Tanto Claudia Sheinbaum como Xóchitl Gálvez, así como Jorge Álvarez, aspirantes a la presidencia de la República, afirman que de llegar a Palacio Nacional promoverán el Sistema Nacional de Cuidados pero ¿en qué consiste un Sistema Nacional de Cuidados?
Sandra Morales
El Sistema Nacional de Cuidados (SNC) es un conjunto de políticas, programas y acciones propuestas para garantizar los derechos de todas las personas a ser cuidadas. Sin embargo, la expedición de la ley que da pauta a su creación, permanece desde el 18 de noviembre del 2020 congelada en el Senado de la República.
Existen iniciativas presentadas por diversos colectivos feministas así como Organizaciones de la sociedad civil para crear la Ley General del Sistema Nacional de Cuidados y reformar los artículos constitucionales 4 y 73. El primero habla de la protección y el derecho a la salud, así como apoyos económicos y pensiones para estudiantes, personas adultas mayores y grupos vulnerables. El 73 que se refiere al establecimiento de las competencias para garantizar el efectivo acceso a los cuidados. Las reformas a estos artículos buscan asegurar el derecho a cuidar y ser cuidado en condiciones dignas, promover la corresponsabilidad, la creación de servicios públicos de cuidados, entre otras acciones.
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Se trata de un enfoque de política pública diseñado para abordar las necesidades de cuidado de las personas, teniendo en cuenta que son estas atenciones las que garantizan la salud y el bienestar de una persona para desarrollarse de manera óptima en una sociedad.
Cuidado y género: el peso invisible de las mujeres
En México la provisión de cuidados es insuficiente, de baja calidad y no tiene una accesibilidad amplia. Durante 2022, según datos de INEGI, 31.7 millones de personas se dedicaron a los trabajos de cuidados de los cuales 71.5% fueron mujeres y 24.9% hombres.
Incluso cuando las mujeres trabajan fuera del hogar, todavía pueden llevar una carga desproporcionada de trabajo no remunerado en el hogar, por lo que un sistema de cuidados contribuiría al bienestar general de la sociedad al proporcionar apoyo emocional, social y físico a quienes lo necesitan. De contar con un SNC, se reduciría el estrés y mejoraría la calidad de vida de las personas que reciben cuidados, así como de sus cuidadores.
De igual forma, con un marco jurídico nacional de cuidados, las y los cuidadores podrían contar con servicios y apoyos económicos para desempeñar esta labor, se promovería la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres y más mujeres ingresarían al mercado laboral.
En el marco de la igualdad, se busca reducir la brecha de género y redistribuir estos trabajos, por ejemplo; con un permiso parental remunerado y no remunerado que permite a las personas tomar tiempo libre del trabajo para cuidar de sus hijos, hijas o familiares enfermos y de esta manera reducir las triples jornadas que recaen en las mujeres.
Abordar estas desigualdades requiere un enfoque integral que incluya cambios en las normas culturales y sociales, políticas laborales y sociales más equitativas, así como un cambio en las actitudes individuales y colectivas sobre los roles de género y el cuidado, incluido dentro del Sistema Nacional de Cuidados.
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¿Por qué se necesita un Sistema Nacional de Cuidados?
El Sistema Nacional de Cuidados incluye varios programas para quienes cuidan y centros de cuidado infantil, permitiendo que los padres o madres trabajen o estudien, además de cuidados para personas mayores y discapacitadas en centros y servicios de atención domiciliaria y residencias.
Se busca que el sistema brinde apoyo a cuidadores informales que proporcionan apoyo a familiares y amigos que cuidan, a través de programas y servicios.
Un sistema de cuidados garantiza que todas las personas, independientemente de su situación económica o social, tengan acceso a servicios de cuidado de calidad. Esto promueve la equidad y la justicia social al reducir las disparidades en el acceso a los servicios de cuidado y aliviar la carga sobre aquellos que tienen menos recursos.
Muchas familias dependen de los ingresos del trabajo remunerado tanto del padre como de la madre. Por ello es importante la articulación con el Estado y las empresas para generar servicios de cuidado infantil y atención a largo plazo para personas mayores o discapacitadas, lo que permite que las personas trabajen sin tener que preocuparse por la atención de sus seres queridos.
Todas las personas hemos requerido o vamos a requerir de estos servicios en algún momento de la vida, desde la infancia, en caso de alguna enfermedad, accidente o circunstancia que ponga a las personas en situación de vulnerabilidad o en etapa de envejecimiento.
Un Sistema Nacional de Cuidados es esencial para abordar una serie de desafíos sociales y económicos, promoviendo la equidad, la inclusión y el bienestar general de la población.
