Muchos mexicanos dirán: ¡por fin bajó la gasolina, el presidente está cumpliendo su promesa!
Y sí, bajó la gasolina, pero no estrictamente por orden de Andrés Manuel López Obrador, sino porque el precio depende de varios factores que las autoridades no han mencionado, como tampoco dirán que, en realidad, es una mala noticia para el país.
Lo primero, y hasta de sentido común, es que debido al coronavirus la gente no puede salir, así que la demanda de la gasolina no será la habitual y no todas las personas se beneficiarán del bajo costo en la gasolina.
Pero vamos por partes.
El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo: “decidí bajar el precio (de la gasolina) para que no se sienta tanto la crisis económica”, pero aunque el presidente no hubiera dicho nada al respecto, la empresa petrolera mexicana habría bajado el costo de la gasolina sí o sí.
¿Por qué? Resulta que lo que cuesta el combustible depende de varios factores, entre ellos, el precio de importación, el cual ha bajado a nivel mundial debido a la pelea de costos entre Arabia Saudita y Rusia, dos de los mayores exportadores de petróleo del planeta.
El problema surgió cuando los rusos rechazaron la propuesta de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) de recortar la producción en 1.5 millones de barriles diarios debido a la disminución de la demanda por la crisis del coronavirus.
El desacuerdo ha hecho que las potencias petroleras inunden el mercado con descuentos en el costo del petróleo para intentar ganar terreno, lo que está provocando la fuerte disminución en el precio de la gasolina a nivel mundial y que las empresas de menor tamaño quiebren.
Así que, aún sin una orden presidencial, Pemex se habría visto obligado a bajar el precio, de lo contrario habría sido un escándalo que empresas como Shell, u otras marcas extranjeras que venden gasolina en nuestro país la estuvieran vendiendo cuatro pesos más barata.
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La gasolina bajó
El año 2020 arrancó con un costo promedio, en la gasolina regular, de 19.52 pesos por litro y, para la premium, de 20.86, precios que llegaron a 15.72 y 17.18 pesos por litro, respectivamente, al 27 de marzo de 2020, una disminución de 19.5% en la regular y de 17.6% en la premium, de acuerdo a cifras de la consultora PETROIntelligence.
Parecería que obviamente es una buena noticia para los consumidores considerando que, aún en los primeros días de marzo, llenaban el tanque de su auto con 878.4 pesos de gasolina regular –considerando una capacidad de 45 litros– y ahora con 707.4 pesos; 171 pesos menos.
También parece una noticia positiva para el gobierno
El precio del petróleo ha bajado tanto que el gobierno no necesita subsidiar la gasolina para que los ciudadanos se ahorren unos pesos.
Es decir, que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) puede recabar el 100% del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) –que es de 4.95 pesos por litro para la gasolina regular y de 4.18 para la premium, para 2020– y aún así pagar menos por litro que en enero.
El retiro del estímulo (o subsidio) ha ocurrido de manera consecutiva desde el 7 de marzo de 2020, y permanecerá igual, al menos hasta el 3 de abril del mismo año, pues es una decisión que puede cambiar cada viernes, de acuerdo a los cálculos de la SHCP, lo que es poco probable que cambie por el bajo costo del petróleo.
Ese escenario hace viable que el gobierno logre recaudar los 342 millones de pesos por IEPS a gasolinas que se planteó para 2020.
Entonces, ¿cómo puede ser una mala noticia para México?
Como se planteó inicialmente, el coronavirus está provocando que mucha gente permanezca en sus casas, así que “el gobierno no podrá recaudar los montos que planeó porque la gente no va a comprar la misma cantidad de gasolina”, aseveró Alejandro Montufar Helu Jiménez, economista y director general de la consultora PETROIntelligence, en entrevista con Cuestione.
“No es que México esté ganando más porque nos volvimos más eficientes, sino que es por un efecto externo al país, que en este caso hizo que la gasolina se esté malbaratando, incluso, si hubiéramos tenido impuestos bajos (IEPS), no habríamos visto la diferencia”, mencionó el economista.
Además, el precio de la mezcla mexicana de petróleo está en su nivel más bajo de la última década, –incluso, más baja que en 2009– debido a la presión de los costos del mercado internacional, lo que perjudica aún más a Pemex, considerando la crisis económica que ya venía arrastrando.
Ahora lo que sucede es que “nos cuesta más (al gobierno y en consecuencia a los ciudadanos) porque se ocupan más recursos públicos para ayudar a Pemex”. Y con la baja del costo del hidrocarburo “hay menos riqueza en el país porque las exportaciones valen menos y se pone en riesgo la inversión extranjera en México”, agregó Montufar Helu.
Por otro lado, “aunque se ponga de acuerdo Arabia, Rusia y Estados Unidos no será suficiente para detener el efecto del paro de la economía provocado por el coronavirus”, declaró el director de PETROIntelligence.
¿Qué va a decir el presidente cuando rebote el precio del petróleo y haga que la gasolina suba de precio?
