El supuesto acercamiento de grupos guerrilleros a familiares de los 43 normalistas de Ayotzinapa tiene dos versiones. El abogado de las madres y los padres de los estudiantes, víctimas de desaparición forzada, Vidulfo Rosales, lo afirma. El vocero del movimiento, Felipe de la Cruz, lo niega.
La historia, contada por ambos inició el 25 de septiembre, un día antes de que se cumplieran cinco años de la desaparición de los normalistas.
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Versión 1, la del abogado.- guerrilla se acercó, pero fue rechazada
Vidulfo Rosales señaló que grupos guerrilleros, de los cuales no dio nombres, se acercaron a los familiares desde los primeros días que iniciaron la búsqueda de sus hijos, a finales de septiembre de 2014.
El comité les cerró el paso, dijo, porque en la normal Isidro Burgos de Ayotzinapa, en Guerrero -donde estudiaban los 43 jóvenes- no se forman guerrilleros.
“Se acercaron los grupos insurgentes y ¿qué es lo que hizo el comité, el movimiento? Cerrar el paso, esto es un movimiento de los pueblos, de la sociedad, y no se permitió, porque no se forma a guerrilleros, sí a estudiantes con visión crítica que sirve para defender a la escuela”, afirmó el abogado, de acuerdo con La Silla Rota.
Vidulfo agregó que esos grupos pidieron ayudar y tener alguna “incidencia” dentro de la normal, pero no les fue permitido, porque se trataba de una lucha estudiantil.
Ese 25 de septiembre, el exprocurador de Guerrero, Iñaki Blanco, que fue citado a declarar por la Fiscalía General de la República (FGR) en el caso Ayotzinapa, afirmó en entrevista con Radio Fórmula que Rosales “lucra con el sufrimiento de los familiares”.
Blanco sostuvo que el abogado se contradice con sus posiciones sobre las acciones de la justicia en el caso de los normalistas.
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Versión 2, la del vocero.- ningún contacto con guerrilleros
Contactado por Cuestione, el vocero de los familiares de los normalistas, Felipe de la Cruz, afirmó que el movimiento sólo ha tenido acercamiento con organizaciones sociales, pero de ninguna manera con guerrilleros, porque en Guerrero ni existen.
“Yo desconozco, en Guerrero no hay ningún grupo guerrillero después de Lucío Cabañas, así hasta la actualidad. Que yo sepa, no hay ningún grupo guerrillero en el estado”, dijo De la Cruz en entrevista.
El vocero se refirió al fundador del llamado Partido de los Pobres y la Brigada de Campesinos contra la Injusticia, organizaciones que a principios de los años 70 del Siglo pasado eran consideradas como guerrilleras por el gobierno mexicano.
Lucio Cabañas fue un estudiante de la normal rural Isidro Burgos de Ayotzinapa que fue asesinado en 1974, durante una emboscada del Ejército. Es una época de la historia de nuestro país que se conoce como “guerra sucia”, pues se trató de operativos organizados desde el gobierno en contra de movimientos sociales de diferentes características, incluida la que buscaba un movimiento armado para cambiar al país.
Era la época en que Andrés Manuel López Obrador militaba en el Partido Revolucionario Institucional, que gobernaba con Luis Echeverría en la presidencia.
De la Cruz dijo que desconoce a qué se refiere el abogado Vidulfo Rosales con “grupos insurgentes”, ya que las madres y padres de los estudiantes desaparecidos sólo han tenido contacto con organizaciones que pueden citar abiertamente.
“Siempre hemos tenido contacto con organizaciones sociales, como son la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero, con los telefonistas, el Sindicato del Colegio de Bachilleres… Sólo que a esos se les llame ‘insurgentes’, porque también están en contra de las situaciones que prevalecen en el país”, aclaró el vocero de los familiares de los 43 normalistas.
El movimiento se deslinda completamente de grupos guerrilleros o armados, afirmó. “Únicamente hemos tenido contacto con la CRAC (Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria) desde el inicio de nuestra búsqueda”.
En lo que De la Cruz coincidió con el abogado Vidulfo Rosales, es que esto les ha permitido tener autonomía durante los cinco años de lucha que lleva el movimiento, al margen de partidos políticos.
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El informe contra la “verdad histórica”
El 26 y 27 de septiembre se cumplieron cinco años de que los 43 jóvenes fueran víctimas de desaparición forzada a manos de policías municipales de Iguala y estatales de Guerrero.
La llamada “verdad histórica” difundida en enero de 2015 por el exprocurador priista Jesús Murillo Karam, quien será citado a declarar por la Fiscalía General de la República, señala que los normalistas fueron asesinados y sus cuerpos incinerados en un predio de Cocula, Guerrero.
La FGR, a cargo de Alejandro Gertz Manero, anunció que retomará casi de cero la investigación para echar abajo las conclusiones de la PGR de Murillo Karam y esclarecer el paradero de los jóvenes.
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Por lo pronto, en noviembre el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, ofrecerá los avances de la Comisión Especial, conformada por autoridades federales y los familiares de los normalistas, y en diciembre hará lo propio la FGR.
“Porque eso fue el compromiso que se quedó en la última reunión en la Ciudad de México”, celebrada el pasado 26 de septiembre, señaló a Cuestione, Felipe de la Cruz.
