Broma tras broma hasta que se nos borró la sonrisa porque sí tembló.
Hasta nos dejó medio atolondrados.
Algo así:
En fin, sobre el mensaje en la ONU de la paz mundial y el reconocimiento a Assange…
Mientras, la militarización quiere seguir avanzando y poco a poco gana terreno.
Nuevamente, algo así:
Son unos desalmados.
Y quién sabe quién los controla.
La corrupción sigue y sigue.
Los resúmenes cada vez son más largos.
Pero ya nadie puede hacerle frente. El Presidente ya es experto.
De lo más que podemos hablar es de sus cochineros.
O de su admiración por las políticas del pasado.
En los shows de las corcholatas, la ciudad de Claudia sigue en caos.
El Metro igual que siempre, abandonado.
A lo mejor le pueden sacar provecho.
Mientras, Ebrard se fue de turista a un funeral.