El trabajo infantil es ilegal, ¡contribuye a erradicarlo y denúncialo!
Así rezan publicaciones gubernamentales desde hace años en nuestro país. Sin embargo, vemos a niños en los semáforos vendiendo dulces o haciendo piruetas a cambio de unos pesos; o en los mercados llevando las bolsas del mandado; niñas que mandan traer desde sus pueblos para trabajar en casas donde las ofrecen diciendo “está chiquita, la vas a poder hacer a tu manera, solo tienes que enseñarle cómo te gusta que limpie, lave, cocine y demás”.
Así, hemos normalizado el trabajo infantil. Los menores son explotados y su trabajo mal pagado.
Pero el tema va mucho más allá. La CEPAL señala que México ocupa el segundo lugar en Latinoamérica con mayores índices de trabajo infantil: los últimos datos del INEGI registran más de 3.3 millones de menores de entre cinco y 17 años trabajando, el 60% en ocupaciones no permitidas o en trabajo doméstico no adecuado.
Y ojo, son cifras de 2019, o sea antes de la pandemia; de acuerdo con especialistas, estos números podrían haber aumentado significativamente. La cifra es incierta, pero se habla de un incremento de entre 300,000 y 2,000,000 de niños y niñas trabajando.
Es importante saber que la raíz principal de este problema es la pobreza y la desigualdad, por eso ha sido tan difícil prohibirlo como tal: mientras no se corte la raíz ninguna ley funcionará.
Las leyes son inoperantes e incluso regresivas: hace unos meses se aprobó una reforma a la Ley Federal del Trabajo para eliminar la prohibición de que menores sean empleados en el sector agropecuario. Esto, aun cuando México ha sido firmante de decenas de convenios internacionales como el Convenio 182 de la OIT que enuncia entre las peores formas de trabajo infantil el trabajo en el hogar, las minas y la agricultura.
De acuerdo con la organización Save The Children, es justo el sector agropecuario el que cuenta con el mayor porcentaje de menores trabajadores aun cuando éste estaba totalmente prohibido.
Por cierto, ¿sabías que una de las metas de los Objetivos del Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas es justo terminar con “las peores formas” de trabajo infantil para el 2025? México también asumió ese compromiso. Como ves no hay congruencia entre lo que se firma y las acciones que se emprenden.
Pero otra vez: el tema va mucho más allá. Y vuelvo al Convenio 182 de la Organización Internacional del Trabajo que repito: FUE FIRMADO POR EL GOBIERNO MEXICANO.
Otra de las peores formas de trabajo infantil que cita es el “reclutamiento de niñas, niños y adolescentes para utilizarlos en conflictos armados” y reclutamiento de menores para actividades ilícitas, producción y tráfico de estupefacientes.
La realidad en México es demoledora: datos de la organización Reinserta y de la Red por los Derechos de la Infancia apuntan que aunque es muy difícil una contabilidad exacta, se calcula que son entre 350 y 450,000 los menores reclutados por el narco.
A esto sumemos la acusación del Departamento del Trabajo de Estados Unidos que reveló que niños mexicanos son explotados para la producción de amapola, especialmente en el estado de Guerrero.
Y un tercer punto del Convenio, entre las peores formas de trabajo infantil que los gobiernos firmantes se comprometen a erradicar está la utilización, reclutamiento u oferta de menores para prostitución y producción de pornografía.
Y otra vez las cifras: de acuerdo con la UNICEF, al cierre del 2022 existían en el mundo 16,700 cuentas de pornografía infantil, 73 de ellas están en México.
Somos primer lugar en producción de pornografía infantil. La impunidad es terrible; según el Consejo Ciudadano para la Seguridad, en los últimos tres años se han presentado alrededor de 400,000 denuncias, y de ellas solo ha habido 70 detenciones y solo 26 han llegado a una sentencia.
El lunes 12 de junio fue Día Mundial contra el Trabajo Infantil; escuchamos decenas de discursos oficiales que presumían lo que se ha hecho para erradicarlo, de los compromisos asumidos.
Pero al final, es demagogia.
Porque los datos dicen otra cosa y ésos, no mienten.
