En medio de la crisis por el COVID-19, hay otra emergencia en la Ciudad de México que es más peligrosa y de la que nadie está hablando: el sarampión.
Era viernes 21 de febrero de 2020 y Bruno, de tres años de edad, comenzó con fiebres altas y dolor de garganta. Andrea, su mamá, aunque pensó que era una infección normal, lo llevó al pediatra, quien le recetó medicamentos para bajar la fiebre y un antibiótico.
La temperatura cedió dos días después. Pero al cuarto día, Bruno tenía sarpullido en la cabeza y en otras partes del cuerpo. A finales de febrero de este año le detectaron sarampión.
Bruno tuvo suerte: está vacunado y por eso sólo tardó en recuperarse poco más de una semana, dijo el médico particular a Andrea. No todos los niños y niñas son como Bruno, ya que de 2012 a 2018, bajó en 14.5% la aplicación de la vacuna SRP (que protege contra el sarampión, rubéola y parotiditis).
En 2012, 87.9% de los niños y niñas de entre 24 a 35 meses de edad había sido vacunada, mientras que en 2018 la proporción bajó a 75.1%de acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Más casos de sarampión
El caso de Bruno fue reportado en el kinder en el que asiste (como solicitó el pediatra), en la alcaldía de Azcapotzalco, de la Ciudad de México. Sin embargo, en las estadísticas oficiales de la Secretaría de Salud, no existe.
En solo cuatro días los casos de sarampión incrementaron en el país, al pasar de 16 a 26 entre el 13 y 17 de marzo, de acuerdo con la Secretaría de Salud.
Además de no contar a Bruno entre sus registros, la dependencia se contradice a sí misma, porque en un aviso epidemiológico del 13 de marzo, señala que hay 10 casos, todos importados (contagios que se dieron fuera del país); pero en otro informe, de ese mismo día, (que se desaparece cada que hay información reciente) refiere que son 16 los casos confirmados, y que las vías de transmisión están por ser dictaminadas.
Los otros datos
Sobre el tema, el presidente Andrés Manuel López Obrador, al parecer, tiene “otros datos”, pues afirmó en una conferencia mañanera, de principios de este mes, que no hay nada de qué alarmarse. La realidad es que en todo 2019 hubo 20 casos en el país, de acuerdo con la Secretaría de Salud, y ahora, con corte a 18 de marzo, la cifra ya fue rebasada al alcanzar los 26 casos.
En el mundo, los casos de sarampión también van en aumento. En 2018 fueron poco más de 280 mil casos, en tanto que en 2019 fueron más de 519 mil casos; un aumento de 83% de acuerdo con la Secretaría de Salud.
El Covid-19 tiene una tasa de transmisión de 2.5, lo que significa que cada persona con virus podría infectar entre dos y tres personas más. El sarampión tiene una tasa de transmisión de 18, es decir, que cada infectado puede contagiar a hasta 18 personas más, nos explicó Víctor Arias, médico epidemiólogo de la Unidad de Medicina Familiar 58 del Instituto Mexicano del Seguro Social, en entrevista con Cuestione.
La tasa de letalidad para el coronavirus es de 2.5 de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS); para el sarampión es de 0.2, de acuerdo con la Academia Nacional de Medicina de México.
Brotes de sarampión
El incremento de casos de sarampión se atribuye a los movimientos antivacunas, aunque también ha bajado la percepción de riesgo debido a que se creía que el sarampión ya estaba erradicado en el país.
Además, desde antes de la llegada del COVID-19 ya se sospechaba de un brote de sarampión, (una concentración de dos o más casos en determinado lugar), explicó Víctor Arias.
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Ante los casos de sarampión en la Ciudad de México se pensaba hacer un “barrido epidemiológico”, que significa la intensificación de aplicación de vacunas contra este virus en la Semana Nacional de Vacunación, que se llevaría a cabo del 23 al 27 de marzo.
Pero ante la alerta sanitaria por COVID-19, el personal médico aún espera indicaciones para saber cómo van a reorientar la campaña y se analiza si las vacunas se aplicarían en los domicilios de las personas.
Desde el inicio de este año hasta el 22 de febrero, en América había 393 casos y dos muertes por sarampión. Los países en los que se presentaron los casos fueron Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Estados Unidos y Uruguay.
Brasil fue el país de la región con un mayor número de personas con sarampión, al registrar 338 casos. En 2019, en el continente americano se observaron poco más de 20 mil 500 casos, de los cuales murieron 19 personas, de acuerdo con la Organización Panamericana de Salud.
¿Que es el sarampión?
Es una enfermedad viral muy contagiosa. Su transmisión es por diseminación de gotas suspendidas en el aire y al estar en contacto con flujo nasal y saliva de personas infectadas.
Tiene un periodo de incubación de entre siete y 21 días. Los síntomas son fiebre elevada, conjuntivitis (enrojecimiento de los ojos), catarro, tos y manchas pequeñas con centro blanco o blanco azulado.
Las complicaciones pueden ser infección del oído medio, en las vías respiratorias superiores que pueden provocar neumonía y panencefalitis (inflamación del cerebro), según información de la Dirección General de Epidemiología, de la Secretaría de Salud.
*Fuente. Aviso Epidemiológico CONAVE /07/ 2020/SARAMPIÓN
En México, existe una Norma Oficial Mexicana de vigilancia epidemiológica que obliga a personal médico, tanto de instituciones públicas, como de privadas (así como de cualquier dependencia federal que conozca casos de enfermedades como el sarampión) a reportarlos de manera inmediata.
Pero el caso de Bruno, que no forma parte de las datos oficiales de la Secretaría de Salud, evidencia que siempre hay “otros datos”.
