México, uno de los tres países de América Latina cuya democracia se deterioró más en 2022

Compartir:

México cayó del lugar 86 al 89 del Índice de Democracia global 2022, elaborado por la revista británica The Economist. En el año 2021, el país obtuvo un puntaje de 5.57 y en 2022 bajó a 5.25. 

Desde la edición de 2021 del Índice, el medio británico clasificó a México como un “régimen híbrido”, que está entre el autoritarismo y la democracia plena. 

Los regímenes híbridos se caracterizan por la debilidad del Estado de Derecho, falta de autonomía del poder judicial y por la corrupción. 

Te recomendamos: En puras precampañas, Delfina Gómez y Alejandra del Moral ya se gastaron 53 millones de pesos en el Estado de México

Hasta el año 2020, México se encontraba en el régimen de “democracia imperfecta” del Índice. Ese año México cayó 14 lugares pasando del 72 al 86 y, por primera vez, desde 2006 que se publica el Índice, cambió su estatus de democracia fallida a régimen híbrido.

En el Índice de Democracia de 2022, México se ubicó entre los tres países de América Latina, junto con Haití y El Salvador, cuyas democracias sufrieron mayor deterioro y cuyos puntajes se encuentran por debajo del promedio de la región que es de 5.79 puntos.

Aunque, “la caída del puntaje promedio de América Latina en 2021, de 0.26 puntos, fue la peor caída anual de cualquier región del mundo, el deterioro de 2022 fue mucho más modesto, de 0.04. Pero varios países (Haití, El Salvador, México) se encuentran entre los países que más sufren año tras año descensos en sus puntajes del índice”, explica The Economist

A partir de 2018, América Central y el Caribe ha registrado una disminución constante en su puntaje, “debido en gran parte a los acontecimientos en México y Nicaragua, y este último se convirtió en una autocracia en 2018 y el primero fue degradado a un régimen híbrido en 2021”.

El resultado es que América Latina ha registrado la mayor descenso en su democracia en comparación con cualquier región en las últimas dos décadas. El puntaje regional promedio cayó desde 2008 cuando llegó a su pico más alto con 6.43 puntos a 5.79 en 2022, un descenso de 0.64 puntos en 14 años.

De acuerdo con el Índice de The Economist, a partir del 2016 el número de países democráticos se redujo, mientras que los países autoritarios aumentaron. En 2022 esta dinámica de “retroceso democrático” a nivel mundial se detuvo.

La revista inglesa indica que un hecho que favoreció el descenso democrático en el mundo fue el levantamiento de las restricciones impuestas por la pandemia de COVID-19. Pero apunta que la polarización política sigue siendo la gran amenaza para la consolidación de los regímenes democráticos.

Desde el año 2006, la Unidad de inteligencia económica de The Economist elabora el Índice de Democracia mundial, que es un análisis de la evolución del estado de la democracia en 165 países y dos territorios. El índice se compone de cinco categorías: proceso electoral y pluralismo, funcionamiento del gobierno, participación política, cultura política y libertades civiles. 

Según los puntos que cada país obtiene en una serie de indicadores dentro de dichas categorías, el medio británico clasifica a los países en uno de los cuatro tipos de régimen: democracia plena, democracia imperfecta o fallida, régimen híbrido y régimen autoritario.

Te puede interesar: Relación de México con gobiernos autoritarios afecta su imagen internacional, pero atrae a nacionalistas mexicanos

México sigue en picada

Desde el año 2021, The Economist atribuyó el descenso de México en el Índice de Democracia al desempeño del presidente Andrés Manuel López Obrador. 

En el reporte de 2021 se señaló que López Obrador se ha esforzado en concentrar el poder en él y su partido, Morena, además de que ha atacado a los medios de comunicación desde el inicio de su administración, se volvió cada vez más intolerante con los críticos y ha intentado desmantelar al Instituto Nacional Electoral (INE)

Igualmente, en la anterior edición The Economist advirtió la probabilidad de “que se produzca una mayor erosión de la democracia de México a medida que se acercan las elecciones presidenciales de 2024”.

