El número de homicidios de niñas y adolescentes creció entre 2020 y 2021, de acuerdo con la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim).
En 2021, 535 mujeres de entre 0 y 17 años murieron por homicidio en México, lo que representa un aumento de 0.9% con respecto a los 530 homicidios de niñas y mujeres adolescentes registrados en 2020, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, explicó la organización.
Los datos de homicidio contra las niñas y adolescentes en México comparados con datos de América Latina “son terroríficos, pues México sigue estando en una posición de guerra terrible desde hace 15 años”, en la que aumenta la violencia machista, nos dijo Juan Martín Pérez García, coordinador Regional de la iniciativa Tejiendo Redes Infancia en América Latina y el Caribe.
Te recomendamos: Crece cifra negra de violencia sexual en México: 99.7% de las agresiones no se denuncian
Pero no son solo los homicidios. De acuerdo con Juan Martín Pérez, una de las expresiones más crudas que ha crecido en México y en América Latina es la violencia machista contra las niñas y adolescentes.
Por esto las redes de organizaciones Tejiendo Redes Infancia e Infancia Latina hicieron un llamado a la acción urgente para que los Estados, los organismos internacionales y las organizaciones sociales enfrenten la situación de violencia que sufre esta parte de la población.
Así lo señaló Juan Martín Pérez, al plantearnos algunos de los resultados del informe “Las niñas y las adolescentes en América Latina y el Caribe desde un enfoque de derechos de la niñez y la adolescencia con perspectiva de género”, elaborado por Tejiendo Redes Infancia y el Observatorio para el Monitoreo de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes en América Latina y el Caribe.
Violencia familiar, sexual y física
En México, también aumentó la cantidad de mujeres de entre 0 y 17 años de edad que fueron víctimas de violencia familiar, violencia sexual y violencia física, de 2020 a 2021.
Como indica la Redim, las niñas y adolescentes de 0 a 17 años que fueron víctimas de violencia familiar aumentaron de 9,397 en 2020 a 13,454 en 2021, según datos de la Dirección General de Información en Salud.
De igual forma, las niñas y adolescentes de 0 a 17 años que fueron víctimas de violencia sexual aumentaron en México de 5,078 en 2020 a 7,353 en 2021, indica la Redim. Y las mujeres de 0 a 17 años que fueron víctimas de violencia física aumentaron de 3,085 en 2020 a 4,214 en 2021, según datos de la Dirección General de Información en Salud, indica la organización.
Estos datos revelan que en general las políticas públicas siguen atrapadas en “los síntomas, es decir, solo estamos documentando y reaccionando frente a las expresiones de violencia contra las mujeres y niñas, pero no en acciones preventivas o de una explicación contextual que permita cambiar las prácticas institucionales y la política pública”, consideró Juan Martín Pérez.
Además, mientras las niñas estén en condiciones de pobreza seguirán siendo las más vulnerables, dijo. El 53.3% de las mujeres entre 0 y 17 años de edad vivía en condiciones de pobreza en México en 2020, según datos del Coneval, “Pobreza en México 2018-2020”, citados por la Redim.
Juan Martín Pérez señaló que en un escenario de violencia generalizada como el que enfrenta México, otra expresión cruda de la violencia machista es la desaparición de mujeres adolescentes, “con alta probabilidad de que sean víctimas de esclavitud sexual”; aunque no hay fuente oficial que confirme esto último, puntualizó.
Según la Redim, la mayoría de las personas desaparecidas de 0 a 17 años son mujeres, con un 55%. Y el porcentaje llega a 74.5% entre mayores de 12 años de edad.
Más niñas y adolescentes de 0 a 17 años de edad se reportaban desaparecidas o no localizadas desde que se tiene registro (1964). Al 11 de octubre de 2022 a nivel nacional, 9,757 son niñas y adolescentes y 7,861 son hombres, según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas de la Secretaría de Gobernación.
