Ana Laura, la joven repartidora que vivía en Naucalpan y fue hallada muerta en Guadalajara

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Las últimas historias que Ana Laura Ortiz Posada publicó en su cuenta de Facebook fueron sobre su motocicleta, una Quantum GT de 150 centímetros cúbicos a la que llamaba cariñosamente McQueen, en referencia al personaje de la película Cars.

Eso ocurrió hace tres semanas. La fecha coincide con su desaparición, ocurrida el pasado 21 de mayo, según un cartel de la Comisión de Búsqueda de Personas del Estado de México. Ese sábado fue la última vez que el papá de Ana Laura vio a su hija. Ese día, la joven le dijo que iría a una fiesta, pero ya no regresó. 

Luego de 20 días de búsqueda el cuerpo de Ana Laura fue hallado en Guadalajara, a 590 kilómetros de su casa en Praderas de San Mateo, en Naucalpan. Su padre fue notificado el viernes pasado y tuvo que ir a la capital del estado de Jalisco a reconocer los restos de su hija.

“Dijeron que fue suicidio, que se ahorcó, pero la encontraron en el piso, según ya llevaba 20 días, su cuerpecito llegó ya muy descompuesto aquí”, dijo el hombre a medios locales. Sin embargo, la familia duda de la versión oficial que les dio la Fiscalía de Jalisco sobre la causa de muerte de Ana Laura. 

El caso de la joven de 18 años de edad se suma al de Frida Alondra, Debanhi Escobar, Yolanda Martínez y otras 37,446 mujeres que fueron víctimas de algún tipo de violencia entre enero y abril, incluidas 78 muertes registradas como feminicidio tan solo en abril.

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Una niña feliz

De acuerdo con sus amigos y amigas, Ana Laura, a quien también conocían como Wuabis Shelby, era una niña alegre, por lo que les parece sospechoso que se haya suicidado.

“¿Por qué irse hasta Guadalajara para cometer ese acto? Ella no lo hizo, en el lugar de los hechos encontraron sus papeles, credencial y mochila… está muy raro, ella no tiene familiares allá”, señaló una amiga citada por La Silla Rota

Mensajes en Facebook de los amigos de Ana Laura dan cuenta que la consideraban una persona alegre y trabajadora. Su padre, Elib Ortiz, la recuerda como una joven aventurera, que quería explorar el mundo y no le temía a los cambios.

Él comenzó a buscar a Ana Laura cuando no volvió a casa. Primero preguntó a amigos y amigas de la niña sobre su paradero. Un par de días después acudió a la Fiscalía del Estado de México para toparse de frente con autoridades indiferentes. 

“Me dicen que tienen muchos casos, que tiene mucho trabajo, pero ya estoy muy preocupado, solo quiero a mi hija de vuelta”, refirió el padre de Ana Laura a medios de comunicación.

Elib Ortiz comenzó a dividir su día entre insistir a la Fiscalía, visitar el anfiteatro de Tlalnepantla, y publicar avisos y solicitudes de auxilio en sus redes sociales, buscando a Ana Laura hasta debajo de las piedras.

En tanto, una amiga identificada como Vanessa, señaló que la desaparición de Ana Laura era muy extraña, pues nunca se iría sin avisar. “Ella siempre regresaba a casa, y si no siempre avisaba, su papá la quiere mucho, ella no se iría sin avisar” , dijo la joven a Milenio.

Ahora, el muro de Facebook de su padre, quien durante tres semanas publicó imágenes de Ana Laura difundiendo su ficha de búsqueda o fotos de la joven, se ha convertido en un espacio en el que familiares, amigos y desconocidos le dan condolencias. 

“Fuiste una niña tan estudiosa, tan inteligente, trabajadora, una gran guerrera… Fuiste una buena persona, un gran corazón”, escribió Ángel Reyes.

Sin embargo, todavía no está claro por qué el cuerpo de Ana Laura apareció en Jalisco y cómo fue desaparecida.

Yolanda Martínez, otro “suicidio” que hasta la fecha no se ha comprobado

La mañana del 31 de marzo de 2022, Yolanda Martínez, una joven de 26 años, salió a buscar trabajo.

Yolanda había vuelto a la casa de su padre, donde vivía junto con su hermano, sin embargo, como le quedaba lejos de su hija, decidió irse a vivir con su abuela materna el 28 de marzo.

Tres días después salió de la casa ubicada en San Nicolás de los Garza, en Nuevo León, pero ya no volvió. Su cuerpo fue localizado el domingo 8 de mayo en el municipio de Juárez, a unos 30 kilómetros de donde fue vista por última vez. 

Al igual que el padre de Ana Laura, Gerardo Martínez comenzó a buscar a su hija cuando desapareció. Primero le llamó el día que desapareció, le mandó mensajes por WhatsApp, pero al no haber respuesta comenzó a tratar de localizarla con familiares y amigos. Nadie había visto a Yolanda. 

Hasta el 4 de abril logró que las autoridades de la Fiscalía de Nuevo León admitieran su denuncia por desaparición. “Usted espérese en su casa, porque ahí va a llegar el grupo de búsqueda para ponerse de acuerdo y montar la estrategia”, contó Gerardo Martínez que le dijeron en la Fiscalía.

Después de una semana en la que las autoridades ni siquiera lo buscaron, Gerardo reanudó la búsqueda de Yolanda. Esos días encontró por su cuenta unos videos de las calles aledañas de donde salió la joven aquel 31 de marzo. 

Como te lo explicamos en esta nota, cuando la Fiscalía de Nuevo León recogió los restos de Yolanda se apresuró a decir que la causa de la muerte fue un suicidio, aunque no ofreció ninguna prueba. 

Más de un mes después, la causa de la muerte de Yolanda todavía es una incógnita.

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Violencia contra las mujeres

Entre enero y abril de este año, en México se registraron 310 feminicidios. La cifra es menor a la registrada en el mismo periodo del año pasado, que tuvo 332 reportes, de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. 

Sin embargo, la violencia contra las mujeres no cede. En los primeros cuatro meses de este año, 37,446 mujeres han sido víctimas de algún tipo de violencia. De éstas, 848 fueron víctimas de homicidio doloso y 1,215 de homicidio culposo, cifra que está por encima de las 1,064 registradas en el mismo periodo de 2021. 

Además las lesiones dolosas hacia ellas, es decir los golpes y agresiones intencionales, han tenido un repunte para acumular 6,626 denuncias en los primeros cuatro meses de este 2022, registrando un pico en marzo, con 1,906 casos. Esta cifra es la más alta desde mayo de 2016, cuando se reportaron 2,270 denuncias de lesiones dolosas en contra de mujeres. 

En tanto, las denuncias de violencia familiar alcanzaron un nuevo récord en marzo de este año, con 23,971, la cifra más alta desde que comenzó a registrarse en 2015. 

Mientras que las llamadas de emergencia al 911 para reportar casos de violencia contra la mujer, entendidos como un acto violento que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como amenazas, alcanzó la cifra más alta de la que se tenga registro con 31,849 llamadas. 

¿La violencia contra la mujer es incontenible en México?

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