la oposición en espera de negociar algún botín político de cara a las elecciones de 2024, consideraron politólogos.

Y es que lejos de ser castigado por el mandatario o expulsado de Morena tras votar contra el Plan B electoral, el propio López Obrador negó en su conferencia del 15 de diciembre de 2022 que el senador vaya a ser excluido del partido. Y no solo eso: cuatro días después, en la conferencia del 19 de diciembre de 2022, el Presidente afirmó que Monreal debe seguir como líder de la bancada de Morena en el Senado, a fin de evitar que la oposición “haga un escándalo”.

“No pasa nada si un político toma una decisión, ¿quién va a juzgar? El pueblo, la historia, es la que va a poner en su sitio”, dijo el mandatario el 15 de diciembre luego del voto de Monreal en contra del Plan B. “Yo no estoy a favor de las expulsiones. Los senadores lo deciden, pero a mí sí me gustaría que él (Monreal) siguiera, porque si no nuestros adversarios van a hacer un escándalo”, recalcó López Obrador en la conferencia del 19 de diciembre.

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Ni tan cercano, pero tampoco alejado

“Una de las hipótesis más probables es que Monreal no está tan lejos de López Obrador como nos ha hecho creer. El Presidente le dio toda la libertad de hacer un voto simbólico en contra (de la reforma electoral). No son extrañas estas negociaciones de ‘yo voy a votar de cierta forma, pero mi gente va a votar de otra para quedar bien’”, nos explicó el doctor en Ciencia Política Jorge Márquez.

El también académico de la UNAM abundó que esta “simulación” de Monreal no cancela del todo la posibilidad de que el senador siga negociando con la alianza opositora: “incluso no es momento para su eventual salida de Morena; estamos a año y medio de la elección presidencial y Monreal, para ser interesante para la oposición, tiene que salir del partido en el último momento. Si él quiere hacer un boquete en Morena (llevarse sus liderazgos y restarle votos), lo tiene que hacer en el último momento”.

Por su parte, el sociólogo Jesús Villegas nos dijo que en la votación de la reforma electoral el senador Monreal “jugó en dos pistas: con la oposición y con el gobierno. Dejó pasar la reforma confiado en que la Suprema Corte de Justicia la declarará inconstitucional y con ello, trató de no romper aún con su partido y con Palacio Nacional, y al mismo tiempo se mantiene cerca de la oposición”.

El profesor durante más de 20 años en el CCH-Oriente añadió que Monreal ha evitado hasta ahora la ruptura con Morena y con el presidente López Obrador en espera de una coyuntura favorable en su objetivo de conseguir una candidatura presidencial.

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“No expulsarlo, sino provocar que se vaya”

En tanto, el catedrático de Historia de México y Teoría Social en el CCH-Sur Octavio Solís nos señaló que ve a López Obrador “con pocas ganas de que Monreal se quede en Morena”, pero aclaró que como “buen político”, el Presidente debe procurar la unidad de su partido: “un dirigente que sabe hacer política jamás expulsa; un político hábil cuida la forma; un gran político va a generar las condiciones para que te vayas”.

El también director de la revista digital Consideraciones apuntó que en caso de que López Obrador piense en generar las condiciones para que Monreal se vaya de Morena, debe buscar el menor costo político de esa salida: “Monreal es una figura que podría dañar electoralmente a Morena; lo demostró cuando presuntamente dio el golpe bajo al partido al perderse la mitad de la Ciudad de México en las elecciones de 2021; eso da el mensaje de que su salida tendría un costo electoral”.

Por su lado, el analista político Jesús Villegas nos explicó que “en el fondo, el Presidente no tolera al senador Monreal, a tal punto que ni siquiera lo menciona por su nombre” cuando se le pregunta sobre el legislador en sus conferencias matutinas: “hasta ahora parece que Monreal no será castigado, pues en Palacio Nacional y en Morena estarían esperando que tenga un desgaste político y, de esa manera, su debilitamiento natural lo lleve a que él mismo abandone el partido guinda”.

“La actitud de Monreal desde luego que ha irritado a López Obrador, pero expulsarlo del partido, quitarle la coordinación de la bancada de Morena en el Senado y la presidencia de la Junta de Coordinación Política en la Cámara alta, lo convertiría en una víctima del poder presidencial”, advirtió el académico.

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Ambiente “enrarecido” en Morena

Los analistas políticos consultados señalaron que otra posibilidad para Monreal es pelear por la candidatura para el gobierno de la Ciudad de México, lo cual recrudecerá la confrontación con otros morenistas que aspiran al mismo cargo, como el secretario de Gobierno capitalino, Martí Batres, o el también senador, Cesár Cravioto.

El autor de diversos libros sobre gobernabilidad Jorge Márquez nos indicó que por lo pronto López Obrador no castigará a Monreal, pues está la amenaza del senador de que se lleve su capital político a la oposición y eso afecte a Morena en 2024: “el Presidente lo sabe y dice: ‘que no se vaya, que se quede y vamos convenciéndolo’. López Obrador le ha ofrecido la Ciudad de México, pero Monreal ya no confía, se la ofrecieron una vez y se la quitaron, aunque el senador tiene sus fichas: ‘acá me ofrecen la ciudad, acá ya no les caí bien, pero a ver después’”.

Sin embargo, el politólogo añadió que el ambiente dentro de Morena “va a estar más enrarecido, lo que le dificultará negociar a Monreal”. “La gente que lo está golpeando es la de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, pues Cravioto y Batres ya lo ven como un posible rival en la lucha por la Ciudad de México”, abundó Márquez.

Mientras, Jesús Villegas nos aclaró que por el momento Monreal no se unirá a la oposición de manera formal, pues “seguirá estirando la liga hasta donde aguante; tal vez no será expulsado ni de la bancada ni del partido, lo cual provocará más roces con los radicales encabezados por Cravioto. Monreal seguirá siendo una piedra en el zapato y continuará maniobrando para sobrevivir hasta que encuentre una coyuntura favorable”.

Finalmente, el autor del libro “Epifanía Política”, Octavio Solís, nos dijo: “pareciera que Monreal está peleando la sucesión presidencial, pero creo que él está apostando a la Ciudad de México; habrá que ver si el capital político que tiene el senador le da para pelear por la CDMX”.

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