La detención de Jorge Glas, ex vicepresidente de Ecuador, divide a los ecuatorianos. Mientras que el 74% de los ciudadanos apoya la política del presidente Daniel Noboa y un 26% no, algunos especialistas se atreven a declarar en el New York Times, que el quiebre de las relaciones diplomáticas entre México y Ecuador era justo lo que necesitaba el presidente de Ecuador porque podría garantizar su reelección para el 2025.
De acuerdo con el diario neoyorquino, la capacidad del presidente Daniel Noboa para restaurar la ley y el orden en Ecuador podría ser determinante para su reelección, cuya prioridad para su administración es la tarea de abordar las pandillas y combatir la corrupción dentro del gobierno.
Recordemos que Ecuador cerró el 2023 teniendo el año más violento de su historia, con más de 7,000 homicidios, de acuerdo con datos proporcionados por la policía a The Associated Press. Ese mismo año, fue asesinado el candidato Fernando Villavicencio antes de las elecciones presidenciales que se llevaron a cabo el 16 de octubre del 2023.
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El arresto de Jorge Glas, ex vicepresidente de Rafael Correa en la embajada mexicana, ha cimbrado a la comunidad internacional y los organismos internacionales. Sin embargo, expertos en política sugieren que estas acciones han generado en Ecuador un debate sobre la firmeza del presidente contra la impunidad del que podría salir beneficiado Noboa.
Aunque Daniel Noboa es muy popular en Ecuador, las encuestas muestran que su índice de aprobación cayó 11 puntos en los últimos meses, del 85% al 74%, en medio del aumento de la violencia en Ecuador, subraya el NYT y la ruptura con México, llega justo en este momento donde el líder de 36 años le estaría apostando a un segundo mandato presidencial.
“Es verdad que muchos ecuatorianos ven con buenos ojos la captura de Jorge Glas a la embajada mexicana pero no creo que Daniel Noboa lo haya hecho para apuntalar su candidatura”, dice Eduardo Gómez, periodista ecuatoriano que utiliza un seudónimo desde Guayaquil para ofrecer una entrevista a Cuestione.
Gómez subraya un dato preocupante. Si Daniel Noboa quiere reelegirse el próximo año, por ley tiene que encargar la presidencia “porque no puede ser candidato y presidente a la vez”.
¿Y a quién se la tendría que dejar? “A su enemiga Verónica Abad que habla pestes de él”.
Verónica Abad tiene dos cargos; es vicepresidenta de Ecuador y también embajadora en Tel Aviv, Israel. A pesar de ser la fórmula vicepresidencial de Noboa, se enemistó con él porque el 21 de marzo de este año la Fiscalía hizo un operativo en una investigación —a la que denominó caso Nene— por tráfico de influencias en la Vicepresidencia de la República y en él detuvieron a Francisco Barreiro Abad, hijo de Verónica Abad que permanece en prisión y podría enfrentar de 2 a 5 años de prisión.
Daniel Noboa no puede despedir a Verónica Abad porque sería antidemocrático, Ecuador votó por ambos. Mientras tanto, ella “le hace la vida perra” desde Israel, explica el reportero.
El drama de Jorge Glas: ¿injusticia política o castigo legítimo?
“No puede caminar por sí solo (…) no puede subirse”, se escucha en un video de 43 segundos a dos mujeres en Ecuador sollozando mientras presencian el momento en el que Jorge Glas, ex vicepresidente de la corriente correista de izquierda, es trasladado por fuerzas de seguridad de ese país en una aeronave que lo llevaría a un penal de máxima seguridad.
Glas sube lento la escalera; primero un pie, después el otro. Se agarra de un barandal, se tarda en llegar a la puerta del avión, se observa débil.
El video circuló la mañana del sábado 6 de abril en el perfil de Facebook del ex presidente Rafael Correa, exiliado en Bélgica. Un día antes, México había concedido asilo político a Glas y en respuesta, Ecuador asaltó la embajada mexicana, el ejército ecuatoriano trepó por las paredes para capturarlo y Jorge Glas fue trasladado a La Roca.
La Roca es una fortaleza construida a finales del 2008 a las afueras de Guayaquil con estrictos controles de seguridad. Aunque fue creada para albergar delincuentes de alta peligrosidad como narcotraficantes, pandilleros y homicidas, actualmente están pagando condenas políticos, funcionarios judiciales, policías y servidores públicos ligados a escándalos de corrupción como Jorge Glas.
