Las y los guerrerenses elegirán a la nueva persona que gobernará su estado este junio. Mientras tanto, el priista Héctor Astudillo entra a su último año con problemas de seguridad y una alta aprobación que parece no será suficiente para que el PRI mantenga el poder.
En 2015, Héctor Astudillo ganó las elecciones con el 38% de la votación, lo que se vio como un voto de castigo contra el PRD, el cual gobernó la entidad de 2005 a 2014, cuando Ángel Aguirre renunció después de la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.
Seis años después, el PRI y su viejo rival, el PRD, se unirán para evitar que Morena agregue un nuevo estado a su lista de gobiernos conquistados, mientras que el sexenio de Héctor Astudillo parece no ser un argumento a favor que los ayude a conseguir la hazaña.
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¿Cómo deja Héctor Astudillo a Guerrero?
Héctor Astudillo arranca su último año de gobierno como el octavo gobernador mejor evaluado por su ciudadanía, de acuerdo con el ranking de Consulta Mitofsky, con un nivel de aprobación de 56.4 puntos.
Remontó durante 2020 a pesar de la pandemia y las crisis económica y de violencia, ya que cerró 2019 en el lugar 19 de 32 gobernadores, con 34.2 puntos de aceptación.
En términos económicos, Guerrero es la entidad número 12 más afectada del país, con una caída de 21.9% si comparamos el segundo trimestre de 2020 con el mismo periodo del año anterior, según el Indicador Trimestral del Inegi.
Guerrero es el décimo estado más violento del país, con una tasa de 33.2 homicidios dolosos por cada 100,000 habitantes entre enero y octubre de 2020, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. Además, es el doceavo estado con menos feminicidios, con una tasa de 0.8 por cada 100,000 mujeres.
También es el noveno estado más corrupto del país, ya que de cada 100,000 personas, 15,808 fueron víctimas de corrupción de acuerdo con la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental (ENCIG) 2019.
Si hablamos de COVID-19, Guerrero es hasta ahora el quinto estado menos afectado en términos de mortalidad, con 2,670 fallecimientos al 10 de enero de 2021, que se traducen en una tasa de 73 muertes por cada 100,000 habitantes.
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¿Cuál será el papel del PRI en las próximas elecciones de Guerrero?
A pesar de que Guerrero es gobernado por el PRI, en las elecciones presidenciales de 2018 Morena y López Obrador consiguieron el 63.1% de la votación, 46 puntos arriba de su más cercano competidor, el priista José Antonio Meade.
Casi tres años después, el partido oficial sigue dominando las preferencias electorales en Guerrero, pues ganaría las elecciones para gobernador con el 50% de los votos, muy lejos del PAN (24%), el PRI (13%) y el PRD (11%), según la casa encuesta de Campaigns & Elections de noviembre de 2020.
Esto quiere decir que el candidato de Morena, el ex senador Félix Salgado Macedonio, parte como favorito para gobernar Guerrero de 2021 a 2027, a pesar de estar acusado de violar a una mujer en 2016.
El presidente López Obrador declaró el 8 de enero que estas acusaciones son “un asunto partidista y también producto de la temporada. Hay ahora una competencia en algunos estados, porque vienen elecciones”.
Por cierto que, de acuerdo con el columnista Héctor de Mauleón, el ex fiscal de Guerrero, Xavier Olea, congeló la investigación contra Félix Salgado Macedonio por orden del gobernador priista Héctor Astudillo.
La alianza opositora solo estará conformada por el PRD y el PRI para competir contra Salgado Macedonio. El PRI ya designó a Mario Moreno, secretario de Desarrollo Social de la entidad, como su carta fuerte. En el caso de Guerrero, el PAN decidió luchar por su cuenta.
¿Logrará el PRI mantener este territorio de la mano de su antiguo rival el PRD? ¿El gobierno de Héctor Astudillo será un argumento para frenar el avance de Morena en Guerrero?
