El plantón que mantiene el Frente Nacional Anti-AMLO (FRENA) en la explanada del Zócalo, hizo recordar los días del ahora presidente Andrés Manuel López Obrador encabezando manifestaciones y el bloqueo de 47 días en Av. Reforma del año 2006. ¿Qué diferencias tienen los plantones de AMLO y FRENA?
“Ahora que hay un plantón en el centro de la ciudad… Ojalá que no sea efímero. Nosotros nos quedamos ahí varias veces, hasta más de un mes”, dijo López Obrador, ya como mandatario, el pasado 20 de septiembre en Jojutla, Morelos.
“Que se queden ahí, nada más que se queden todos… A dormir ahí, en las casas de campaña, que no se vayan a ir a los hoteles en la noche… Que se queden los meros meros, los de arriba, los que encabezan este movimiento”, agregó el presidente.
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De la arenga al bloqueo
Hace más de 14 años, López Obrador hizo de la frase “¡Voto por voto! ¡Casilla por casilla!” la bandera con la que llamó a más de un millón de simpatizantes a mantener una Asamblea Permanente y con ello bloquear el corredor Reforma-Centro.
Tras 47 días de bloqueo, la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) registró pérdidas por 7,796 millones de pesos y que 3,900 personas perdieran sin empleo.
De la exigencia de legalidad al ¡Fuera López!
A las 10:00 horas del 31 de julio de 2006 inició la protesta. Las consignas “¡Presidente! ¡Presidente!” y “¡No estás sólo!” acompañaron el andar de López Obrador al Zócalo. A su lado iban el jefe de Gobierno capitalino, Alejandro Encinas; el secretario de Desarrollo Social capitalino, Martí Batres; el coordinador de campaña Jesús Ortega; el presidente del PRD, Leonel Cota Montaño y miles de seguidores.
El candidato de Por el Bien de Todos –la alianza integrada por el PRD, PT y Convergencia– exigía al entonces Instituto Federal Electoral (IFE) –hoy INE– volver a contar los votos. Acusó fraude y rechazó que el panista Felipe Calderón Hinojosa le hubiera superado por 243,934 votos en las urnas (equivalente al 0.5% del total de votos).
“Les propongo que nos quedemos aquí… día y noche, hasta que se cuenten los votos y tengamos un presidente electo con la legalidad mínima que nos merecemos los mexicanos”, planteó Andrés Manuel en su discurso.
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De pasado al presente…
El plantón ahora lo encabeza Gilberto Lozano. No hay cientos de simpatizantes, pero el líder de FRENA asegura que llegarán miles. Ahora están colaboradores de Nuevo León y Jalisco.
“Van a empezar a venir de Chihuahua, Chiapas, Guanajuato… FRENA somos los mexicanos. FRENA no discrimina por credo, orientación sexual, orientación ideológica. FRENA exige resultados”, afirma Lozano. “¡Fuera señor López!”, sentencia a Cuestione.
Apenas llevaban tres días en la explanada del Zócalo, cuando un grupo de apoyo al presidente se hizo presente, con peluches, pancartas. Y al grito de “¡Fuera FRENA! ¡Fuera FRENA!” afirman que los van a sacar.
En 2006 carpas, bailes, juegos… hoy tiendas de campaña vacías
La estrategia de AMLO en 2006 lo llevó a convocar, a través del PRD, a jefes de comités de las entonces delegaciones para apoyar en la instalación de 47 campamentos entre el Zócalo, la calle de Madero y avenida Reforma.
Se organizaron voluntarios para brindar seguridad a López Obrador. En horas se plantaron carpas para la gente del bloqueo, que a decir del candidato, se irían una vez que el IFE aceptara el reconteo de votos.
Y mientras se esperaba la resolución del IFE, se evidenciaron a lopezobradoristas echándose “cascaritas” y bailando.
“Con ese plantón, a muchos los mataron… muchos restaurantes se acabaron, muchos establecimientos desaparecieron… El daño que hizo fue gravísimo… Fue el fin de muchos compañeros”, afirmó en 2012 a La Crónica Hoy, Manuel Gutiérrez García, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera (Canirac).
AMLO argumentó entonces que el plantón evitó la muerte de mexicanos. Aunque Alejandra Barrales, quien fue parte de la protesta, reconoció que “no era sirviendo a una persona como íbamos a resolver las cosas”.
Reveló que “varios reclamábamos que levantáramos ya ese plantón… a la hora de que nosotros decíamos ‘oye, ya cumplimos con nuestro objetivo’, ‘oye esto ya sucedió, ya hay que levantar esto’, ‘ya nos tenemos que mover, el objetivo se alcanzó’; pero venían y te decían que el tema ya era un asunto más de la decisión de una persona”, narra Barrales.
El plantón de FRENA está muy distante a aquel 2006, apenas un centenar de tiendas de campaña, que incluso en un inicio estaban vacías, como revelaron diferentes publicaciones en redes sociales. Aquí no hay partidos de futbol, sí rezos, oraciones, un altar a la Virgen de Guadalupe.
La deuda que dejó el plantón
Ya sin López Obrador en las filas del PRD, el partido que impulsó su campaña presidencial y la de jefatura de Gobierno en la Ciudad de México, la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) confirmó la multa al PRD, por 25.1 millones de pesos, por el plantón de 2006.
Para el año 2016, el PRD había pasado de tener una deuda de 250 millones de pesos, a 500 millones de pesos, de acuerdo con El Financiero.
“Esta deuda fue parte de la herencia que nos dejaron López Obrador y Leonel Cota Montaño. Incluso, después de muchos años, siguieron apareciendo proveedores con facturas vencidas”, afirmó Irán Moreno, entonces secretario de Asuntos Internacionales del Comité Ejecutivo Nacional del PRD.
En 2012, Alejandro Muñoz Reséndiz, extesorero del Comité Central del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), aseguró que Martín Esparza hizo entrega de de dos millones de pesos mensuales –hasta sumar 66 millones de pesos–, a Andrés Manuel entre 2006 y 2012.
“López Obrador presume una imagen de honradez, justicia, anticorrupción. ¿Qué nombre se le tendría que poner, cuando desde el plantón de Reforma se destinaron dos millones de pesos mensuales al movimiento de López Obrador?”, señaló Muñoz Reséndiz.
FRENA apenas lleva unos días de haber tomado una parte de la explanada del Zócalo capitalino, aún no hay reportes de pérdidas de comercios por su causa. Veremos con el paso de los días de qué forma repercute su plantón.
