Tienen secuestrado al partido, dice
Felipe Calderón renunció al PAN. Aprovechó este domingo 11 de noviembre, el mismo día de la votación para renovar la dirigencia del Partido Acción Nacional, para decir adiós al bando político donde militó 38 años.
¿Quién se queda?
Según las cifras oficiales del partido, el contendiente Marko Cortés Mendoza será el nuevo presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, quien ocupará el sitio que dejará Marcelo de Jesús Torres Cofiño, el actual presidente del partido. El porcentaje de votación que obtuvo Cortés sobre su contrincante Manuel Gómez Morín fue grande; de 170 mil votos, 130 mil fueron para Cortés.
El triunfo lo anunció Cecilia Romero, presidenta de la Comisión Organizadora Nacional de la Elección del CEN del PAN, quien con menos del 70% de los votos contados ya informaba la victoria. A Cortés lo acompañará Héctor Larios Córdova, su compañero de fórmula, y próximo secretario general del partido.
Ante la inminente derrota, Gómez Morín señaló la elección interna como antidemocrática y dijo que en el proceso hubo compra de votos, además de padrones controlados, donde “los gobernadores y otros personajes, tienen secuestrado al partido y no lo dejan vivir su vida interna y un partido así no le sirve a México”.
Pero a pesar de su inconformidad, y de estar convencido de que los militantes no votaron libremente, dijo que no iba a impugnar los resultados en las instancias del partido y que más bien era momento de reflexionar sobre su futuro dentro y fuera del PAN.
Después del resultado, inapelable, Marko Cortés invitó a Gómez Morín a integrarse a su Comisión, “todos los panistas somos necesarios”, le escribió. Gómez Morín respondió un breve: “No, gracias”.
¿Quién se fue?
Pasadas las 20:00 horas del domingo 11 de noviembre, el expresidente Felipe Calderón escribió en su cuenta de Twitter: “Esta tarde presenté de manera personal y privada mi renuncia al Partido Acción Nacional, la cual fue hecha pública por el Comité Nacional”.
Calderón argumentó que el partido “ha dejado de ser el instrumento de participación ciudadana para la construcción de un México mejor” y señaló que “el consorcio que controla al PAN ha destruido la democracia interna, llegando al extremo de que durante los últimos años ninguna de las candidaturas relevantes del partido ha sido electa por los militantes y en cambio ha sido impuesta por designación de la membresía”.
Ante la renuncia, el PAN dijo que respetaba la decisión de Calderón, y que aunque estaban sorprendidos, era de señalarse la falta de autocrítica, ya que cuando él —Calderón— era presidente, tenía control total del partido, y fue justo ese el momento en que muchos errores se incubaron y potenciaron.
Calderón respondió en una entrevista con el periodista Pascal Beltrán del Río, “con la manipulación del padrón del blanquiazul por parte de ‘una camarilla’; el despeñadero con la autoimposición de Anaya —a la campaña presidencial— y los intereses de ciertos grupos, se ha afectado al PAN”.
¿Y el PAN?
Se queda a cargo Marko Cortés, michoacano de 41 años que tiene experiencia como diputado federal, subdirector de la Coordinación General de Delegaciones de la Secretaría de Desarrollo Social y senador —sin ninguna iniciativa aprobada—. Tendrá que asumir su nuevo cargo a más tardar el 16 de noviembre, pues los estatutos del partido marcan cinco días hábiles para la toma de posesión.
Mientras, en una entrevista con Carlos Loret de Mola, llamó a la unidad a todos los militantes del partido. Dice que quiere que su partido “encabece causas” y sea una “oposición digna, clara y congruente” que haga frente a Morena en los próximos seis años.
