Una promesa común durante las campañas en las elecciones estatales de 2015 era “Cárcel al gobernador”. Ese fue el caso de candidatos como Javier Corral, Miguel Ángel Yunes Linares y Jaime Rodriguéz Calderón El Bronco, quien prometió encarcelar a su antecesor, el priísta Rodrigo Medina.
Medina fue, efectivamente detenido y encarcelado… 19 horas. Y siete años después, el detenido fue el propio Jaime Rodríguez por presuntos desvíos de recursos. Con esta detención El Bronco se convirtió en el ex gobernador número 19 en ser detenido.
El sexenio con más investigaciones y detenciones a ex gobernadores hasta ahora ha sido el del expresidente Enrique Peña Nieto, cuando se detuvieron a 8 ex mandatarios. En lo que va del sexenio actual se han detenido a 7, pero también se han liberado a 5 de los que habían sido declarados culpables.
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Sexenio de Felipe Calderón
El primer gobernador en pisar una cárcel fue Mario Villanueva Madrid, mandatario de Quintana Roo entre 1993 y 1999. Fue detenido en Cancún, en mayo de 2001 acusado por los delitos de lavado de dinero, asociación delictiva y delitos contra la salud, originalmente fue sentenciado a 28 años de prisión. Sin embargo, fue liberado el 21 de junio de 2007, tan solo seis años después durante el gobierno de Felipe Calderón.
Aún así, a las puertas del Reclusorio Norte, en la Ciudad de México, volvió a ser capturado ese mismo día a petición de Estados Unidos, a donde fue extraditado en 2010. En septiembre de 2018, después de que Andrés Manuel López Obrador ganó las elecciones, Villanueva le pidió ayuda a través de una carta para terminar su sentencia en prisión domiciliaria en su casa en Chetumal, lo cual se le concedió.
El 7 de junio del 2011, en el Aeropuerto Internacional de Cancún, detuvieron a Pablo Salazar Mendiguchía, ex gobernador panista de Chiapas entre 2000 y 2006, por los presuntos delitos de peculado, ejercicio indebido del servicio público, abuso de funciones públicas, de autoridad y asociación delictuosa. Sin embargo, solo estuvo preso 17 meses en El Amate, Chiapas y continuó sus seis años de condena en su casa.
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Pocos meses antes de que terminara el sexenio del presidente panista Felipe Calderón, en mayo de 2012, detuvieron al perredista Narciso Agúndez Montaño ex gobernador de Baja California Sur entre 2005 y 2011 por el delito de peculado por 52,000,000 de pesos. El 15 de diciembre del 2012, quedó en libertad tras pagar una fianza de 31,700 pesos después de haber estado preso en La Paz.
Sexenio de Enrique Peña Nieto
Durante el sexenio de Enrique Peña Nieto siete gobernadores fueron vinculados a procesos en su contra. El primero fue Andrés Granier Melo, ex gobernador de Tabasco, quien desde 2014 pasó cinco años en prisión por peculado. En mayo de 2019 Granier, que gobernó Tabasco entre 2007 y 2012, recibió sentencia de libertad absoluta por parte de un juez federal.
Jesús Reyna García (gobernador interino de Michoacán en 2013) fue detenido en 2014, luego de que salió a la luz pública un video en donde aparecía al lado del ex líder de los Caballeros Templarios, Servando Gómez, La Tuta. Estuvo casi cuatro años en prisión hasta que en diciembre de 2018 fue liberado del penal David Franco Rodríguez en Michoacán, cuando López Obrador ya estaba en el poder.
En 2015, la Corte de Texas encontró culpable por lavado de dinero a quien fuera gobernador de Tamaulipas entre 2005 y 2010, Eugenio Javier Hernández Flores, por fraude bancario y la operación de un negocio con envíos de dinero sin licencia, y, según un informe de la DEA, también estaba vinculado con el narcotráfico.
Fue hasta octubre de 2017 que en México se inició un proceso en su contra e ingresó al Centro de Ejecución de Sanciones (Cedes), de Ciudad Victoria, acusado de los delitos de enriquecimiento ilícito y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
El siguiente escándalo entre los priistas fue la detención del ex gobernador de Coahuila Humberto Moreira en 2016, en un aeropuerto en Madrid, España. Fue ingresado a la cárcel de alta seguridad de Soto del Real y puesto en libertad días después.
