COVID-19 afecta ingreso, nutrición y salud mental de millones de hogares en México

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Seguridad de las familias también en riesgo

Nuestro país está a punto de cumplir 60 días de haber iniciado la jornada nacional de Sana Distancia. El 23 de marzo de este año, la cotidianidad que caracterizaba la vida de millones de mexicanos se vio abruptamente modificada por la amenaza de un nuevo virus que ha afectado a todo el mundo: el COVID-19.

Desde esa fecha, millones de micros, pequeñas y medianas empresas (MiPYMEs) tuvieron que detener sus actividades por órdenes del gobierno federal. Eso incluyó a centros comerciales, gimnasios, cines, tiendas de ropa y mercancías, así como un sinfín de negocios (formales e informales) cuyos ingresos se han visto afectados desde entonces, poniendo en peligro la -ya de por sí frágil- estabilidad financiera de millones de familias mexicanas.

Por este motivo, la Universidad Iberoamericana, a través del Instituto de Investigaciones para el Desarrollo con Equidad (EQUIDE), realizó la primera Encuesta de Seguimiento de los Efectos del COVID-19 en el Bienestar de los Hogares Mexicanos (ENCOVID-19) con el objetivo de estudiar y cuantificar los impactos que la crisis sanitaria está ocasionando en el bienestar de estos hogares.

Los principales resultados, que toman en cuenta factores como el empleo, el ingreso, la salud mental así como la nutrición de los hogares mexicanos, son alarmantes

  • Tan solo en la primera quincena de abril se estima que entre 5.2 y 8.1 millones de personas perdieron su empleo, fueron “descansadas” o no pudieron salir a buscar trabajo. Esto equivale entre el 11% y 14% de la población en edad y capacidad de trabajar (población económicamente activa) en nuestro país.
  • Entre febrero y marzo, uno de cada tres hogares reportó una reducción de -50% o más en sus ingresos. En 2019 el ingreso promedio de los hogares era de 16 mil 536 pesos mensuales, por lo que ahora sería de la mitad en un tercio de las familias.
  • Uno de cada cuatro hogares reportaron ver afectada la cantidad y calidad de sus alimentos por falta de recursos económicos, es decir, sufre de inseguridad alimentaria moderada o severa.
  • Aunque dos de cada tres hogares analizados reportaron estar acatando las medidas de resguardo, poco menos de la mitad (46%) cuenta con recursos suficiente para cumplirlas hasta el 30 de abril. 
  • La causa más mencionada (90.4%) para justificar que no se atienden las medidas de sana distancia es por la necesidad de salir a trabajar o de salir a buscar trabajo.
  • Finalmente 27.3% de los individuos de 18 años o más presentaron síntomas depresivos y 32.4% síntomas severos de ansiedad.

¿Cómo se realizó la encuesta?

Ante el anuncio de las autoridades oficiales de que a partir del 31 de marzo todas las encuestas presenciales realizadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), las cuales permiten obtener información sobre estos temas, serían suspendidas hasta nuevo aviso, el EQUIDE se dio a la tarea de recabar información que permita valorar el impacto de la crisis del COVID-19 sobre en el bienestar económico, así como el estado de salud y nutrición de las familias mexicanas.

Por ello, entre el 6 y 14 de abril, encuestó a 800 personas mayores de 18 años de todo el país a través de sus teléfonos móviles, siguiendo la metodología que han aplicado otros expertos, académicos y empresas encuestadoras durante el periodo de contingencia sanitaria. 

El análisis completo se puede consultar dando click aquí.

El impacto en seguridad también será negativo

La consultoría de inteligencia aplicada para la seguridad, Carstens Crisis & Risk Control, publicó su reporte de seguridad con las expectativas para mayo de este año a partir de la Jornada Nacional de Sana Distancia.

De acuerdo con su análisis, se ha reportado un incremento en al menos una docena de delitos desde que se establecieron dichas medidas. 

Entre ellos destaca el aumento en: homicidios, feminicidios, delitos informáticos, hackeo, robo de identidad y fraudes, extorsiones, saqueos a negocio (principalmente a tiendas de autoservicio), violencia intrafamiliar así como robo en sus distintas modalidades (negocio, a automovilistas, a casa habitación, así como a cuentahabientes saliendo de los bancos).

Las causas que la consultora identifica son: 

  • Que las instituciones encargadas de impartir justicia no están trabajando o lo hacen con lentitud e ineficiencia.
  • La pérdida de empleos así como dificultad para conseguir el sustento diario de millones de familias.
  • Muchos negocios y oficinas se encuentran cerrados y sin vigilancia adecuada.
  • Familias que se encuentran en casa tienen patrones predecibles de conducta.
  • La atención de los medios, la ciudadanía y la propia autoridad están distraídas con la pandemia.
  • La reducción de tráfico en las calles permite un escape más sencillo y rápido para los delincuentes.
  • Dentro de los hogares, los ánimos por la condición de encierro generan irritabilidad, poca tolerancia y violencia.

¿Qué acciones puede llevar a cabo la gente para resguardar su seguridad?

Ante la expectativa de un incremento mayor en la incidencia delictiva para mayo, la consultoría recomienda a la población:

  • Reforzar las medidas de detección, prevención y control de accesos en casa.
  • Asegurarse que la entrega a domicilio se haga por una sola persona y que muestre identificación con fotografía antes de abrirle la puerta.
  • Interrumpir la comunicación en forma inmediata frente a comunicaciones hostiles.
  • Ante escenarios de violencia alejarse inmediatamente y no involucrarse.
  • No detener el vehículo si reciben un golpe leve o les avisan de que su llanta está baja.
  • Si tu negocio no está operando colocar protección perimetral y alarma.

Aún no queda claro el fin de la contigencia para las zonas urbanas de la capital y, de acuerdo con el propio subsecretario de salud, Hugo López-Gatell, la normalidad a la que estábamos acostumbrados nunca va a regresar. 

Por ese motivo, es urgente que el gobierno plantee estrategias para atender de forma integral los efectos negativos del distanciamiento social, tanto en lo económico como en lo social así como la seguridad, tomando en cuenta las opiniones de los distintos sectores para evitar que dichas medidas sean más costosas que el propio virus. 

¿Cuál será el saldo final que traigo consigo el COVID-19 en nuestro país?

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