Nuevo impuesto a aplicaciones asfixian a restaurantes y repartidores

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Por Raquel Prior y Mariángel Calderón 

Oliver fundó su restaurante de tlacoyos Tlaco, en la Condesa, en 2015. Desde hace tres años decidió darse de alta en UberEats, Sindelantal y Didi, para aumentar sus ventas. Pero solo subieron en 5% y de esas ganancias, las apps le descontaban 30%, por comisión.

Con la epidemia por COVID-19, Tlaco –junto con miles de negocios y restaurantes– tuvieron que cerrar, o bien, las que pudieron se adoptaron al sistema de entregas de domicilio, en lo que las plataformas digitales se volvieron clave. 

A principios de junio, algunos restaurantes pudieron reabrir, pero lo hicieron con una sorpresa: entró en vigor el Impuesto al Valor Agregado (IVA) a las plataformas digitales como Netflix, Amazon, Uber, Didi, entre otras, que se había aprobado en octubre de 2019.

“No quería entrarle, me parecía que las comisiones eran altas, pero me di de alta porque era una manera de tener más visibilidad y que la gente conociera mi restaurante”, cuenta Oliver.

Un ejemplo: por un pedido de 360 pesos, él pagaba 108 pesos de comisión a UberEats, por el uso de la plataforma. Así, Oliver recibía 252 pesos. Ahora, con el nuevo impuesto, recibirá 185.06 pesos (casi la mitad de lo que vendió), a lo que todavía faltaría restar los gastos de preparar sus platillos, la parte proporcional del salario de los dos empleados que tiene, además de servicios, como la renta, la luz, el gas y el agua. “Así ya no me conviene”, dice. El impuesto, que las aplicaciones trasladan a los restaurantes, los deja al borde de la quiebra.

Para sobrevivir esta pandemia, lejos de tener alguna ganancia, está echando mano de sus ahorros para mantener su restaurante a flote. 

UberEats exige que los mismos precios que ofreces en el restaurante, los pongas en la plataforma. Así que con el pago de la comisión y ahora el IVA, no sé cómo le voy a hacer para pagar a los empleados, comprar los trastes reciclables, que son más caros, y encima tener que aguantar que la Condesa sigue vacía”, explicó en entrevista con Cuestione.

Al igual que Oliver, más restauranteros han mostrado su inconformidad a través de redes sociales. 

Esto ha significado un gran negocio para las plataformas de entrega a domicilio, pues el volumen de ventas de alimentos aumentó con la pandemia. Al cierre de 2019, la entrega a domicilio representaba 23 mil millones de pesos, es decir, 4.8% del valor total de las ventas de comercio electrónico, y de acuerdo con las estimaciones, ahora con la crisis sanitaria podría alcanzar el 11.4%, según datos de The Competitive intelligence Unit (CIU).

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¿De qué va el impuesto en México?

El IVA a las plataformas fue aprobado el año pasado por el Congreso, con el fin de que las empresas extranjeras que ofrecen servicios digitales en México, también pagaran impuestos y con ello hubiera un piso parejo entre firmas mexicanas e internacionales.

El IVA es un impuesto trasladable, que se cobra en cada paso de la compra de suministros y se puede deducir (salvo el consumidor final que es quien finalmente lo paga). Sin embargo, Uber declaró a Xataka que sus clientes no pagarían este gravamen, sino sus socios, restaurantes, repartidores y conductores. Suena bien para el consumidor, pero pone en riesgo a la empresa.

Este impuesto también se aplica a plataformas de entretenimiento, como Netflix o Spotify, quienes efectivamente trasladaron el impuesto a sus suscriptores. Por otro lado, también contempla los bienes o servicios de intermediación entre terceros, como Amazon. 

Sin embargo, los más afectados son los que ofrecen sus productos a través de estas plataformas, como los restaurantes y en quienes recae el cobro de este gravamen, según la Ley del Impuesto al Valor agregado.

Hay algunas empresas que pudieron tomar la decisión de no trasladar por completo el impuesto al consumidor final y no aumentar sus precios, sin embargo, en la gran mayoría, el IVA lo van a terminar pagando los usuarios, explicó Ariana Martínez, integrante del Colegio de Contadores Públicos de México, a El Economista

El IVA a las plataformas digitales no es un impuesto nuevo, pero antes no existía un esquema operativo que los obligara a pagarlo, como explicó Arturo Herrera, secretario de Hacienda y Crédito Público, en su cuenta de Twitter. 

México no es el primer país en cobrar el IVA a las plataformas digitales. En América Latina, Uruguay cobra el 22% desde 2018, Argentina, 21%, mientras que Costa Rica pide el 13%; estos dos últimos le cobran el impuesto a los consumidores.

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¿A quiénes impacta?

Además del IVA de 16%, los restauranteros pagan comisiones de entre 30% y 40% por utilizar estas plataformas, dijo, Juan Carlos Banda Calderón, integrante de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac).

“Los restaurantes no están en peligro de cerrar por el IVAsino porque las plataformas hacen cobros excesivos de la comisión por usar la aplicación”. Esto impacta a los restauranteros porque podrían ver complicaciones para pagar a los empleados, comprar suministros y rentar sus locales, entre otros gastos”, agregó Banda. 

Las plataformas digitales tendrían que ser un poco más solidarias y bajar los porcentajes de las comisiones para que los negocios pequeños puedan sobrevivir, considera Banda.

El COVID-19 ha afectado a muchas personas, entre ellas a las personas de la industria restaurantera, quienes tuvieron que cerrar durante casi tres meses y cuando reabrieron, el IVA a las plataformas digitales los sorprendió. Sin embargo, las comisiones que estas empresas les cobran por usar su aplicación son quienes los ponen en peligro de cerrar. 

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