El 25 de mayo de ese año, la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional española acordó archivar la causa en su contra por los presuntos delitos de blanqueo de capitales, malversación de caudales públicos, cohecho y organización criminal con el Cártel de los Zetas. Desde el 31 de mayo del 2015, la Procuraduría General de la República (PGR) había exonerado al ex gobernador de Coahuila, acusado de lavado de dinero.
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Guillermo Padrés Elías (ex gobernador de Sonora) se entregó después de que la Interpol emitiera una ficha de su búsqueda por defraudación fiscal, corrupción y operaciones ilícitas por 32,000 millones de pesos faltantes en el erario y defraudación fiscal por ocho millones de dólares y lavado de dinero.
En febrero de 2019 salió del Reclusorio Oriente de la CDMX después de haber pagado 40,000,000 de pesos para poder llevar su proceso en libertad.
Poco después, el 12 de marzo de 2017 fue detenido Flavino Ríos Alvarado, gobernador interino de Veracruz. Pasó seis días en el penal de “Pacho Viejo” después de haber pagado una fianza de 5,000,000 de pesos para enfrentar en libertad el proceso que se le abrió por los delitos de encubrimiento, tráfico de influencias y abuso de autoridad.
En 2019, fue exonerado de los delitos de incumplimiento de un deber legal y tráfico de influencias, derivados de la acusación por haber proporcionado al ex gobernador Javier Duarte un helicóptero del gobierno estatal en el que presuntamente logró fugarse en octubre de 2016.
Así como algunos gobernadores pisaron la prisión, también están los que pudieron pasar sus procesos legales fuera de esta o peor aún, los que solo estuvieron unas horas detenidos.
Tal es el caso de Rodrigo Medina de la Cruz ex gobernador de Nuevo León de 2009 a 2015 que estuvo preso el 26 de enero de 2017 durante 19 horas, en el penal de Topo Chico, acusado de peculado y daño patrimonial. Su denuncia y aprehensión vino desde la Unidad de Inteligencia Financiera; sin embargo, quedó en libertad.
Finalmente, para terminar el sexenio de los escándalos de corrupción, en 2017 se detuvo a Javier Duarte de Ochoa, ex gobernador de Veracruz, por los cargos de lavado de dinero y asociación delictuosa. Y también a Roberto Borge Ángulo, ex gobernador de Quintana Roo, por los cargos de aprovechamiento ilícito del poder, desempeño irregular de la función pública y peculado.
Duarte sigue en el Reclusorio Norte mientras que Borge permanece interno en el Centro Federal de Rehabilitación Psicosocial, en Ayala, Morelos.
Gobierno Actual
Actualmente, además de Jaime Rodríguez, por diversos delitos vinculados a actos de corrupción se encuentran presos los ex gobernadores de Nayarit, Roberto Sandoval; de Coahuila, Jorge Torres; de Aguascalientes, Luis Armando Reynoso; y de Puebla, Mario Marín.
En Estados Unidos están encarcelados César Duarte, ex mandatario de Chihuahua, y Tomás Yarrington, ex gobernador de Tamaulipas.
En lo que va del sexenio de López Obrador, 5 gobernadores vinculados a procesos han quedado libres: Mario Villanueva Madrid, ex mandatario de Quintana Roo quien puede continuar su condena en prisión domiciliaria; Andrés Garnier Melo ex gobernador de Tabasco; Guillermo Padrés ex gobernador de Sonora; Flavino Ríos, ex gobernador interino de Veracruz; y Jesús Reyna García, ex gobernador de Michoacán, quien había sido acusado de vínculos con la organización delictiva Familia Michoacana.
El ex gobernador de Nuevo León se sumó a una lista de mandatarios estatales que enfrentan procesos penales en la cárcel. La detención del gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón El Bronco, fue por desvío de recursos. Todo por la denuncia que presentó Samuel García en 2018 cuando aún era legislador.