“Eres valiente Jorge Glas, te amamos Jorge”, gritan y lloran las ecuatorianas en el video. “Igual que en México, no son pocos los fanáticos de izquierda en Ecuador” sentencia desde sudamérica el periodista Eduardo Gómez.
¿De qué está enfermo Jorge Glas?
El día que Jorge Glas fue detenido por las autoridades de su país y la tensión entre México y Ecuador se acaloraban, miles de ecuatorianos compartían con gozo a través de WhatsApp otro video en Tik Tok con Glas esposado, desaliñado, montado en una patrulla y una bachata que decía “¿dónde están esos amigos que me decían que en las buenas y en las malas conmigo estarían? Qué cosas tiene la vida, todo eran mentiras porque de mí se alejaron cuando yo caía”.
El lunes 8 de abril Jorge Glas fue hospitalizado por una sobredosis de ansiolíticos y antidepresivos, según un parte policial. Su abogado, Andrés Villegas Pico, afirma no tener más detalles sobre su estado de salud. Según el informe, Glas fue hallado sin despertar en su celda después de negarse a comer durante 24 horas.
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El servicio nacional de cárceles ecuatorianas sostiene que el funcionario se encuentra estable y fue devuelto a su celda en La Roca este martes 9 de abril. Según un comunicado del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI) divulgado este 9 de abril, Glas presentó “parámetros de salud aceptables y dentro del rango de normalidad, por lo que puede recibir el alta médica correspondiente”.
Eduardo Gómez dice que Jorge Glas “toma barbitúricos para la presión en exceso” y que circula información en Ecuador de que se quedó dormido en su celda por un coma autoinducido. El periodista no duda que el ex vicepresidente esté deprimido y no quiera vivir “porque con su detención le arruinaron todo”. Se dice que el plan de Glas era estar en México para el cumpleaños 61 de Rafael Correa que se celebró el pasado sábado 6 de abril, el día que Ecuador lo capturó en la embajada de México.
“México ha tratado a los ecuatorianos como tontos”
Danilo Álvarez es un vendedor de 41 años que vive en Guayaquil, una de las ciudades más violentas de Ecuador. En entrevista para el New York Times, asegura que “México ha tratado a los ecuatorianos como tontos, dando asilo a todas estas personas condenadas”.
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Álvarez contó que los ladrones habían entrado a su casa hace unos años, le habían atado las manos y los pies y le habían apuntado con un arma. Pasaron meses antes de que pudiera volver a dormir bien. Sin embargo, no todos los ecuatorianos están de acuerdo con el arresto de Jorge Glas aunque tiene condenas por corrupción.
Delfa Mantilla, por ejemplo, es una maestra jubilada de 62 años que difiere con Daniel Álvarez. “Esto fue un acto de total falta de respeto por el derecho internacional”, dijo también al NYT. “Parece que fue algo que el presidente Noboa hizo como producto de su ego de niño rico, sin empatía”.
El periodista Eduardo Gómez piensa que no es que México haya querido tratar a los ecuatorianos con el resguardo de Jorge Glas en su embajada sino que el presidente Andrés Manuel López Obrador “se quiso pasar de listo” y quería sacar a Glas de Ecuador en un avión como lo hizo con Evo Morales en Bolivia en el año 2019.
La oficina de Daniel Noboa dijo que el arresto de Glas había continuado porque México había abusado de las inmunidades y privilegios otorgados a la misión diplomática, pero el mensaje que envió el presidente también estaba en línea con el enfoque autoritario que algunos ecuatorianos resaltan de Noboa a quien comparan con Nayid Bukele, actual presidente de El Salvador.
Daniel Noboa ascendió al poder en noviembre del 2023 en medio de una crisis política en Ecuador. Su llegada al cargo se produjo después de que el presidente anterior, Guillermo Lasso, enfrentara un juicio político por acusaciones de malversación de fondos, lo que lo llevó a convocar elecciones anticipadas en el país sudamericano.
Noboa asumió la presidencia con la responsabilidad de completar el mandato restante de Lasso, hasta mayo de 2025. Desde el inicio de su mandato, ha enfrentado desafíos significativos, incluida la necesidad de restaurar la estabilidad política y abordar problemas urgentes como la corrupción y la seguridad.
Daniel Noboa ha prometido políticas que fomenten el crecimiento económico y fortalezcan la seguridad ciudadana. Su ascenso al poder marca un cambio en la dirección política del país y ha generado expectativas sobre su capacidad para enfrentar los desafíos de Ecuador.
Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha declarado que “a México se le respeta” y señala el asalto a la embajada mexicana como un “allanamiento autoritario y vil”.
