La variante Ómicron, notificada por Sudáfrica a la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 24 de noviembre de 2021, tiene pendiendo de un hilo a todo el mundo por su alto nivel de infección. Aunque no es posible afirmar que el incremento de contagios en México, que ha rebasado los 40,000 casos diarios en la última semana, se deban especialmente a esta cepa.
Y es que esta variante es una de las últimas representaciones de múltiples mutaciones del virus SARS-CoV-2, como lo han sido sus antecesores Alfa y Delta, entre otras, como te lo contamos en esta nota.
Algunos de los peligros que representa la variante Ómicron son mayor riesgo de reinfección en pacientes que ya han presentado COVID-19, aumento de personas contagiadas, dificultad para detectarlo en las pruebas PCR que se utilizan regularmente para el SARS-CoV-2.
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Esto debido a que las pruebas PCR no consiguen detectar el gen S, uno de los genes que contiene la Ómicron y que la hacen diferente a otras mutaciones. Por esta razón los pacientes que sospechen presentar los síntomas de esta enfermedad deberán esperar la confirmación del diagnóstico por medio de una secuencia de exámenes.
Sin embargo, Albert Bourla, director ejecutivo de Pfizer, aseguró este lunes que esta ola de contagios será la última que vivamos con alto nivel de restricciones, a pesar de que el virus del SARS-CoV-2 circulará durante muchos años más, además de adelantar que en marzo esta farmacéutica ya tendrá la vacuna para la variante Ómicron.
El ejecutivo resaltó la seguridad y eficacia de las vacunas, aunque adelantó que serán necesarios los refuerzos anuales, además de la aplicación de tres dosis.
“Es importante que las personas reciban el régimen de tres dosis de la vacuna contra el coronavirus de Pfizer, y es probable que luego requieran refuerzos anuales, aunque los inmunodeprimidos podrían requerirlos cada cuatro meses”, señaló en entrevista para el medio francés BFM TV.
También afirmó que la autorización del uso de emergencia de la píldora Paxlovid cambiará la forma de tratar casos graves de la COVID-19 y anunció la fusión con la empresa francesa Novasep, para elaborar tratamientos contra el coronavirus mediante pastillas.
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¿Por qué es más contagiosa?
Según María Van Kerkhove, epidemióloga líder técnica para la COVID-19 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), hay tres razones principales por las que la variante Ómicron tiene mayor capacidad de infección.
Primero, porque esta variante del virus desarrolló mutaciones que le permiten adherirse más fácilmente a las células humanas. Segundo, porque existe el “escape de inmunidad”, es decir que las personas pueden reinfectarse aunque antes hayan tenido la enfermedad o se hayan vacunado.
Y tercero, porque Ómicron se replica en el tracto respiratorio superior, con lo cual es más fácil que se esparza el virus, a diferencia de la Delta y otras variantes que se replican mayormente en el tracto respiratorio inferior; o sea, los pulmones.
¿Ómicron significa el final de la pandemia?
Para Abril Violeta Muñoz, académica del departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la UNAM, hay que seguirnos cuidando porque sí esperamos un mayor número de contagios y aunque se presente una proporción menor de casos graves, existe la posibilidad de la saturación de los servicios de salud.
“Hablar del fin de la pandemia es un pronóstico aventurado, pero yo creo que probablemente ya va a ser más controlable y este año veremos el pico más alto probablemente en las últimas semanas de enero, primera de febrero; quizás tengamos una mitad del año más relajado, pero todavía debemos mantener las precauciones que se están tomando”, nos dijo la doctora en ciencias y epidemióloga.
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La experta explicó que el aumento de casos tiene que ver también con la relajación de las medidas preventivas durante las fiestas decembrinas, y la reactivación de la dinámica social: el regreso de los niños a clases, el regreso a los lugares de trabajo y la apertura de establecimientos.
Asimismo, afirmó que las vacunas “sí han sido de gran ayuda para que los cuadros sean más leves, pues estamos viendo que las personas que están llegando con cuadros graves, a hospitalización, son personas que no habían recibido la vacuna”.
Aunque no podemos asegurar que se avecina el fin de la pandemia, si podemos confiar en que las herramientas científicas, la inmunización y las medidas de prevención como distanciamiento social, uso de cubrebocas, lavado de manos y mantener áreas ventiladas, ayudarán a que este 2022 sea menos devastador para la población que los pasados dos años.
