Esta semana empezó una campaña desde el Gobierno en contra del INE.
Se me hace raro que crean que el INE va a sabotearle las elecciones a Morena cuando el sabotaje parece ser interno con sus precandidatos.
La realidad es que el presidente se la pasa haciendo proselitismo en sus mañaneras, parece ser que su partido está muy nervioso.
Aunque, nuevamente, parece que también hay un sabotaje interno.
Y luego me culpan a mí.
Cada vez es más notorio que los errores solo son distractores.
Sobre eso, qué buen detalle para el General.
El Presidente dejó muy claro que respalda la decisión de la Fiscalía.
El Canciller recalcó que no hay tal delito.
Se criticó seriamente a la DEA.
Hablaron de falta de profesionalismo en su investigación.
Los seguidores del presidente tragaron sapos.
Y la gente real se enojó mucho.
Mucho.
Y no solo ellos, también EU.
El Metro de la CDMX sigue con problemas.
Y aunque ya abrieron algunas líneas, no parecen dar mucha confianza.
Ya que, desde aquel día, han habido otros incendios y descarrilamientos.
Y no solo hay fallas en el Metro, también en el sistema de salud de la ciudad. Lo bueno es que siempre pueden contar con sus bots.
Por más que maquillen los números, no les es suficiente.
Son números tan grandes que no es posible maquillar más.
Quizá por eso están tan enojados.
En datos curiosos, quien siempre se mete en problemas, por sus declaraciones, es Samuel García, quien ahora puso a pelear a los mexicanos de distintas partes del país.
Los dejo con dos memes.
