De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México ocupa el primer lugar en violencia física, abuso sexual y homicidios contra menores entre las economías que pertenecen a este organismo. Aún así, está violencia no forma parte de la agenda nacional.
Además, según el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) la desigualdad económica, la violencia generalizada y la falta de estado de derecho en México colocan a los niños, niñas y adolescentes en situaciones de riesgo y vulnerabilidad.
Debido a que existen muchas situaciones de violencia infantil que no se reportan a las autoridades, en Cuestione revisamos los datos recopilados anualmente por la Secretaría de Salud para conocer cuántos niños, niñas y adolescentes recibieron atención médica debido a situaciones de violencia en los últimos años.
Quizá te pueda interesar: El crimen organizado: pieza fundamental para entender mejor los homicidios contra menores de edad
1) La violencia a menores aumenta con la edad
Mientras que hay evidencia de que los menores sufren agresiones desde el primer año de vida, los casos se mantienen estables hasta llegar a la adolescencia. La mayoría de los casos de violencia en contra de menores se concentran en un rango de edad de entre los 13 y los 17.
Al categorizar la violencia hacia menores entre niños, niñas y adolescentes, podemos observar que en general, la violencia dirigida hacia los adolescentes es mayor que hacia los niños más chicos. Sin embargo, estos datos podrían no reflejar la realidad con certeza ya que niños y niñas son aún más vulnerables, haciendo difícil que acudan a recibir atención médica.
2) Temporalidad de la violencia hacia menores
Como muestra la gráfica siguiente, la violencia hacia los adolescentes aumentó a partir del 2015 y se redujo hasta el 2020.
Con respecto a la violencia en contra de niños y niñas, vemos que esta se mantiene estable a excepción del aumento de casos en 2015 y 2017.
También puedes leer: A pesar de las promesas y gastos millonarios, sigue explotación sexual de menores en redes
3) Geografía de la violencia hacia menores
El mapa anterior muestra que en todos los estados del país ha habido al menos un caso de violencia infantil. Los estados que concentran un mayor número de casos son Guanajuato, el Estado de México y Chihuahua. El estado que registró menos casos en 2020 fue Nayarit.
4) ¿Quienes son los y las víctimas?
De los 15,429 casos registrados de violencia hacia menores, el 78.98% fue hacia niñas y mujeres adolescentes. Esta tendencia demuestra que las expresiones de violencia de género inician desde una edad temprana y continúan durante toda la vida de las mujeres.
Los datos de la Unicef revelan que mundialmente 4 de cada 10 niñas han experimentado violencia de pareja a los 15 años y además 1 de cada 4 niñas se casan antes de los 18 años.
Te recomendamos: En 2020 nacieron casi 9,000 bebés de menores de 15 años, muchos resultado de violación
4) ¿Quienes son las y los agresores?
En el caso de los niños y niñas menores de 12 años, los principales agresores son otros parientes, en segundo lugar los papás y en tercer lugar conocidos. En el caso de los adolescentes, las parejas sentimentales o cónyuges son el principal agresor, seguido de desconocidos. El 71.17% de los agresores son hombres.
Esto coincide con otros datos que reporta la Secretaría de Salud: del total de los casos de menores atendidos, más de la mitad (68.80%) se clasifican como violencia familiar y el 72.55% ocurrieron en casa.
Para la Unicef, la violencia impide que niños, niñas y adolescentes se desarrollen plenamente, afectando el crecimiento económico de los países. De acuerdo con un estudio realizado por la asociación Prevent Child Abuse America este tipo de violencia le cuesta 220,000,000 de dólares a los Estados Unidos al día.
Quizá te pueda interesar: ¿Primero los pobres? Presupuesto 2021 recorta recursos a la educación de menores vulnerables
En su análisis, la OCDE también señala que México debe fortalecer sus instituciones de defensa a los menores. Esto es particularmente relevante ya que en meses anteriores el Sistema de Desarrollo Integral a la Familia (DIF) nos demostró lo sencillo que era remover a menores de sus instalaciones.
Los problemas de violencia contra las niñas, niños y adolescentes tendrían que ser una prioridad para el gobierno, pero no hay políticas públicas dirigidas a solucionarlos, ¿cuándo empezará a hacerse cargo de esta situación?
