Mientras el Ejército mexicano recibe cada vez más responsabilidades que deberían ser para civiles en el actual gobierno federal, su mando anterior, el general Salvador Cienfuegos, es acusado de narcotráfico y lavado de dinero.
¿Debería preocuparnos que el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) durante el sexenio de Peña Nieto haya sido detenido por la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA)?
¿Significa necesariamente que estamos poniendo las fronteras, las aduanas y hasta la administración del próximo aeropuerto de Santa Lucía en manos de una institución corrompida?
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Para entender más sobre el asunto, platicamos con el profesor de la Universidad de Nueva York, Oswaldo Zavala, experto en temas de narcotráfico, y quien opina que la detención de Cienfuegos es una oportunidad para replantear la agenda de seguridad entre México y Estados Unidos.
¿Qué hay detrás de la detención de Cienfuegos?
Para Oswaldo Zavala, es muy posible que se trate de un mecanismo de presión del gobierno estadounidense para que México regrese a la lógica de combate al narcotráfico.
“La política de seguridad antinarcóticos del gobierno federal tiene preocupados a los estadounidenses, porque se están modificando las relaciones, entre comillas, de cooperación con las agencias estadounidenses, en particular con la DEA”
Oswaldo Zavala, experto en temas de narcotráfico
Además agregó que, aunque no se sabe a ciencia cierta si ocurrió así, esto explicaría que haya sido una acción unilateral, sin haber avisado a las autoridades mexicanas ni a otras instancias de justicia de Estados Unidos.
La detención del general Cienfuegos echa a andar de nuevo la narrativa que tiene Estados Unidos sobre México, según Zavala, de que los criminales han corrompido nuestras instituciones y que necesitamos una guerra antidrogas más que nunca.
“A pesar de que se está desarrollando una muy preocupante política de militarización del país, pareciera que sí se ha modificado el grado de cooperación y de colaboración con el gobierno estadounidense en materia antidrogas”, señaló Zavala.
Entonces, si el caso de Salvador Cienfuegos llega a juicio, según el experto, se va a utilizar la narrativa de que el gobierno mexicano ha sido penetrado por el poder del narcotráfico, se va a reforzar la necesidad de la militarización antidrogas, “para avanzar o consolidar sus intereses” en nuestro país.
El impacto en el Ejército mexicano
En cuanto a la relación de los actuales mandos del Ejército y el general Salvador Cienfuegos, acusado de corrupción, el experto opina que sí la hay, “porque son finalmente una unidad de trabajo, hay muchísima gente relacionada con Cienfuegos”.
“Cresencio Sandoval estuvo bajo el mando de Cienfuegos, pues finalmente, él era el secretario de la Defensa, pero no creo que el Ejército sea una institución totalmente corrompida”
Oswaldo Zavala, experto en temas de narcotráfico
Para Zavala, los narcotraficantes no tienen controlado al Ejército, sino que hay altos mandos que han aprovechado su poder para extorsionar a traficantes.
El gran desafío del gobierno de López Obrador, según el experto, para que la actual administración de la Defensa Nacional se desmarque de sexenios anteriores, es que exista fiscalización, rendición de cuentas y mecanismos para evitar que se cometan atrocidades.
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“Y esto es muy difícil de hacer porque el Ejército es una institución altamente cerrada al poder civil, con muchísima autonomía, independencia y, como sabemos, profundamente dañada por corrupción sistémica en el interior”, dijo Zavala y detalló que “se sabe que desvían fondos, que solapan crímenes de lesa humanidad, etcétera”.
El especialista ve como una buena señal que detuvieran a los elementos de la Guardia Nacional vinculados al asesinato de Jéssica Silva durante la toma de la presa La Boquilla, en Chihuahua.
“No sé si esto es meramente simbólico, o si va a tener consecuencias reales, ya lo veremos, pero me pareció importante, cuando lo que hemos visto en gobiernos anteriores es que se protege a los agentes y se cierran filas por parte del Ejército”
Oswaldo Zavala, experto en temas de narcotráfico
Por otro lado, según Zavala, todo ejército de un país democrático depende de la estrategia y hasta el lenguaje del mando civil, “siempre su poderío está vinculado al tipo de relación que tiene con el gobierno”.
En el sexenio de Felipe Calderón el lenguaje fue bélico, “nuestro ejército fue una máquina de matar, porque así se le pidió que fuera. Incluso se hablaba de un horizonte de daños colaterales”.
Entonces, por ahora se ve un avance en el lenguaje y en las formas, según Zavala, pero se tiene que reforzar con una estructura de vigilancia.
“Estamos por ver si esto no es un regreso simplemente a la guerra, o si de verdad este Ejército va actuar de una manera contenida, fiscalizada y temporal, hasta 2024”, detalló.
El panorama
De todas maneras, para el experto, es muy preocupante que se les están otorgando tantas responsabilidades al Ejército.
“Les ha concedido un enorme poder, es muy preocupante para la sociedad civil que el Ejército vigile las fronteras norte y sur, que esté al control de las aduanas territoriales y marítimas y que encima vaya a tener el control y el lucro del Aeropuerto de Santa Lucía”, dijo Zavala.
El especialista opina que estamos ante un volado que requiere mecanismos muy serios, “sobre todo se requiere que se cumpla y se honre la fecha de salida del ejército haciendo tareas de seguridad en 2024”.
“Porque si no ocurre esto, tendremos que preocuparnos muchísimo y exigir como sociedad civil que regrese el ejército a los cuarteles y que se creen cuerpos civiles de seguridad”, explicó Zavala.
En cuanto a la relación entre Estados Unidos y México, el experto opina que hay que ver quién gana en las elecciones, si Trump o Biden, para ver cómo se va a reorientar nuestra política de seguridad nacional y si veremos continuidad con las políticas securitarias de gobiernos estadounidenses anteriores.
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Para Zavala, se corre el riesgo de que vuelva “la lógica de la guerra contra las drogas y militarización, la deportación masiva de migrantes criminalizados y la extracción de recursos naturales, que se relaciona siempre como un proceso complementario a la agenda de seguridad nacional”.
El gobierno mexicano tiene la oportunidad de replantear toda la agenda de seguridad nacional, según Zavala, que hasta la fecha se ha permitido en los términos del gobierno estadounidense. ¿Tendrá una estrategia para replantear esta agenda? ¿Veremos mandos de esta Sedena detenidos por autoridades estadounidenses?