También puedes leer: Negligencia, abandono y pobreza, las violencias que mataron a la bebé Camila, la niña que murió dos veces
Otros rostros de la violencia: falta de autonomía
La violencia se expresa también en el matrimonio infantil, ya que 9 de cada 10 niñas y mujeres adolescentes que se casan antes de los 18 años, lo hicieron con hombres de 18 años o más en México, se destaca en el informe “Las niñas y las adolescentes en América Latina”.
Aunque los matrimonios, precisó Juan Martín Pérez, representan un bajo porcentaje, el gran problema son las uniones tempranas, de las cuales no hay datos certeros.
Las uniones tempranas son relaciones con desigualdad económica, que se traduce en embarazos no deseados, violencia machista, falta de autonomía para decidir sobre su vida, su cuerpo y su futuro.
De igual manera, las uniones tempranas están relacionadas con desigualdades de género, pobreza y abandono escolar. Y en algunos casos, dejan a las niñas en condición de riesgo de trata y en algunos casos con fines de explotación sexual, nos explicó Juan Martín Pérez.
El informe subraya que “desafortunadamente no hay datos de uniones tempranas que reflejen el fenómeno en la región (América Latina), pues el trabajo se ha concentrado en la prohibición de los matrimonios”. No estamos visibilizando ni atendiendo las uniones tempranas. Tener datos oficiales ayudaría a dar respuestas institucionales, expuso Juan Martín Pérez.
Estos problemas hacen evidente que a nivel nacional y regional existen otros temas complejos, más allá de los visibles, que también se deben de atender, como la falta de autonomía y de espacios de participación de las niñas y adolescentes, dijo.
Migración
Hay otros problemas que enfrentan niñas y adolescentes donde tampoco existen datos públicos y oficiales que permitan hacer visible las necesidades de esta población: “sin datos no hay posibilidad de construir marco normativo ni institucional y, lo más grave, tampoco se puede destinar presupuesto”.
Uno de estos temas es la migración. No sabemos cuántas y qué características tienen las niñas y adolescentes en condición de migración. Este es un tema transnacional, porque no es un tema solo de los países Centroamericanos, en el cual la “invisibilidad de las niñas migrantes es brutal”, enfatizó Juan Martín Pérez.
Más información: Niñez mexicana sufre más violencia y desigualdad sin mayor presupuesto del gobierno
Cambiar la cultura machista
De acuerdo con datos de 2021 del INEGI, siete de cada diez mujeres mayores de 15 años de edad han sufrido algún tipo de violencia. “Esta es una violencia que inició siendo niñas, como parte de las prácticas tradicionales nocivas en las culturas y en las pautas de crianza tradicional que buscan establecer roles fijos para las niñas y para los niños”, resaltó Juan Martín Pérez.
La violencia es una constante que se refleja en todos los países en todos los ámbitos y desde varias aristas, la sexual, la maternidad temprana, los matrimonios tempranos, el embarazo infantil y adolescente y medidas correctivas para la educación familiar, se explica en el informe regional.
Otros temas que reveló el estudio regional, nos compartió Juan Martín Pérez, es la urgencia de trabajar con los niños varones para que tengan referentes o alternativas para socializar con otras formas de masculinidad. También se debe estimular la acción y el protagonismo de las niñas en todo lo que les afecta, como participar en las escuelas y en sus comunidades.
Como señaló Karen, integrante del grupo de participación de niñas y adolescentes en la Redim, durante su participación en el foro “¿Cómo visibilizamos a las niñas poderosas y diversas?”, organizado por Tejiendo Redes Infancia, el pasado 13 de octubre, es importante que las niñas estén en el centro de la toma de decisiones para dar ideas y posibles soluciones que ayuden al bienestar de la sociedad.
“¿Cómo vamos a lograr erradicar toda esta violencia? Pues seguir proveyendo a niñas fuertes que crezcan desde el núcleo familiar con la perspectiva de eliminar por completo todas las famosas etiquetas y estereotipos que nos dicen dónde debemos trabajar, qué debemos de usar, cómo debemos de vestir”, apuntó.
