La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó irregularidades en la compra de vacunas por parte del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
El presunto daño a la Hacienda Pública es por 66,045,405 pesos. La causa es que casi 50 mil vacunas no se entregaron en el tiempo que establecían los contratos y el IMSS no aplicó las penas correspondientes por incumplimiento de contratos.
Te puede interesar: ¿Se acabó la corrupción? Piden dinero para corregir errores en certificados de vacunación COVID-19
¿Qué dice la Auditoría?
La ASF indicó en la segunda entrega del informe del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2020, que de 2,730,000 de dosis de vacunas adquiridas, casi el 2% no cumplieron con los lapsos de entrega previstos en los contratos referidos.
Este dato suena menor, sin embargo, estamos hablando de 47,543 dosis de vacunas que no se entregaron a tiempo.
Errores con la compra
Según el Reglamento de la Ley de Adquisiciones Arrendamientos y Servicios del Sector Público, cuando un contrato no se cumple tal como se estableció, se deben aplicar penas convencionales, es decir, una multa establecida entre las empresas y las instituciones para el caso de incumplimiento de la obligación principal o si ésta no se cumple de la manera convenida en el contrato.
En este caso, según la ASF, no se aplicaron las penas convencionales a los contratos U200361, U200363 y U200365 ni por el retraso en la entrega ni por no contar con todos los elementos.
“Se determinó la falta de documentación soporte de los pagos de las vacunas recibidas en los almacenes delegacionales del Instituto, como son órdenes de remisión, altas en el SAI, notas de crédito, aplicación de penas y órdenes de reposición de los contratos U190344, U200361, U200363 y U200365”, señaló la ASF en el documento.
“No es que las Unidades Compradoras “permitan” estas faltas o no reporten estos errores porque estén coludidas, simplemente ocurre en ocasiones porque hay confusiones en la cadena de control y de sanción” comentó un funcionario del IMSS en entrevista con Cuestione.
Según el funcionario, esto llega a ocurrir cuando la compra se recibe por el área que hizo la compra y esa misma dependencia desconoce cómo reportar algún atraso o falta.
Sigue leyendo: Pemex, el ganador en el presupuesto 2022; a salud y educación sigue sin alcanzarles
Las multas
De cualquier modo, la ASF señaló que las penas calculadas por los administradores de los contratos del IMSS corresponden a 6,662,688 pesos por no acreditar la documentación. Además de 59,382,717 pesos porque no se aplicaron las penas convencionales ni las deductivas por el retraso en la entrega de las vacunas.
El Instituto acordó una fecha y forma de entrega de las vacunas para poder estar listos y realizar el Programa de Vacunación a tiempo con su calendario de actividades. Sin embargo, no recibió los fármacos a tiempo y no ha cobrado por los atrasos.
“Suena muy escandaloso el monto de presuntos daños al erario. Sin embargo, vienen de las cláusulas de los mismos contratos, no de que las empresas no hayan entregado las vacunas y de todos modos hayan cobrado”, agregó el funcionario.
Las recomendaciones
La ASF recomendó al Seguro Social que “realice las investigaciones pertinentes y, en su caso, inicie el procedimiento administrativo correspondiente por las irregularidades de los servidores públicos que, en su gestión, no acreditaron contar con la documentación soporte para el pago de las vacunas, como son: órdenes de remisión, altas en el SAI, notas de crédito, aplicación de penas y órdenes de reposición”.
La importancia de que el IMSS cumpla con sus funciones en cuanto a las compras no solo recae en los daños al erario público, sino en el cumplimiento de las campañas de vacunación por venir.
Tal es el caso de la campaña de vacunación contra la influenza que comenzó el 3 de noviembre, para la cual, de las más de 32 millones de dosis en todo el país, el IMSS suministrará 15.2 millones, según anunció el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez en la conferencia matutina del presidente de aquel día.
De acuerdo con el reporte de la ASF, la vacunación contra la COVID-19 le quitó prioridad a otras campañas. A pesar de que la vacunación se consideró una actividad esencial en todas las unidades médicas del IMSS, la reducción de la afluencia afectó de manera considerable la aplicación de estas en todo el país, con una variación negativa de 5.7 millones de dosis aplicadas entre 2019 y 2020.
“Durante la pandemia las personas no estaban seguras de si ir a vacunarse o no en su centro de salud por miedo al contagio o desconocimiento de si su Unidad Médica era centro COVID”, comentó el funcionario del IMSS.
Sin embargo, agregó que el Instituto espera recuperar la afluencia que se tenía antes del inicio de la pandemia para las campañas de vacunación y así lograr tener a la mayor cantidad de personas inmunizadas contra otras enfermedades.
Te puede interesar: Pemex y CFE causaron daños a la hacienda pública por 2,167 millones en 2019: ASF
