Sentencia de la Corte de EU contra el aborto legal, retroceso de 50 años contra las mujeres

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En 1969, Jane Roe (alias de Norma McCorvery) intentó abortar en Texas por voluntad propia. En ese estado únicamente era legal abortar si la vida de la mujer corría peligro, por lo que demandó al encargado de aplicar las leyes, el fiscal Henry Wade el siguiente año. En Estados Unidos, los casos toman los nombres de partes del juicio, de ahí el nombre: Roe contra Wade.

Hasta 1973, después de que el Tribunal de Distrito del Distrito Norte de Texas declarara inconstitucional las leyes de aborto del estado, la Suprema Corte de los Estados Unidos revisó el caso, resolviendo que la prohibición del aborto violaba el derecho de las mujeres a la privacidad.

A pesar de que para entonces el tercer hijo de Norma McCorvery ya había nacido y tenía 3 años, esta decisión se volvió una de las más relevantes para los derechos de las mujeres, ya que afirmó que el derecho de una mujer a interrumpir su embarazo estaba protegido por la Constitución de los Estados Unidos.

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En febrero de este año, el medio de comunicación POLITICO filtró un borrador de la opinión escrita por el juez republicano Samuel Alito sobre un caso en Mississippi que buscaba prohibir el aborto después de las 15 semanas de embarazo. En ese texto, la mayoría de la corte se pronunciaba a favor de revertir la protección constitucional al aborto.

El viernes 24 de junio de 2022, la mayoría republicana en la Corte eliminó el derecho al aborto en los Estados Unidos. La Corte afirmó que Roe contra Wade se debía revertir ya que la constitución no hace referencia al aborto, por lo que no se puede proteger. Lo anterior le otorga la facultad para legalizar o no el aborto a cada estado.

¿Cuál es el impacto de su revocación?

“Retrocede 50 años los derechos para las mujeres” nos dice Cristina Santana, Oficial de Formación de la organización Instituto de Liderazgo Simone de Beauvoir, que promueve la participación ciudadana para avanzar hacia la igualdad de género y la justicia social.

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Además, “el aborto siempre es un tema de justicia social: cuando es ilegal, las personas con dinero van a poder acceder al aborto, pero quienes tienen menos acceso a recursos e información ponen en riesgo su vida, seguridad e integridad para abortar”.

De igual manera, esto representa un obstáculo para las mujeres migrantes mexicanas, quienes “de por sí ya tienen complicaciones por su situación legal o el acceso a servicios médicos” afirma la especialista. Muchas mujeres migrantes no podrán viajar a otro estado para acceder a servicios de interrupción legal del embarazo.

De acuerdo con Jimena Avalos, abogada especialista en temas género y diversidad sexual, Roe contra Wade protegía el acceso al aborto a nivel federal, pero un caso posterior (Planned Parenthood contra Casey) hizo posible que los estados restringieran el acceso a través de requisitos o restricciones.

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Por ejemplo, en Kentucky la mujer debe esperar 24 horas después de recibir información sobre el aborto para llevar a cabo el procedimiento. Además, los doctores están obligados a realizarle, enseñarle y describirle un ultrasonido del producto.

Ávalos comenta a Cuestione que al eliminar Roe contra Wade, es posible prohibir el aborto en todos los casos, hasta en los que el embrión tenga alguna condición médica que le impida desarrollarse al nacer. La Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) ha afirmado que “obligar a una mujer a parir un hijo destinado a fallecer es un trato cruel inhumano y degradante”.

Por último, las especialistas advierten que esta medida es preocupante ya que da el mensaje de que las posturas anti derechos pueden conquistar victorias importantes. En México, esto podría resultar en un bajo costo político al emitir posturas en contra de los derechos de las mujeres y otras minorías.

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Al revertir la sentencia, 13 estados ya contaban con “leyes gatillo” que criminalizarían el aborto si se eliminaba Roe contra Wade. Como muestra el mapa siguiente, al día de hoy el aborto es legal en 20 estados, mientras que en 8 esta prohibido. Se espera que con esta decisión al menos 7 estados más prohíban la interrupción del embarazo.

¿Qué sigue?

Para Santana es importante que desde México apoyemos el trabajo de ONGs en Estados Unidos que diseminan información y hacen trabajo de acompañamiento; también apoyar a fondos para que las mujeres puedan viajar a estados en los que el aborto es legal.

La especialista señala que además las mujeres podrían viajar a alguno de los 10 estados de México donde se ha legalizado. También, existen redes de apoyo mexicanas cerca de la frontera, como La abortería que brinda información para que las mujeres realicen abortos seguros.

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En la decisión de la Suprema Corte también se señala que otras sentencias icónicas como Griswold contra Connecticut (acceso a anticonceptivos) y Obergfell contra Hodges (matrimonio igualitario) deberían ser revisadas. Esto indica que la Corte buscará retroceder otras sentencias importantes para los derechos de las mujeres y minorías.

Este fin de semana, además de salir a marchar por el orgullo LGBT+, muchas personas marcharon en contra del fin de Roe contra Wade. Para Cristina Santana, es igual de relevante que desde México busquemos “luchar en nuestros contextos para evitar retrocesos y buscar avances”.

En nuestro país, la lucha por un aborto legal, libre y seguro se ha realizado en las legislaciones estatales. Ahora es el turno de la marea verde en Estados Unidos.

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