Actividad industrial sufre peor caída en 9 años

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En repetidas ocasiones hemos escuchado el término “actividades secundarias” y no siempre sabemos a lo que se refiere o su importancia en México.

Resulta que representan un tercio del Producto Interno Bruto (PIB) del país y se refieren a las actividades industriales. ¿Cuáles son? Minería, construcción, manufactura, generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y gas por ductos para el consumo final.

La variación porcentual anual de la actividad industrial de mayo de 2019 (-3.1% contra 2018) ha sido la más baja desde 2010 de acuerdo a los indicadores macroeconómicos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Es decir, la actividad industrial cayó 3.1% en mayo de 2019.

¿Y luego? De continuar así, la población lo resentirá en su bolsillo.

Economía mexicana, con “temperatura”

La peor caída fue en el sector construcción con una variación de -9% en mayo 2019 con respecto a mayo 2018. Pero, ¿qué significa? Especialistas nos explican:

“Si la construcción no va bien, la economía tampoco”, afirmó Ernesto Piedras, economista y director general de la consultoría The Competitive Intelligence Unit y explicó que “la construcción es el termómetro de la economía del país porque genera empleos, mueve el sector financiero con los créditos, entre otras cosas”.

En ese sentido coincidió Valeria Mendiola, economista e investigadora de la organización México, ¿cómo vamos?, quien afirmó que “la construcción lanza señales del estatus de la economía porque son a largo plazo y son señales de la confianza de inversionistas”; en este caso, de desconfianza.

Mendiola agregó que “la variación negativa en construcción es grave porque representa el 7.7% del PIB y depende de la percepción interna de los inversionistas tanto a nivel nacional como estatal, sobre todo en la Ciudad de México, donde hay incertidumbre por la cancelación del aeropuerto”.

¿Cómo nos afecta?

De entrada, el 23 de julio 2019, el INEGI publicó resultados negativos con base en la Encuesta Nacional de Empresas Constructoras (ENEC): el valor de la construcción de empresas constructoras sufrió una caída anual de -10.3% en mayo de 2019, lo que significó una variación porcentual anual en el personal ocupado de -4.7%, en horas trabajadas de -5.2% y de –0.7% en salarios.

De nueva cuenta, especialistas coincidieron: Valeria Mendiola aseveró que “se puede volver un círculo vicioso porque implica el cierre de empresas por no tener la seguridad de que sus productos se venderán, lo que genera menos empleos, despidos”.

Al respecto, Mendiola agregó que “quizá no se vea a corto plazo pero entre más haya decrecimiento de la producción hay más posibilidades de que suceda” y mencionó que eso “implicaría un problema de consumo porque la gente tendría menos dinero, entonces dejaríamos de impulsar la economía”.

Por su parte Ernesto Piedras declaró que “si la economía no crece no hay derrama económica, no se llenan los bolsillos, no hay empleos y los que hay no están bien remunerados, en promedio hay menos recursos, es decir menos dinero para repartir entre la población”.

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¿Y los demás sectores?

La minería presentó la segunda peor variación porcentual anual de entre los cuatro sectores en mayo de 2019 (-8.9% con respecto a mayo de 2018). Este sector tiene una tendencia marcada a la baja desde 2015 (-6.4% anual) y se compone por la extracción de petróleo y gas, minerales metálicos y no metálicos y otros servicios relacionados.

Mientras que al sector manufacturero no le fue tan mal: presentó una variación porcentual anual de 0.4% en mayo de 2019, la segunda más baja desde mayo de 2010, pues en mayo de 2013 fue de 0.2%.

Por último, el sector de generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y gas por ductos para el consumo final es el único que presentó una variación anual favorable de 1.6% en mayo de 2019.

¿Es normal?

No. Aunque la actividad industrial ha tenido una tendencia a la baja desde 2010, mayo de 2019 suma ocho meses con variación anual negativa (desde octubre 2018). Así que lo “preocupante es la tendencia a la baja porque es un indicio de que la economía no va por buen camino y es una baja generalizada”, declaró la economista Valeria Mendiola.

Por otra parte, el economista Ernesto Piedras mencionó que “es la primera vez, desde que existe el Tratado de Libre Comercio (TLC), que Estados Unidos va en una dirección (creciendo) y México en la otra (decreciendo) y se debe a factores internos”; citó como ejemplo “el freno en la inversión pública y privada por incertidumbre en el mercado mexicano”.

¿Hay solución?

Valeria Mendiola recomendó realizar políticas públicas en las que se involucre al sector privado, que se conozca lo que les interesa y que haya más comunicación entre gobierno y el empresariado.

La experta en economía puntualizó que es importante que “el gobierno entienda que el sector privado no está contento con que se estén tomando decisiones sin evidencia y eso frena y preocupa a muchos sectores”.

¿En cuánto tiempo se recuperará la actividad industrial? ¿El gobierno generará confianza para las inversiones? 

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