SFP abrió siete expedientes en su contra
Carlos Lomelí Bolaños es un personaje que ha escalado peldaños de poder desde su posición de político y empresario farmacéutico, la cual le permitió a sus compañías obtener ganancias estimadas en 2 mil 200 millones de pesos desde 2012.
El destino le cambió el 12 de julio, cuando renunció a su cargo como delegado federal en Jalisco de Programas para el Desarrollo, pero ¿qué lo orilló a tomar esta decisión?
Los constantes señalamientos de conflicto de interés, por los cuales la Secretaría de la Función Pública abrió siete investigaciones en su contra.
Las acusaciones no pararon. El martes 16 de julio, el periódico Reforma publicó que Carlos Lomelí omitió informar sobre dos inmuebles en Nayarit y Jalisco, 28 registros de marca y 35 cuentas bancarias, en su declaración patrimonial ante la Secretaría de la Función Pública.
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La organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) documentó que Lomelí está en el centro de una red de nueve compañías dedicadas a la venta de medicamentos a gobiernos de todo el país. “Todas ellas han sido manejadas por 11 familiares y colaboradores del hoy exfuncionario federal”, señaló MCCI el pasado 12 de julio.
Bondades del nuevo gobierno
Tan sólo de diciembre a la fecha, Lomelí habría recibido 200 millones de pesos en contratos. “En el último año habían recibido 164 millones de pesos con la administración federal y 34 millones con el gobierno de Veracruz encabezado por el morenista Cuitláhuac García”, indicó Laura Sánchez Ley, investigadora de MCCI en entrevista para Cuestione.
El 21 de mayo, cuando se le preguntó al presidente Andrés Manuel López Obrador sobre las empresas ligadas al delegado federal en Jalisco, las llamó “grilla”, “politiquería” y le concedió el beneficio de la duda a Carlos Lomelí.
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Respuesta insuficiente
El exdelegado federal publicó en su cuenta de Twitter el 13 de julio, un día después de su renuncia, que tomó distancia para que “el ruido de la politiquería no afecte el trabajo que debe hacerse en Jalisco” y reiteró su compromiso de trabajar por México, al tiempo que expresó su agradecimiento y lealtad al presidente López Obrador, quien en los tiempos de campaña se refirió a Lomelí como “el número uno”.
Cuestione contactó a la oficina de Carlos Lomelí para conocer su versión, pero no obtuvo respuesta.
Acorralado por la Función Pública
El lunes 5 julio, la titular de la SFP, Irma Eréndira Sandoval acudió a la conferencia matutina del presidente para dar a conocer que la dependencia a su cargo inició siete investigaciones en contra de Carlos Lomelí Bolaños.
“Hoy ya no hay cabida para privilegios, para conflictos de interés, ni para el predominio de los intereses privados sobre el superior interés público”, subrayó la funcionaria.
Sin detallar en qué consiste cada uno, informó que de los siete expedientes, cuatro se centran en empresas relacionadas con Lomelí Bolaños y tres indagan presuntas conductas contrarias a la legalidad.
La secretaria de la Función Pública aclaró, sin embargo, que “el gobierno del presidente López Obrador no avanza a costa de quinazos, ajustes de cuentas, persecuciones y encarcelamientos de líderes políticos y sindicales incómodos, sino sobre la base del respeto a la Constitución”.
Entre clínicas y política
Carlos Lomelí ingresó en 1980 a la Universidad de Guadalajara, de donde se graduó como médico cirujano. Al poco tiempo instaló su primer consultorio que se convertiría en la Clínica Santa Rosa, que dio origen a Lomedic S.A. de C.V.
Después la política lo sedujo. Fue precandidato a gobernador de Jalisco por el PRD en 2006. Luego se cambió a las filas de Movimiento Ciudadano, partido con el que ganó la elección a diputado federal en 2015.
Dos años después pasó a Morena, donde fue coordinador y candidato al gobierno del estado en 2018, pero volvió a perder, esta vez ante Enrique Alfaro Ramírez… de Movimiento Ciudadano.
Su relevo, bajo sospecha
Juan Soltero Meza sustituyó de manera provisional a Carlos Lomelí como delegado especial. Ha sido colaborador y asesor del hoy exfuncionario. En su expediente figura una supuesta investigación que abrió en su contra la Fiscalía General de Jalisco por contubernio, de acuerdo con la revista Proceso.
También se le señala como abogado de María Alejandrina Salazar Hernández, primera esposa del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera “El Chapo”, de acuerdo con documentos en poder de Animal Político. Soltero Meza rechazó cualquier relación con Salazar Hernández.
Además, está vinculado con dos empresas de Carlos Lomelí, una de las cuales motivó el expediente que inició la SFP.
“Era apoderado legal de dos empresas: Corporativo Vigilando tu Salud, la cual Carlos Lomelí sí reconoce, y de Abastecedora de Insumos para la Salud, empresa que no reconoce y por la que justamente empezó la investigación de la Función Pública. En esta empresa, Juan Soltero figura como representante legal”, reveló Laura Sánchez Ley de Mexicanos contra la Corrupción.
Con estos antecedentes, Soltero Meza está a la espera de su ratificación como nuevo “superdelegado” en Jalisco.
