Leticia Maldonado ha sido bibliotecaria por 25 años. Ella ha organizado el archivo de por lo menos cinco bibliotecas y ha ayudado a miles de niños, niñas y adultos a encontrar libros y revistas de su acervo que sirven para sus tareas y placeres.
Puede ser que hasta hoy ningún sistema de catálogo sirva tan bien como las recomendaciones de Leticia a los lectores que frecuentan la biblioteca en la que trabaja, pero es un hecho que, en la práctica, los ficheros virtuales y hasta Google ya hacen gran parte de su trabajo e incluso pueden dejar en el olvido sus conocimientos.
Leticia forma parte de ese grupo de profesionistas a los que la tecnología amenaza con dejar sin trabajo. Y conforme pasan los días, la lista de carreras obsoletas se hace más grande. Incluso Forbes publicó las 20 ocupaciones que quedarán en desuso este año. Granjeros, carteros, operadores de máquinas costureras, operadoras telefónicas, cocineros de comida rápida, agricultores y hasta vendedores de periódico están en esa lista.
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No es nuevo, las empresas automatizan procesos para bajar los costos. Tanto que según la agencia analítica McKinsey & Company, en el mundo la automatización sustituirá al 49% de ocupaciones remuneradas para finales del 2030. En México podría afectar al 10% de la población que trabaja.
No me quiero ir, señor mercado laboral
Las ocupaciones más recurrentes en las listas de carreras obsoletas son: cajeros y ejecutivos de banco, choferes, maquiladores, periodistas y operadores telefónicos. Todos ellos pueden ser reemplazados por procesos mecánicos, o los puede hacer cualquiera sin necesidad de conocimientos especializados.
¿Y por qué las universidades siguen ofreciendo carreras obsoletas?
En México, tener una carrera universitaria todavía significa acceder a la posibilidad de un mejor empleo. En consecuencia, de 2008 a 2018 el nivel educativo en el mercado laboral aumentó, y actualmente uno de cada cinco mexicanos que trabaja, terminó su educación superior. Aunque los beneficios económicos de la universidad han disminuido.
La comparativa más evidente es que un licenciado bien pagado gana sólo 72% más que alguien que sólo tiene el bachillerato. Los promedios están así: mientras alguien con bachillerato gana en promedio 6,673 pesos al mes, alguien con licenciatura gana 11,467 pesos al mes.
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¿Y eso qué tiene que ver con las carreras obsoletas?
Según el Instituto Mexicano para la Competitividad, la poca disponibilidad de datos sobre la competencia, planes de estudio, así como las ventajas y desventajas económicas al elegir la carrera, hacen que los estudiantes tomen decisiones poco informadas y restrinjan sus elecciones a carreras populares pero con pocas oportunidades de desarrollo profesional.
Así los datos tienen sentido a la hora de los sueldos: mientras un médico gana 161% más que quienes estudiaron sólo el bachillerato, alguien que se graduó de la carrera de orientación educativa sólo puede aspirar a ganar 45% más que el mismo que terminó la preparatoria.
Entre que desaparecen o no, van las cinco carreras mejor y peor pagadas del mercado laboral actual, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo 2018-2.
Mejor pagadas: (promedio mensual)
Medicina $17,449
Electrónica y automatización $15,109
Ciencias ambientales $14,320
Mercadotecnia y publicidad $13,765
Negocios y comercio $13,750
Peor pagadas: (promedio mensual)
Música y artes escénicas $8,385 al mes
Formación docente $8,484 al mes
Trabajo y atención social $8,575 al mes
Terapia y rehabilitación $8,639
Formación docente para educación básica preescolar $8,724
¿Está la que ya empezaste o pensabas elegir?
