No es una novedad decir que el mundo en el que vivimos está cambiando vertiginosamente, sin embargo ¿en qué consisten exactamente estos cambios? ¿de qué dependen? y su impacto ¿será positivo o negativo?
A estos cambios que están ocurriendo a gran escala también se les conoce como mega tendencias y son las fuerzas estratégicas que están modelando nuestro futuro. Conocerlas y entenderlas es importante porque las sociedades en su conjunto pueden hacer una serie de cambios para incidir en ellas y a los ciudadanos nos corresponde exigirles a nuestros gobiernos que actúen en consecuencia.
Quizá la mega tendencia más importante por su impacto y repercusiones para la vida en su conjunto es el cambio climático. Para 2030 nuestro planeta será 1.5 grados más caliente que en la época preindustrial y las consecuencias de esto pueden llegar a ser catastróficas no solo para el planeta sino para la sobrevivencia de la humanidad. Sin embargo, no se trata de ser alarmistas y mucho menos de adoptar una actitud cínica al respecto.
Para contrarrestar el cambio climático se requiere adoptar medidas poco populares como eliminar los subsidios a los combustibles y adoptar fuentes de energía limpias. En Europa ya lo están haciendo, sin embargo, en México estamos caminando en sentido contrario debido a decisiones de corte político que no tienen nada que ver con el cuidado del medio ambiente.
El cambio climático no solamente va a provocar un grave deterioro ambiental que pone en peligro a los ecosistemas, hay numerosos estudios que demuestran que también tendrá un impacto negativo en la productividad mundial provocando más pobreza.
Otra mega tendencia es el crecimiento demográfico que tiene aspectos negativos, pero también muy positivos si la humanidad actúa coordinadamente. Para 2030 vamos a ser 8 mil 600 millones de personas en el mundo, sin embargo, esto no necesariamente implica más pobreza, más violencia y otros problemas que suelen asociarse con la sobrepoblación. En realidad, la economía mundial ha venido creciendo de manera sostenida y se prevé que seguirá creciendo lo que podría permitir alcanzar el objetivo fijado por las Naciones Unidas de reducir la pobreza mundial a un nivel de 3%.
El verdadero problema de la sobre población es precisamente ambiental, sin embargo, si los países logran trabajar coordinadamente para cumplir con los compromisos adquiridos en el Acuerdo de París que tiene como meta reducir la temperatura de la tierra, precisamente en 1.5 grados, la humanidad estará ante una nueva oportunidad.
Se tiende a pensar que el crimen y la violencia están relacionados con la sobrepoblación, sin embargo, las evidencias apuntan más bien al desempleo y a la inequidad. Si se atienden estos factores la violencia puede reducirse dramáticamente. Sin embargo, las predicciones para 2030 siguen señalando que para entonces el 1% de la población ostentará dos tercios de toda la riqueza mundial. Si las élites quieren evitar un mundo explosivo e inestable, necesitan asegurarse de que la riqueza esté mucho mejor distribuida.
No es sorpresa, por otra parte, que la otra gran mega tendencia es la hiper conectividad, ya la estamos viviendo, para 2030 se va a acentuar con implicaciones que ya se vislumbran. Para esa fecha, 25 mil millones de dispositivos estarán conectados a Internet.
Como el resto de las mega tendencias, las implicaciones de esta tienen aspectos positivos y negativos. Por ejemplo, la conectividad es uno de los precursores de la pluralidad y, por otra parte, la vida en las ciudades puede mejorar mucho gracias a sistemas para controlar el tráfico, el manejo de residuos y hacer más eficiente el transporte, por ejemplo.
Sin embargo, la hiper conectividad orilla a los tomadores de decisiones a actuar de forma precipitada para dar respuestas inmediatas a sus grupos de interés. Se requiere institucionalizar un pensamiento estratégico de largo plazo para evitar se tomen decisiones irreflexivas que afectan la vida de millones de personas.
Como sociedad, nos corresponde estar atentos a la evolución de todas estas tendencias y exigir a los gobiernos que tomen las decisiones correctas para potenciar sus efectos positivos y minimizar los negativos.
