La pandemia por la COVID-19 develó las debilidades, contradicciones y retos en el equipo de la primera jefa de gobierno de la Ciudad de México. Claudia Sheinbaum ha tomado decisiones contradictorias y difíciles de entender, que tienen a la capital del país al borde del colapso económico y sanitario.
Cuando todo comenzó, Sheinbaum fue presionada y convencida de la necesidad de cerrar totalmente la ciudad más grande del país. Pero eso fue hace 9 meses. Hoy, la jefa de gobierno malabarea las diferentes tonalidades de un semáforo color naranja, en su intento de mantener andando la economía más importante del país, cosa que es de aplaudirse. Pero… ¿qué pasó, qué cambió? ¿Por qué antes defendió cerrar la ciudad y hoy defiende mantenerla abierta?
Para tratar de entenderlo, quizás debemos de revisar cómo ha sido el gobierno de Claudia al frente de la ciudad. Polémico, errático. La jefa de gobierno parece atrapada entre distintas presiones: la de algunas de las personas o asesores que colaboran con ella y las del gabinete del presidente López Obrador.
Incluso, vaya, los pleitos que ha sostenido con personajes del gobierno de México han sido ventilados en los medios de comunicación.
Pero su choque con Hugo López-Gattel sobre el manejo de la pandemia no ha sido el único de los enfrentamientos de la jefa de Gobierno. Se peleó con empresarios cuando la iniciativa privada consideró que el presupuesto del gobierno de la ciudad era insuficiente para las necesidades de la población.
Y lo mismo pasó con el sector de la construcción cuando detuvieron las obras de la ciudad al grito de “no más corrupción” y se le desplomaron los indicadores económicos, como el del empleo en la ciudad.
La respuesta de la ex delegada de Tlalpan a las manifestaciones feministas es, quizá, el caso más emblemático de su administración, no solo por la forma en cómo ha lidiado con estas demandas, sino por la escasa atención a la violencia de género en la CDMX. Y más cuando prometió que el asunto estaría dentro de sus prioridades.
La inseguridad es alarmante. No hay fenómeno delictivo que no muestre números en crecimiento: el robo a transeúntes, domicilios o negocios es una señal de que urge una clara estrategia de seguridad.
Lo mismo sucede con respecto a la contaminación en la ciudad. Sheinbaum ha sido cuestionada porque, como científica e investigadora, no implementa estrategias que vayan más allá de la aplicación del “Hoy no circula”, que no termina por resolver la emergencia ambiental.
Pero ninguno de estos aspectos en su mandato toma tanta relevancia, como su lucha por mantener la ciudad activa y no cerrarla. Resiste a las presiones internas en su gabinete y a las presiones federales. Resiste a especialistas y a opinólogos por igual.
Es el manejo de la pandemia lo que ha marcado su gobierno y por lo que será recordada. En los primeros meses de la pandemia, la CDMX se entregó al llamado “semáforo rojo”. Eso paralizó la economía de la ciudad. Restaurantes, hoteles, lugares de entretenimiento y negocios se vieron forzados a cerrar. El argumento era frenar los contagios por el nuevo coronavirus.
Pero esa decisión tuvo un alto precio. Muchas personas se quedaron sin recursos para sobrevivir en una economía de por sí quebrada.
Y de pronto, volvimos a abrir nuestra ciudad, nos fuimos a “semáforo naranja”. La capital volvió a operar, como nunca debió de haber dejado de ocurrir. La pregunta es: ¿por qué cerraron en primer lugar? Lo único que logró fue empobrecer a su ciudad.
Seguimos esperando una estrategia integral que no ponga todas sus esperanzas en el uso del cubrebocas y el supuesto seguimiento de los contagios. Una estrategia que no dependa de una vacuna que no sabemos cuándo ni cómo llegará y que tampoco es la solución de la pandemia, como lo han advertido diferentes especialistas. Prohibir por prohibir no soluciona nada, y es una pobre solución a un problema como el que enfrentamos.
Dada la importancia de la capital del país en la economía nacional, se vuelve imperante revisar la actuación de la jefa de Gobierno y su administración.
Esta semana, en Cuestione, analizaremos su manejo de la pandemia, las decisiones arbitrarias que han dañado a la economía, el costo que ha tenido para cada persona que vive en esta ciudad, y las posibles soluciones que esta gran ciudad necesita.
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