César vive en Jacksonville, al norte de la Florida, en Estados Unidos. Haber trabajado en un vivero en Villahermosa, Tabasco, le dio la oportunidad de emplearse en el exterior a sus 23 años plantando árboles en una granja a las afueras de esa ciudad.
El muchacho no tiene documentos para vivir y trabajar legalmente en los Estados Unidos y con la nueva Ley Anti inmigrante impulsada en ese estado y que entrará en vigor el primero de julio próximo, la mujer que lo emplea podría ser acreedora de una multa de hasta 10,000 dólares y César sería deportado a México.
Una mano de obra especializada en sembrar plantas y árboles en una granja, con documentos en regla para trabajar en EU, ganaría un promedio de 16.54 dólares la hora, de acuerdo con el Servicio Nacional de Estadísticas Agrícolas (NASS, por sus siglas en inglés).
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Pero al muchacho le pagan 6 dólares la hora -70% menos que un trabajador con papeles- y trabaja 12 horas diarias con el sol a cuestas. Sesenta horas a la semana para un sueldo mensual de aproximadamente 1,440 USD.
Ramírez sabe viajar ligero. Atravesó el desierto de Arizona con una mochila en la que cargaba una botella con agua, una fotografía de su hija Karen enseñando su primer diente y una medalla de la Virgen de Guadalupe.
Ahora, con la nueva Ley Anti inmigrante promovida por el gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, César agarra de nuevo la mochila de viaje y la llena con los mismos tres objetos con los que salió de Villahermosa en el 2020.
El mexicano se mudará al estado de California donde espera poder sembrar una nueva vida para él en Estados Unidos y para su pequeña Karen en México porque en la Florida ya no se podrá. Ron DeSantis le acaba de truncar su sueño americano.
El gobernador republicano dejará a César y alrededor de 772,000 inmigrantes indocumentados viviendo una verdadera pesadilla en Florida.
Por eso, Ramírez dejará el estado en sesenta días y también la granja donde plantó más de 186 árboles en dos años y 9 meses. Para entonces, el estado que gobierna Ron DeSantis pedirá a las empresas que tengan más de 25 empleados que utilicen E-Verify para comprobar el estatus migratorio de las personas que trabajan en ella.
E-Verify es una página web que pertenece al Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos. En ella las empresas pueden verificar si sus empleados, nacionales o extranjeros, tienen las cualidades y documentos necesarios para trabajar en sus compañías.
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César pensó muy bien la decisión que acababa de tomar. Quedarse le ocasionaría varios problemas. Por ejemplo, si tuviera que acudir a un hospital con su Medicaid, -el seguro que tienen muchos inmigrantes para pagar sus cuentas médicas- se le obligaría a dar sus datos migratorios y al no contar con los documentos que acrediten su estancia legal en el estado, podría ser deportado a México.
La nueva Ley también dejaría a César sin licencia de conducir. El documento que obtuvo en Washington apenas llegó a Estados Unidos no será válido porque todas las licencias que fueron emitidas fuera de Florida dejarán de reconocerse.
¿Quién va a cosechar? Se vacía el campo en Florida
En la granja donde hasta hoy trabaja César ya se fueron al menos quince personas de veintidós en seis días. Realizaban labores de siembra, cosecha y plantación de árboles. Pero la semana pasada, cuando se supo la noticia de la nueva Ley Anti inmigrante de Ron DeSantis, “dejaron de venir más de la mitad de los empleados y el campo quedó casi vacío”, cuenta César para Cuestione.
“Lamentablemente, mi gente, ya es oficial. A partir de ahora todos los inmigrantes indocumentados son prioridad para ser arrestados y deportados. No importa si tienen un récord criminal o no o cuánto tiempo llevan en Estados Unidos”, se escucha en un video de TikTok de 26 segundos donde se ven casas en construcción sin ninguna persona trabajando en ella.
Migrantes irregulares le preguntaron a su empleadora que los tiene trabajando en labores del campo en Florida: “¿Doña Elvira qué es lo que vamos hacer? ¿Nos vamos a ir porque ya no podemos estar aquí?”
En entrevista para Telemundo, Elvira Cepeda camina en medio de hectáreas vacías ya que sus trabajadores no quisieron regresar a trabajar. Tienen miedo de que la nueva ley los alcance.
