El PVEM desvió 133 millones de pesos a una red de 35 empresas fantasmas. La empresa más beneficiada fue Vrunger SA de CV, la cual cobró 38,3 millones de pesos a través de 41 comprobantes digitales con el partido. Esta es propiedad de de un contratista fantasma.
El dueño de esta empresa, Sergio Delgado Bogarín, tiene al menos otras 22 empresas constituidas en Guadalajara sin empleados, maquinaria, o un domicilio fiscal confiable. Aún así, Delgado Bogarín fue de los proveedores favoritos de varios municipios de Jalisco entre 2011 y 2018 para arrendamiento de maquinaria pesada, equipos de cómputo, uniformes para policías, capacitaciones y otros servicios.
Cobró más de 38 millones de pesos con sus empresas fantasma que tienen como dirección fiscal… una cerrajería.
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Vrunger SA de CV
Como reportamos en esta nota, desde 2014 y hasta las últimas elecciones, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) desvió 133 millones de pesos a una red de 35 empresas fantasmas. Vrunger cobró 38,3 millones de pesos y se convirtió en la empresa más beneficiada por el partido en los últimos años.
El PVEM y las autoridades ya tenían problemas con esta empresa. En 2014, el partido contrató a la compañía para “servicios de propaganda”. Cuando el INE revisó los gastos reportados por el verde, encontró inconsistencias.
Resulta que tanto Vrunger como otros proveedores del PVEM, estaban reportando operaciones por montos superiores a los que el partido les había notificado. En el caso particular de Vrunger, la empresa le reportó al INE haber facturado al verde poco más de 15 millones de pesos, mientras que el partido había señalado sólo 8.5 millones.
Cuando el INE notificó al partido que iban a ser sancionados por estas inconsistencias, el Verde presentó las facturas y los contratos que “le faltaban” para respaldar estos gastos que inicialmente no habían sido notificados…
Tres años después, en junio de 2018, el Servicio de Atención Tributaria (SAT) exhibió en el Diario Oficial de la Federación que Vrunger realmente simulaba sus operaciones y estaba emitiendo facturas sin tener la capacidad para dar los servicios que presuntamente ofrecía.
El medio español El País, intentó contactar al PVEM para cuestionarlo por los contratos que tuvo con empresas fantasma. El partido respondió que cuando se adquirieron los servicios ningún proveedor se encontraba en el estatus de empresas que facturan operaciones simuladas.
“Resulta imposible que el Partido Verde tenga control sobre la situación fiscal de todas las empresas que le venden, ofrecen o brindan productos o servicios”, afirmó en un escrito dirigido al medio español.
El socio mayoritario: proveedor todólogo
Según información obtenida por este medio, el socio mayoritario y presunto dueño de Vrunger es Sergio Delgado Bogarín, una persona de bajo perfil que tiene al menos otras 22 empresas en Guadalajara:
- Dipsal, SA de CV
- Infojal, SA de CV
- Inteligencia en distribución de insumos, SA de CV
- Amatista Internacional de negocios, SA de CV
- Apoyos empresariales el Olmo, SA de CV
- Apoyos empresariales Jaimarell, SA de CV
- Grupo Alajuela, SA de CV
- Constructora y urbanizadora 2500, SA de CV
- Representaciones publicitarias XL, SA de CV
- Servipremex, SA de CV
- Industria global de Occidente, SA de CV
- Grupo Ekroin, Sa de CV
- Consorcio Enarm, SA de CV
- Comercial Univer 300, SA de CV
- Constructora Cosmos 3000, SA de CV
- Servicios arquitectónicos Construnacer, SA de CV
- Metelepsa, SA de CV
- Stafian, SA de CV
- Tulua Corporativo, SA de CV
- Grupo Yimbo, SA de CV
En 2011, Dipsal, SA de CV, la primera empresa que constituyó Delgado Bogarín, celebró un contrato con el Ayuntamiento de Chiquilistlán, Jalisco para la renta de maquinaria pesada (retroexcavadoras, camión de volteo y rodillos vibratorios) en obras de llano.
El contrato fue por 637,754 pesos según consta en la factura No. 0253. Sin embargo, un año después, la Auditoría del estado declaró que habían hecho daño al erario público del municipio. El Ayuntamiento nunca entregó los documentos de la obra, el contrato, ni pruebas que demostraran los trabajos realizados.
Aún con ese antecedente, Delgado Bogarín se volvió todólogo para lo que necesitaran los municipios de Jalisco entre 2011 y 2018 y constituía empresas con el domicilio fiscal en una cerrajería.
Empresas fantasma
A través de Apoyos Empresariales Olmo, fue proveedor del Congreso de Jalisco, el Gobierno de Autlán y el Consejo Municipal Del Deporte de Guadalajara (Comude).
Al Gobierno de Autlán presuntamente le dio uniformes para Seguridad Pública, pupitres, butacas acojinadas, cobijas, camillas, collarines y desfibriladores. Al Congreso le dio diferente material de papelería y al Comude pintura vinílica, esmaltes, sacos de cal, de acuerdo con las adjudicaciones directas de los contratos 040-2012 y 038-2012.
Apoyos Empresariales Olmo, Corporativo Logístico RSY, SC y Comercial Univer 300 SA de CV tiene como dirección una casa que entonces era una cerrajería en Av. México 2259, Guadalajara.
Cuando no usaba la dirección de la cerrajería, registraba las empresas en una casa o en una bodega (entonces en renta) en Parres Arias, Guadalajara. Desde ahí, Delgado Bogarín dio consultoría jurídica a los Municipios de Guadalajara y Ocotlán, cursos a la Universidad de Guadalajara, asesoría al C7 para hacer programas de TV, vendieron equipo de cómputo, imprimieron pólizas del OPD Servicios y Transportes del Gobierno del Estado y al IEPC le surtieron equipo fotográfico, entre otros.
No se identificaron contratos de las siguientes empresas pero sí se encontraron en listas de proveedores de otros municipios de Jalisco:
- Tulua Corporativo, SA de CV proveedor de Zapopan en 2013;
- Urbanizadora Korea, SA de CV proveedor del estado en 2017;
- UNIVER proveedor de Villa Corona en 2018;
- Dipsal proveedor de El Arenal de 2015 a 2018
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Contratos con distintas dependencias
Después del escándalo de la Auditoría otras empresas de Delgado (Inteligencia en Distribución de Insumos, Servipremex, Comercial Univer 3000 y Stafian) celebraron contratos con otros municipios en Jalisco.
Cuando se cuestionó a Francisco Ayón, entonces Secretario de Administración del Ayuntamiento tapatío, afirmó que no conocía a Delgado Bogarín y que todo se hizo conforme a los lineamientos, aunque reconoció que se debería reforzar la revisión a las empresas que ganan un contrato, según documentó al medio MURAL en 2016.
Aún así, tanto Univer como Dipsal seguían figurando en la lista de proveedores de municipios en 2018, dos años después. La necesidad de “reforzar” los candados en las adquisiciones de empresas sigue vigente para todas las autoridades, incluido el INE, que permitieron que empresas con características irregulares entraran a la lista de proveedores autorizados para los partidos.
