El embajador de México en Argentina, Ricardo Valero no quiso desembolsar 240 pesos mexicanos -de los 88 mil que gana al mes- para pagar por un libro en Argentina, y prefirió robarlo. El escándalo recién explotó esta semana, a pesar de que ocurrió en octubre de este año. Y las reacciones han sido contradictorias.
Mientras el Comité de Ética y de Prevención de Conflictos de Interés de la Secretaría de Relaciones Exteriores analiza el caso, en Argentina, un tribunal que atiende casos específicos de diplomáticos trata de decidir las acciones a tomar.
Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador -quien designó a Valero como embajador de México en Argentina en marzo de este año- fue más generoso. “Todos cometemos errores”, dijo en su conferencia matutina del 10 de diciembre, y pidió no lincharlo públicamente. Además, defendió su trayectoria.
El intento de robo de un libro de poco más de 200 pesos por el encargado de gestionar mejores relaciones y promover la imagen de México en Argentina, cargo por el que además cobra unos 88 mil pesos mensuales “se debe tratar en su dimensión, que no se afecte, que no se destruya la dignidad de las personas (…) solo el creador es perfecto”, dijo López Obrador.
¿Pero quién es Ricardo Valero ?
Valero ha sido un hombre cercano al hoy diputado, Porfirio Muñoz Ledo, desde hace décadas. Fue director General de Documentación y Asuntos Internacionales de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) en los años 70, cuando Porfirio Muñoz Ledo era titular de esa dependencia. También fue subsecretario de Planeación en la Secretaría de Relaciones Exteriores durante el gobierno de Miguel de la Madrid (1982-1988).
El embajador emérito Bernardo Sepúlveda Amor, a partir del escándalo, envió una carta al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubon, en la que habla sobre la trayectoria de Valero. En ella, explica que el embajador mexicano en Argentina solicitó en el gobierno de De la Madrid, ser embajador ante la Unión Soviética. Sin embargo, explica:
“Sin consulta previa, al término de su comparecencia en el Senado, Valero concedió una entrevista a Marta Anaya en el periódico Excelsior. En esa entrevista descalificó duramente las decisiones adoptadas por el Grupo Contadora y por su Grupo de Apoyo en torno a las negociaciones que se llevaban a cabo en esos momentos, a pesar de que Valero estaba directamente involucrado en ese proceso.
Como consecuencia de esas declaraciones impropias e injustas para la buena marcha de la política exterior mexicana, recibí instrucciones del Presidente de la Madrid de proceder de inmediato al cese de Valero como Embajador de México en la URSS.”
Así, Valero se quedó sin el cargo, pero no por mucho tiempo. Después se sumaría al Partido de la Revolución Democrática, del cual fue diputado y parte de la dirigencia.
Otra vez junto con Muñoz Ledo -quien fue designado por Vicente Fox como embajador ante la Unión Europea y Bélgica- fue nombrado embajador de México en Chile, de 2001 a 2004.
Hoy ha brincado a la fama después de que intentó robar el libro Giacomo Casanova, escrito por Guy Chaussinand-Nogaret, de una famosa librería en Buenos Aires, el 26 de octubre pasado.
Todo ocurrió cuando Valero (quien, paradójicamente, en la década de los 90 ocupó el cargo de General de Promoción Editorial y Bibliotecas de la Secretaría de Educación Pública) intentó salir de la librería e hizo sonar la alarma de seguridad. El personal del lugar lo detuvo y descubrió que el embajador había decidido no pagar uno de los ejemplares que llevaba en su bolsa.
El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, solicitó el regreso de Valero, para que responda por sus actos ante la Comisión de Ética de la cancillería. “De comprobarse que el video es veraz, será separado del cargo inmediatamente. Cero tolerancia a la deshonestidad”, escribió Ebrard en su cuenta de Twitter.
El “error” de Ricardo Valero
El asunto no fue menor porque se evidencia que la diplomacia mexicana, en la actual administración, “es igual que la diplomacia en otras épocas, en que había corrupción y una pésima conducta de los funcionarios”, dijo a Cuestione el exembajador de México en Cuba, Ricardo Pascoe.
Personal de la embajada de México en Buenos Aires señalaba a Valero “como completamente abstraído de la tarea, insolente con el personal y como una persona que creía que estaba fuera de toda posibilidad de cuestionamientos (…) El mensaje al mundo exterior es pésimo, porque lo que quiere decir es que este Gobierno, que prometió un profundo cambio, es simplemente más de lo mismo”, añadió Pascoe.
No es la primera vez que un político mexicano deja este tipo de huella de México en el mundo. El propio Porfirio Muñoz Ledo, mencionado por AMLO en la defensa de Valero, amenazó en 1985 con pistola en mano a un empresario por un incidente relacionado con el estacionamiento de su auto, cuando era representante de México ante la Organización de las Naciones Unidas.
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Las credenciales del Embajador Ricardo Valero
Ricardo Valero, quien en diversas ocasiones ha trabajado en cargos públicos con Muñoz Ledo, fue ratificado como embajador en la Cámara de Senadores, en abril de este año.
Las senadoras Josefina Vázquez Mota (PAN), Claudia Ruiz Massieu (PRI) y Beatriz Paredes (PRI), así como Félix Salgado Macedonio (Morena), fueron algunos de los legisladores que avalaron al diplomático.
Valero nació en la Ciudad de México, y además de sus cargos públicos también ha sido investigador y docente en la Universidad Nacional Autónoma de México, El Colegio de México, la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM).
Pero al parecer, al embajador mexicano que “olvidó” pagar un libro, también olvidó el lema de su gobierno: no mentir, no robar, no traicionar al pueblo.
