Van ya más de dos semanas desde que vecinos de una decena de colonias de la alcaldía Benito Juárez denunciaron que el agua de sus casas estaba contaminada: el líquido tenía una coloración turbia, una consistencia oleosa y con olor a gasolina.
Esto les provocó a varios problemas de salud y un fuerte impacto económico, pues destinaron muchos recursos a comprar garrafones para llevar a cabo todas sus actividades diarias.
En Cuestione entrevistamos a vecinos de la Benito Juárez de las colonias Del Valle y Nápoles. Todos concuerdan con que lo más preocupante es no saber qué va a pasar.
Te puede interesar: ¡Que no te multen! Así es cómo debes registrar a tu mascota en la Ciudad de México
Indignación vecinal
Octavio Guadarrama, un vecino de la colonia Del Valle, es propietario de una casa habitación y por ello, le dijeron que la limpieza de su cisterna no es prioridad. El gobierno quiere priorizar edificios altamente poblados.
Según el vecino, después de una llamada telefónica de 51 minutos donde 45 de ellos estuvo en espera con Atención Ciudadana, no recibió apoyo. “Yo entiendo, y hasta estoy de acuerdo que primero revisen los edificios, sin embargo, yo quería información, que me dijeran qué es, o qué puedo hacer yo por mi cuenta o qué servicio contratar si es o no gasolina, pero sólo me dijeron ‘ay, señor, lea las noticias, no es gasolina’ y me colgaron”, nos contó.
Antonio Salazar, un habitante de la colonia Nápoles, nos dijo que en su edificio también se organizaron para lavar la cisterna y les cotizaron 60 mil pesos. “Pero lo que a mi me interesa saber es si es suficiente, o qué tratamiento deberíamos pedir, pero no nos dicen nada”, agregó.
Lavado de cisternas
Como reportó El Universal, habitantes de condominios pagaron miles de pesos por el lavado de su cisterna, debido a que el Gobierno capitalino los puso en lista de espera desde el 10 de abril. “Sí estamos gastando. El total de lo que estamos pagando por el lavado de tinaco y de cisterna son 30 mil pesos”, dijo Georgina Rivapalacios, administradora de la unidad en entrevista con el periódico.
Ante la espera y sin fecha para ser atendidos, 60 familias y 118 residentes del condominio contrataron a una empresa privada para lavar la cisterna, compuesta por seis celdas y seis tinacos para dos edificios. Indicó que tuvieron que vaciar 15 mil litros contaminados.
A este gasto se suma el pedido de dos pipas de agua de 20 mil litros cada una, con un costo total de 5 mil pesos, todo en dos semanas, aun cuando el presupuesto condominal contemplaba una sola pipa y un lavado de cisterna hasta julio.
¿Culpa de Pemex?
Las alcaldías Benito Juárez y Álvaro Obregón designaron como coordinador para atender la emergencia a José Luis Luege Tamargo, ex director de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) quien, junto con varios especialistas a su cargo, también analizaron algunas muestras del agua contaminada.
En entrevista para W Radio, Tamargo dijo que es muy probable que Petróleos Mexicanos (Pemex) fuera la fuente de contaminación, ya que en el acuífero había un tipo de diésel que se pudo haber filtrado de algún ducto o depósito hacia la red de distribución de agua.
“Tenemos la misma información, pero ellos la ocultan”, señaló el ex titular de la Conagua, y afirmó que “preocupa la reacción del jefe de Gobierno” porque el contaminante del agua en la alcaldía Benito Juárez es un hidrocarburo, “técnicos de Pemex que yo conozco ellos me confirman que se trata de una especie de diésel… es un problema muy gordo” que, asegura, “afecta al acuífero”.
En entrevista para Así las Cosas con Gabriela Warkentin y Javier Risco, dijo que hay información precisa de que se trata de un hidrocarburo y esto rebasa al sistema de aguas y al gobierno de la ciudad, por ello demandó la presencia del gobierno federal, la Conagua, la Profepa e incluso de la Fiscalía General.
La versión no oficial
El 9 de abril, el Gobierno de la Ciudad de México aseguró el Pozo Alfonso XIII en Álvaro Obregón, que aparentemente solo abastecía a la zona afectada. Además, cerraron preventivamente dos empresas químicas cercanas, sospechadas de ser la fuente de contaminación por un tipo de aceite o lubricante.
Sin embargo, vecinos y personal de la alcaldía Benito Juárez cuestionaron los estudios del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex). Enviaron muestras a expertos de la UNAM, que señalaron que no se analizó la presencia de hidrocarburos. Las pruebas encargadas a Vasa Filtros por los vecinos revelaron sustancias derivadas del petróleo en el recurso.
Expertas de RED AGUAM de la UAM realizaron un análisis de tres muestras de agua tomadas el 15 de abril en la colonia Del Valle. Las pruebas, dirigidas por la doctora Judith Cardoso Martínez, mostraron un ligero aumento en el pH. También encontraron dureza en el agua, indicando presencia de carbonatos, bicarbonatos y compuestos orgánicos que pueden ser riesgosos para la salud.
La doctora Delia Montero Contreras afirmó que aún se desconocen las concentraciones exactas de residuos, pero el agua no cumple con los estándares básicos para su uso. RED AGUAM colaborará con especialistas de la UAM Cuajimalpa para medir la cantidad de derivados de petróleo en el agua.
Además, se necesita una revisión más exhaustiva de cisternas, tinacos y depósitos de agua, ya que podrían quedar restos de derivados de petróleo pese a las limpiezas.
Sigue leyendo: Medidas sostenibles y a largo plazo, la única solución para la crisis de agua de la CDMX
“Que no cunda el pánico”
En la mañanera del 17 de abril, Ana Elizabeth García Vilchis, directora de Redes de la Vocería de Presidencia, dijo que una “serie de falsas acusaciones han circulado respecto a la calidad del agua en la Ciudad de México”.
Según presidencia, la cobertura mediática sobre una “supuesta crisis” de agua por contaminación en un pozo ha sido malinterpretada, según García Vilchis. Negó la presencia de hidrocarburos o gasolina en el agua potable, así como informes sobre envenenamiento y hospitalización por consumo de agua contaminada. Afirmó que se están tomando medidas para limpiar tuberías y cisternas, y distribuir agua gratis a los afectados.
La Vocería también quiso desmentir rumores sobre gasolina en el agua y un supuesto incendio en alcantarillas, explicando que esas imágenes eran de incidentes anteriores y no relacionados con la situación actual.
En conclusión, la versión oficial es que se trata de una campaña de desinformación destinada a sembrar el miedo en la población. ¿Por qué desestiman tantas denuncias ciudadanas?
