La empresa Oro Negro y su filial Todco México se llevaron, entre 2013 y 2014, cuando Enrique Peña Nieto era presidente y Emilio Lozoya, director de Pemex, 22 mil millones de pesos, en contratos obtenidos por adjudicación, para rentar plataformas petroleras.
Oro Negro –recordemos– era del empresario Gonzalo Gil White, hijo de Francisco Gil, secretario de Haciendo y Crédito Público durante el sexenio de Vicente Fox. Gil White ha evitado la orden de aprehensión que le giró un juez de la Ciudad de México, gracias a un amparo.
Oro Negro nació con buena estrella. En 2013, con solo un año de constituida, obtuvo sus dos primeros contratos con Pemex, por más de cuatro mil millones de pesos. En enero de 2014, obtuvo otros dos por más de seis mil millones de pesos, reporta el portal Sin Embargo.
Todos los contratos “fueron firmados por Carlos Morales Gil, quien de 2004 a 2014, fungió como Director de Pemex Exploración y Producción, y que desde el 15 de febrero de 2015 es director de Petrobal, la petrolera del empresario mexicano (uno de los más ricos del mundo), Enrique Baillères”, documenta el portal.
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Nació con buena estrella
La relación entre Oro Negro y el Gobierno de México terminó con la cancelación de los contratos en 2018. La empresa del hijo de Francisco Gil se preparaba para declararse en insolvencia y debía millones a diferentes proveedores.
Oro Negro respondió a esas cancelaciones con un desplegado en el periódico The New York Times, en el que aseguraba que “México intentó sacar a Oro Negro del negocio”, porque “se negó a participar en el patrón de corrupción endémico de México y Pemex”. Según esto, se habían negado a pagar sobornos a funcionarios de Pemex.
