Frente a la crisis económica generada por el COVID-19, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) convocó a 263 personas, entre expertos en economía y políticas públicas, empresarios y funcionarios públicos federales y locales, a la realización de la Conferencia Nacional para la Recuperación Económica.
A través de 11 mesas de discusión y trabajo transmitidas en formato de videoconferencia, del 27 al 29 de abril se discutió, ante más de 135 mil personas, el impacto económico que la crisis sanitaria por COVID-19 generará en el país y se plantearon propuestas para impulsar la actividad económica del país una vez terminada la emergencia.
“El objetivo es, juntos, conformar un gran Acuerdo Nacional que permita a México superar esta terrible crisis asegurando que nadie se quede atrás”, se lee en la convocatoria al evento.
¿Qué temas se abordaron?
La discusión se centró en tres temas: las acciones inmediatas para solventar la crisis, las acciones necesarias para reabrir la economía y las acciones de mediano, y largo plazo, para detonar el crecimiento incluyente y el desarrollo social.
Sobre las acciones inmediatas, se concluyó que es necesario facilitar el acceso a la infraestructura e insumos del sector salud a toda la población, coordinar a los distintos órdenes de gobierno y garantizar el bienestar del personal médico.
De igual forma se acordó que es indispensable proteger a las poblaciones más vulnerables a través de programas específicos que les brinden los recursos necesarios para hacer frente a la crisis, así como medidas que apoyen la sostenibilidad de las empresas y garanticen su funcionamiento a través de una inyección de recursos en la economía.
Respecto a las medidas para reabrir la economía, se explicó la necesidad de darle prioridad a la salud de las personas ante la eventual reapertura, para lo cual, es necesaria la coordinación entre los distintos sectores de la economía y los diferentes niveles de gobierno, con el fin de que estas medidas se lleven a cabo de manera eficiente.
Finalmente, se discutió la necesidad de plantear medidas que tomen en cuenta el mediano y largo plazo para alcanzar los objetivos de desarrollo social y un crecimiento incluyente.
Para eso, se concluyó que es necesario robustecer las políticas de protección social, principalmente en grupos vulnerables y se planteó la necesidad de fortalecer un Estado de derecho que promueva el desarrollo y brinde confianza a los inversionistas.
Las conclusiones fueron plasmadas en 68 temas que, de acuerdo a la Conferencia Nacional, se deben atender al momento de enfrentar la crisis por COVID-19 (puedes acceder a ellas dando click aquí).
¿La unión nos hará más fuertes?
De acuerdo con Carlos Salazár Lomelín, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, “la única manera de salir de este problema es unidos, con un enemigo común: la crisis sanitaria y económica que nos ha dejado esta pandemia”.
Lomelín destaca que “este ejercicio refleja la idea de colaboración entre diversos sectores de la sociedad”, con el cual se busca reducir los efectos negativos de la crisis “en las familias mexicanas, empezando por las más pobres y desprotegidas”.
¿Tomará en cuentas estas propuestas el presidente?