México está dentro de los diez países que registraron el mayor deterioro en su puntuación en el Índice de 2022 en comparación con 2021 en todo el mundo: Rusia (-0.96 puntos), Burkina Faso (-0.76 puntos), Haití (-0.68), El Salvador (-0.66 puntos), Túnez (-0.48), Bielorrusia (-0.41), Irak (-0.38), Jordania (-0.33), México (-0.32) y Hong Kong (-0.31).

Así en el ranking mundial 2022, México salió en el lugar 89 de 167 países, cayó tres posiciones con respecto al Índice de 2021.

Las tres categorías con el peor resultado para México fueron en cultura política con 1.88 puntos, funcionamiento del gobierno con 4.64 puntos y libertades civiles con 5.59 puntos. 

Estos resultados “explican el desastre del actual gobierno federal. Explican la pésima percepción que se tiene de nuestro país, pero también explican el riesgo inminente en el que nos encontramos si perdemos la poca democracia que nos queda”, señala el doctor Juan Carlos Botello, profesor Facultad de Comercio Internacional y Logística.

No obstante, México alcanzó 7.22 puntos en las categorías de participación política de la sociedad y 6.92 en proceso electoral y pluralismo.

Más sobre el tema: Organismos electorales en América Latina y su razón de ser: la juventud de sus democracias

Necesario fortalecer división y autonomía de poderes 

En el Índice, The Economist señala un debilitamiento de la democracia y de mayor polarización en México, donde hay un Estado de Derecho con alta percepción de corrupción, nos dijo Fernanda Avendaño, coordinadora Anticorrupción en el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).

De acuerdo con la investigadora en la edición pasada y la actual el Índice de Democracia destaca que en México existe “un ataque a las instituciones, sobre todo a las instituciones electorales”. 

Y aunque no hace un análisis profundo sobre México, nos dijo, lo que muestra el Índice de Democracia 2022, es que México es una de las economías de América Latina que ha tenido un mayor deterioro en los últimos años, debido a “un debilitamiento institucional y polarización desde el Poder Ejecutivo hacia otras instituciones”

Para Fernanda Avendaño que México esté en el estatus de “régimen híbrido” por segundo año consecutivo, “habla de la necesidad de fortalecer las instituciones electorales y los órganos autónomos”, como el INE y el Instituto Nacional de Transparencia (INAI). 

La cultura democrática es la categoría con el peor puntaje que tiene México. Esta categoría indica cómo la ciudadanía ejerce o se identifica con sus derechos civiles, derechos electorales, derechos políticos para participar, nos dijo. 

En México en los últimos años hemos visto ataques a la libertad de expresión, a los medios de comunicación y a la prensa, elementos a tomar en cuenta para mejorar el sistema democrático del país, consideró Fernanda Avendaño.

De igual forma, México necesita fortalecer el respeto de la división de poderes, a la autonomía del Poder Legislativo y del Poder Judicial, sostuvo.

Por su parte, el doctor Rafael Rojas, profesor-investigador del Centro de Estudios Históricos de El Colegio de México, nos dijo que no comparte la clasificación que hace de The Economist de México, como un régimen híbrido. 

Pero subrayó que “en efecto, hay tendencias autoritarias en México y que no provienen únicamente del gobierno, aunque algunas sí. También, provienen de la sociedad civil e incluso de la oposición, como sucede en toda América Latina”.

Según su análisis, el autoritarismo que se está viviendo en América Latina “no tiene un sello ideológico o político preciso”, porque ha habido avances del autoritarismo en gobiernos de derecha, como en Brasil, con Jair Bolsonaro, y en El Salvador, con Nayib Bukele, pero también en gobiernos de izquierda.

Explicó que “el autoritarismo en América Latina es transversal y lo mismo sucede a nivel de cada uno de los países (…) México sigue estando dentro de las democracias latinoamericanas que son, en la mayoría de los casos, democracias con muchos problemas, grandes disparidades sociales, altos índices de corrupción, tendencia a la militarización -no únicamente en los gobiernos de izquierda- y con elementos de regresión autoritaria en casi todos los casos”.

No obstante, el académico añadió finalmente que “la frontera entre democracia y autoritarismo sigue siendo clara y que los únicos países (de América Latina) que realmente se ubican fuera del campo democrático son Cuba, Venezuela y Nicaragua”.

SUSCRÍBETE A NUESTRO NEWSLETTER

Recibe las noticias más relevantes de México cada mañana, inicia tu día informado.