Es difícil que ex trabajadores de Mexicana se incorporen a la nueva aerolínea de la 4T

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Trabajadores jubilados de Mexicana de Aviación y abogados laboralistas calificaron como “un triunfo parcial” para el ex personal de la aerolínea, la compra de la marca y los bienes de la empresa -sin operar desde 2010- por parte del gobierno de México.

Fausto Guerrero, presidente de la Asociación de Jubilados, Trabajadores y Ex trabajadores de la Aviación Mexicana (AJTEAM), y el abogado Joaquín Ortega, quien representa a ex empleados de Mexicana que demandan sus liquidaciones, nos explicaron que es improbable -mas no imposible- que ex personal de la aerolínea se integre a la nueva empresa de aerotransporte de pasajeros que será operada por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

A inicios de este mes de enero se informó que los sindicatos de Mexicana de Aviación aceptaron la oferta de compra por $815,000,000 de pesos para que la marca de la aerolínea, un par de edificios en Guadalajara y la Ciudad de México, un piso en la Avenida Balderas y un simulador de vuelo pasen a manos de la Sedena.

Previamente, en su conferencia matutina del 5 de diciembre de 2022, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que el objetivo es que la nueva aerolínea comience a operar a finales de 2023 junto con el Tren Maya. El mandatario señaló que se ofrecería una “recompensa” a los trabajadores de Mexicana por el uso de la marca.

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“Se está haciendo el avalúo sobre la marca de Mexicana para presentar a los trabajadores, que ya aceptaron, los trabajadores de Mexicana, tanto los que estaban en activo, siguen en activo, siguen jubilados, aceptaron el que se pueda entregar la marca a cambio de una recompensa que se va a fijar de acuerdo a un avalúo que ya se está realizando para que esos ingresos se distribuyan entre los trabajadores de la antigua Mexicana”, explicó López Obrador en la conferencia.

Abandono y quiebra

En 2010, luego de que se registraron diversas violaciones a sus derechos laborales, los trabajadores de Mexicana se declararon en huelga; entonces, el 28 de agosto de ese mismo año la aerolínea -con casi un siglo de brindar servicio- paró operaciones para someterse días después a concurso mercantil ante la falta de liquidez por adeudos que superaban los $15,000 millones de pesos, carga contractual, y los efectos de la crisis económica mundial de 2008 y del brote de influenza AH1N1 sobre el tráfico de pasajeros.

En abril de 2014, la jueza Edith Alarcón decretó la quiebra de Mexicana de Aviación, lo que dejó indefensos a más de 8,600 trabajadores sindicalizados y jubilados, “quienes iniciaron una larga resistencia ante el desmantelamiento de los contratos colectivos de trabajo, y que acabó con un ícono de la industria aérea nacional”, según un reportaje del portal Pie de Página.

Al respecto, Fausto Guerrero, dirigente de la AJTEAM, nos contó que durante el conflicto en Mexicana “fuimos abandonados por nuestro sindicato (la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación de México)”, por lo que decidieron organizarse en asociación civil con casi 500 compañeros jubilados, de los cuales actualmente quedan alrededor de 220.

“Finalmente hemos dado la batalla política, jurídica, en todos los sentidos; tuvimos que sacrificar parte de nuestros derechos para encontrar un punto de acuerdo y no permitir que los bienes de Mexicana se siguieran depreciando, y que los compañeros jubilados siguieran falleciendo sin obtener un beneficio respecto a la venta de estos bienes”, abundó el ex trabajador de la aerolínea.

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¿Beneficio para los trabajadores?

Guerrero nos explicó que la compra de Mexicana por parte del gobierno de la 4T no implica compromiso alguno para que el personal de la aerolínea recupere su empleo: “no hay vínculo jurídico que lo establezca; simple y sencillamente se compraron los bienes. Lo único que dejamos en la mesa es que la secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde, lleve al Presidente la solicitud de que si hubiera compañeros que quisieran ingresar a la nueva empresa, pues que se les dieran las facilidades, pero sería un número minoritario”.

Por su lado, el abogado Joaquín Ortega nos dijo que “es difícil” que se reincorporen trabajadores de Mexicana a la nueva empresa, aunque -aclaró- “la posibilidad ahí está”.

“La mayor parte de los trabajadores que laboraban en 2010 ya no lo son, aproximadamente unos 6,000 consiguieron trabajo en otra parte y tuvieron que renunciar a Mexicana para conseguir otro trabajo. Además, los que se podrían reincorporar ahorita estarían en una edad que no es tan apropiada para seguir trabajando en la aviación”, abundó.

Incluso -agregó el abogado-, los trabajadores de tierra y todos los de cabina tendrían que actualizarse en su preparación y conocimientos sobre las actuales aeronaves.

“La situación desesperada y la prisa que tienen los trabajadores los obligaron a ponerse de acuerdo en el reparto de bienes. Hicieron un convenio de distribución estrictamente proporcional al salario y antigüedad de cada quien. Es un triunfo parcial, pues obtendrán al menos cinco meses y medio de salario. Hay compañeros que no pueden hacerse ni siquiera una tomografía porque no tienen recursos; muchísimos compañeros se quedaron sin régimen de Seguridad Social”, nos dijo Ortega.

Ortega y Fausto Guerrero coincidieron en que los poco más de $800,000,000 de pesos que se pagarán por la compra de Mexicana son insuficientes para cubrir las liquidaciones de los ex trabajadores de la aerolínea.

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“Los laudos tienen una sumatoria de alrededor de $9,000 millones de pesos; es obvio que este dinero no alcanza para cubrir la totalidad; quizá estará cubriendo escasamente el 10% de los laudos… los recursos serán repartidos de manera proporcional según los salarios que cada quien venía devengando al momento de la quiebra”, nos indicó el dirigente de la AJTEAM.

¿El gobierno funcionará como empresario?

Respecto a si pudiera ser un mal augurio que la nueva Mexicana de Aviación sea controlada por el gobierno a través del Ejército, Fausto Guerrero nos señaló: “la historia nos ha dicho que las empresas que ha tocado la 4T y gobiernos anteriores han tenido malas experiencias; incluso Pemex, siendo una empresa boyante a nivel internacional, pues la dejaron caer. Creo que habría que esperar los resultados. Estamos rompiendo paradigmas a nivel nacional; es una experiencia nueva; tendríamos que esperar para valorar si fue buena o mala decisión”.

El dirigente de la AJTEAM resaltó que Mexicana de Aviación retomará el vuelo con capital netamente mexicano, a diferencia de otras empresas, como Aeroméxico, que su capital mayoritario es extranjero.

Finalmente, el abogado Joaquín Ortega nos dijo que la aviación es un negocio que a veces necesita subsidio y que el gobierno, “al ser solvente”, lo puede subsidiar: “hay épocas en que sube la turbosina y las aerolíneas no ganan un solo centavo y se van a la quiebra. Una subvención constante es indispensable para las aerolíneas; es una tarea que le corresponde originariamente al Estado que es, por definición, solvente”.

“Así que si el gobierno no roba -como ocurrió durante los sexenios de Miguel de la Madrid y los subsiguientes con las empresas estatales-, puede sostener perfectamente una aerolínea a muy bajo costo y muy alta calidad”, concluyó el defensor de los ex trabajadores de Mexicana.

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