Redes sociales, esa herramienta para ayudar a buscar a las personas desaparecidas

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A Wendy le gusta transformar cualquier material en arte. Desde pequeña tuvo la habilidad de ver una pieza de arte donde otros veían plástico, pinturas, etc. Vivía en San Francisco, Nayarit, aunque cada 15 días visitaba a su familia en Guadalajara. El 9 de enero de 2021, haría una de esas visitas pero nunca llegó. Su celular parecía estar apagado. No saben nada de ella. 

Desde entonces, Wendy pasó de ser la artista a ser la protagonista de las ilustraciones y afiches que amigos y desconocidos han hecho de ella para buscarla. Van acompañadas de los hashtags #TeBuscamosWendy o #TeEncontraremosWendy, que tan solo en la última semana han alcanzado a casi 6 millones de personas en Twitter.

En un solo día el caso de Wendy llega a 844,355 personas, de acuerdo con el monitoreo que realizó Cuestione, con la herramienta Tweet Binder. Familiares y amigos esperan que las redes les ayuden a regresar a casa.

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En México se han registrado 38,682 personas desaparecidas, oficialmente, de las cuales 21,807 ya fueron localizadas, de acuerdo con el Informe 2020 sobre búsqueda e identificación de personas desaparecidas, presentado por Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos. Y cada día parecen sumarse más. El hashtag #TeBuscamos se acompaña de nombres distintos, junto a una ficha con el rostro y la descripción de la persona desaparecida. 

Las familias, como la de Wendy, se rehúsan a quedarse de brazos cruzados porque temen que las autoridades no busquen a sus seres queridos, así que emprenden la búsqueda con lo que tienen a la mano: internet y sus redes sociales. 

Baruc, el hermano de Wendy, fue el primero en dar el aviso en Twitter, con la esperanza de que alguien la hubiera visto. Al día siguiente, él y su familia acudieron a la Fiscalía General del Estado de Jalisco, pero ésta envió la investigación a Nayarit, por ser el lugar de residencia de Wendy. 

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Redes sociales, aliadas en la búsqueda de Wendy

Baruc nos comenta que “el caso se viralizó, casi casi, a la par de que nosotros estábamos levantando la denuncia”. Durante el 11 y 12 de enero el hashtag #TeBuscamosWendy se volvió tendencia en Twitter.

A partir de esos días, las redes sociales han sido las grandes aliadas para visibilizar que Wendy aún no vuelve a casa. Baruc ha pedido ayuda en varias ocasiones a los usuarios de las plataformas digitales para posicionar el hashtag #TeBuscamosWendy, así como para compartir sus fotos y ficha de desaparición para poder localizarla.  

“Las redes sociales han jugado un papel clave en la búsqueda de Wendy con el posicionamiento de los hashtags #TeBuscamosWendy y #WendyTeVamosAEncontrar, así como la movilización en las calles, que también ha sido esencial para visibilizar su desaparición y exigir justicia”, de acuerdo con Signa Lab. 

La visibilidad en el caso de Wendy ha permitido que se les exija avances en las investigaciones a las autoridades de ambos estados, como con el hashtag #GobernadorDondeEstaWendy. Con eso, los usuarios esperan obligar a los gobernadores de Nayarit y Jalisco a prestar atención y comprometerse con la búsqueda. 

El nombre de mi hermana ya no le pertenece a mi familia. Hay muchos colectivos retomando el tema, y hay muchísimas personas tuiteando con su propia voz el caso. Nos sentimos acompañados por todas las muestras de cariño que se hacen en redes sociales, por todas las personas que se suman a utilizar el hashtag y pedirle resultados al gobierno” agradece Baruc. 

“El Estado se ha visto rebasado en los casos de desaparición de personas, y han sido los familiares y colectivos los que se han encargado de esta obligación del Estado, utilizando las redes sociales como una herramienta”, nos explicó Gabino Gómez, coordinador del área de personas desaparecidas en el Centro de Derechos Humanos de las Mujeres (CEDEHM). 

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El doble filo de las redes sociales en búsqueda

Alicia Mendoza tuvo que aprender a investigar, a realizar fichas de búsqueda y gestionar redes sociales para seguir con la averiguación sobre el paradero de su hijo Joshua Aldair Mendoza, quien con sólo 14 años de edad desapareció en Orizaba, Veracruz, el 8 de septiembre de 2012.  

Ella y el Colectivo Familias de Desaparecidos Orizaba crearon una página en Facebook en la que difunden información, fichas de desaparición que ella realiza y postea en redes sociales, mientras responde mensajes de las personas que solicitan su ayuda.     

Sin embargo, visibilizar la información de su hijo la puso en riesgo. “Una vez nos querían extorsionar a varios miembros del colectivo, habíamos puesto nuestro números personales en las fichas de desaparición y nos llamaron para decirnos que debíamos depositar 4,000 pesos si queríamos saber de nuestros familiares”, denunció Alicia. 

Esa fue una de las grandes lecciones que le ha dejado esta amarga experiencia y, por eso, ella aconseja poner el número telefónico de las fiscalías, en lugar del personal, en las fichas de desaparición para recibir informes. 

