“La corrupción tiene una dimensión cultural”, nos explica Felipe Gaytán Alcalá, sociólogo e investigador de la Universidad La Salle. “Esto no debemos entenderlo como una tradición, sino que le llamamos cultura política”.
Gaytán Alcalá explica que en la cultura política se establecen acuerdos y valores que uno considera justos, pero “al no asumir estos compromisos se puede presentar la corrupción como esa posibilidad de que yo pueda robar sin ser atrapado o sin ser castigado, es ahí donde entra este rasgo cultural”.
Para Javier Sepúlveda, especialista en Derecho Constitucional, “la corrupción es parte de un sistema”. Y “en México se premia la sagacidad”, señala al hablar de cómo vive el mexicano día a día esta práctica. “En nuestro país es un acto muy burdo, abierto, que se expresa y se reconoce”.
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¿La corrupción es un rasgo cultural del mexicano?
El investigador de la Universidad La Salle mencionó dos momentos del expresidente Enrique Peña Nieto que destacaron durante su gobierno. En agosto de 2014, durante una entrevista con el periodista León Krauze dijo que “había un tema cultural lamentablemente que había provocado corrupción en todos los ámbitos y órdenes, tanto privado como público”.
En aquella ocasión, nos señaló Gaytán Alcalá, el expresidente mencionó que esto no era “un tema exclusivo del orden público” sino que “se alimenta de ambos lados y ha sido así”.
Peña repitió esta idea en el Foro Económico Mundial de mayo 2015. Cuando mencionó que la corrupción era “un asunto de orden a veces cultural, un flagelo de nuestras sociedades especialmente latinoamericanas”.
Estos comentarios generaron burlas, pues el mandatario sugirió que si realmente queríamos “lograr un cambio de mentalidad, de conductas, de práctica, de asimilar nuevos valores éticos y morales debe ser un cambio estructural desde la sociedad”.
Peña Nieto fue criticado porque parecía que hacía referencia “al mexicano en su identidad, a que en sus valores, en sus propios usos y costumbres es corrupto”, agregó Gaytán Alcalá. El experto nos explicó que a “lo que refería y que mal explicó el expresidente fue de que hay un elemento de cultura política en nuestros marcos de convivencia”.
La corrupción no es de ahora, está presente en nuestra historia, comentó el especialista. “En la Colonia decían estas famosas leyes que nos mandaban de España de la Corona: ‘cúmplase pero no se acate’. Es decir, recibe el mandamiento pero no lo cumplas y eso también abonó y por eso la corrupción se vuelve un tema cultural”.
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Una conducta aprendida
Para el doctor Sepúlveda en la sociedad mexicana no estamos acostumbrados a vivir en la corrupción, sin embargo es “una conducta aprendida”. En el sentido estricto, “todos hemos sido corruptos aunque sea en una ocasión, a propósito de las mentiras y las verdades”.
Gaytán Alcalá, sociólogo de la Universidad La Salle, precisó que es bueno entender que “la corrupción no solo la hacen los políticos y funcionarios, la realizan también los ciudadanos y esto tiene que ver con nuestros marcos de convivencia”.
En este sentido aclara que “el corrupto no solamente es alguien que robe dinero o recursos, también lo es aquel que no cumple lo que está diciendo o corrompe al otro para que haga cosas malas; entonces esto también tiene que ver con una cuestión normativa. Si nuestras leyes no castigan, entonces eso te da margen para la impunidad”, finalizó.