Elvira recuerda que la economía del sur de la Florida, específicamente en Homster, es la agricultura. “¿Quién la va a cosechar?”, se pregunta la mujer frente a su campo sin trabajadores.
Julieth, una inmigrante colombiana que reside en Miami, Florida, tiene papeles para trabajar.
Aunque ser inmigrante regular la convierte automáticamente en una mujer privilegiada en Estados Unidos, no deja de sentir pena y preocupación por los inmigrantes irregulares, sobre todo por los Centroamericanos que trabajan por lo general en áreas de construcción, la industria restaurantera y en el campo estadounidense.
“Son los que se asolean en el campo, en las construcciones, trabajan muy duro día y noche en bares y restaurantes también”, explica Julieth para Cuestione. También es la gente, explica la inmigrante, que tiene sus puesticos informales de comida más barata y mucho más rica y que “quizás ahora con la nueva Ley no se van a exponer a que se les acabe de la noche a la mañana todo”.
Cuando se le pregunta a Julieth por los campos y las construcciones vacías, hace una pausa y suelta una frase: “Sinceramente yo no me imagino a ningún americano recogiendo tomates”.
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Ron DeSantis, el gobernador antimigrante que quiere ser presidente de EU
Tiene 45 años, profesa la religión católica, estudió historia en la Universidad de Yale y tiene un doctorado en Derecho en Harvard. Su nombre completo es Ronald Dion DeSantis, tiene padres con origen italiano y es el autor de la Ley Anti Inmigrante que tiene nerviosos a 772,000 migrantes indocumentados que residen en Florida, de acuerdo con cifras del Migration Policy Institute.
Antes de entrar en la política, DeSantis fue militar y se desempeñó como oficial en la Abogacía General de la Marina de los Estados Unidos.
La trayectoria de Ron en la política inició en el 2012 donde fue elegido representante a la Cámara por el partido Republicano. En el 2016, DeSantis fue candidato al Senado de la Nación pero declinó sus intenciones ante la decisión de Marco Rubio por reelegirse.
Para el 2018, Ron DeSantis decidió postularse como candidato a la gubernatura de Florida y la consiguió. Para enero del 2019 se convirtió en el gobernador más joven en la historia reciente.
Como gobernador de Florida, Ron DeSantis ha implementado diversas políticas que han generado controversia y polarización en el estado. Algunas de las más polémicas son la de facilitar el acceso a las armas de fuego.
Defensor de los derechos de posesión de armas, DeSantis firmó en el 2019 una ley que les permite a los maestros del estado portar armas de fuego en las escuelas lo que ha generado un fuerte debate sobre la seguridad en los entornos educativos.
En el mismo año, el gobernador fue duramente criticado por la reapertura temprana de bares y restaurantes durante la emergencia sanitaria por la COVID-19 y la relajación de las restricciones, incluso cuando los contagios estaban en aumento. Algunos críticos argumentan que sus decisiones podrían haber contribuido a la propagación del virus y poner en riesgo la salud pública.
Para el 2021, DeSantis firmó una controversial ley de reforma electoral que ha sido criticada por limitar el acceso al voto. La ley impone restricciones en el voto por correo, reduce los lugares de votación anticipada y establece nuevas regulaciones para los grupos que realizan actividades de registro de votantes.
Hoy se sabe que Ron DeSantis quiere ser candidato a la presidencia de los Estados Unidos para el 2024 por el partido Republicano, pero primero tendría que vencer a Donald Trump, su otro contendiente.
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El Centro de Investigaciones Pew estima que en Estados Unidos hay alrededor de 10,5 millones de inmigrantes indocumentados como César Ramírez. Y los estados que acogen al mayor número de inmigrantes de distintas nacionalidades son California, Texas, Nueva York, Nueva Jersey y Florida.
Es lunes y César llega en punto de las 8 a.m. a sembrar más árboles. Le avisa a la dueña de la granja que dejará Florida para mudarse a California en junio próximo.
De los veintidós migrantes que trabajan con Ramírez, se fueron quince la semana pasada a la par que llegó la nueva legislación. Y después se fueron otros cuatro agricultores mientras la dueña de la granja ha sacado a la puerta un escrito en español que dice: “Se busca personal para sembrar y cosechar”.