“Cuando te decides a hacer público tu caso en internet te expones a dos cosas: extorsión e información falsa. Es por ello que es mejor poner el número de las autoridades. Las ventajas que te ofrece esta herramienta es la rapidez de la exposición de tu caso”, comenta Gabino Gómez. 

Al igual que Joshua, otras personas han sido reportadas pero no localizadas. Tan sólo entre 2018 y 2020, Veracruz reportó a 565 personas desaparecidas, de acuerdo con la subsecretaría en Derechos Humanos Población y Migración de la Secretaría de Gobernación. 

Ya son casi nueve años que no sé nada de mi hijo, de no saber cómo está. Tú comes pero no sabes si él ya comió. No sabes si está pasando frío, ni donde está, si tiene sed, si anda de vagabundo o si ya lo mataron”, nos cuenta con la voz cortada.

Para Alicia lo más complicado de la búsqueda ha sido no contar con el apoyo de las autoridades. Recuerda que en 2013 ella y el colectivo tuvieron que interrumpir una conferencia en la que participaba el entonces gobernador de Veracruz Javier Duarte, para pedirle que los escuchara, pues las autoridades no estaban ayudándoles y ya iban a archivar la investigación. 

“Aquí cambian a los fiscales, que son quienes buscan a la persona desaparecida, casi cada año, y debes volver a contarles la historia desde el inicio porque no llevan una carpeta en la que hayan guardado los avances o datos, no se pasan el material y si lo hacen está incompleto”, nos comenta Alicia. 

La falta de coordinación cuando hay cambios dentro de la corporación, la falta de un expediente y la constante revictimización hacia Alicia al pedirle que contara una y otra vez la historia de la desaparición de su hijo, complicaban la investigación. “Uno de ellos (fiscales) me gritó que yo no quería cooperar para encontrar a mi niño”, comenta Alicia

Actualmente, continúa buscando a su hijo y coordina una página en Facebook para ayudar a difundir este tipo de casos. “Aunque a veces creen que detrás de las páginas estamos hasta seis personas, sólo soy yo, y es sorprendente que a veces, en menos de una hora, ya llegan a 3,000 personas que vieron la publicación, que pueden tener información sobre quienes desaparecieron y ayudarlos a llegar a casa de vuelta”, nos dice.

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Colectivos y @botDesaparecidx: otras alternativas

Al igual que Alicia existen más personas que han tenido que convertirse en expertas en búsquedas, redes sociales o rastreadores para poder encontrar a sus familiares, como es el caso de los colectivos Los otros desaparecidos de Iguala, La Alameda, Nuestras Hijas de Regreso a Casa, entre muchos otros. 

En estas páginas y foros, además de difundir información y fichas de búsqueda de las personas desaparecidas, también les llegan noticias o mensajes en los que les mandan la ubicación. También mapas con posibles hallazgos de cuerpos, a donde los colectivos y las familias acuden entre el miedo y la esperanza por encontrar al fin una respuesta. 

En México BotDesaparecidx ayuda a difundir los casos de personas desaparecidas a través de Twitter y Facebook, entre las dos páginas ya cuentan con más de 11,000 seguidores. “Con el uso de la programación, estas cuentas detectan y difunden publicaciones de personas desaparecidas en cuestión de minutos”, se lee en su sitio web.

Este bot fue creado, en diciembre de 2019, por Luis Yerik Arámbula Barrera, estudiante de Tecnologías Computacionales en el Tecnológico de Monterrey (TEC). 

“Vi un tweet buscando a alguna persona y ahí fue donde surgió la idea de crear un bot para que todos estos tweets estén en un solo lugar y tengan más difusión, así que me puse a investigar y en más o menos tres días logré tenerlo funcionando”, explicó el estudiante al medio de comunicación SinEmbargo.

El bot puede localizar los tuits gracias a hashtags como #desaparecido, #desaparecida, #alertaamber, #teestamosbuscando, entre otros. Además, los usuarios también lo etiquetan para difundir el mensaje. 

¿Cómo debemos actuar?

Cuando una persona desaparece lo primero que debes hacer es denunciarlo ante las autoridades. Ellos son quienes están obligados a buscarlos, además te ayudarán como guía para difundir tu caso, nos explicó Gabino Gómez, coordinador del área de personas desaparecidas en el Centro de Derechos Humanos de las Mujeres (CEDEHM).

Si tú o alguien a quien conoces pasa por esta situación denuncia ante la fiscalía de tu estado. Aquí puedes levantar un reporte en internet, las 24 horas del día, los siete días de la semana. También puedes reportar en los siguientes teléfonos 800-028-77-83 desde toda la República Mexicana o 185-52-62-31-09 desde el extranjero. Si eres de la Ciudad de México, aquí te pueden orientar. 

Durante los últimos años, las redes sociales se han convertido en una herramienta para visibilizar la búsqueda de las personas desaparecidas y mantener vigentes los casos en los que aún no ha habido respuesta, como el de Alicia, que lleva nueve años luchando por volver a ver a su hijo, o Wendy, quien aún no llega a su casa. 

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