Las y los mexicanos nos enteramos de un nuevo episodio de violencia, con imágenes y videos terriblemente explícitos, solo que está vez ocurrió en un estadio de futbol.
En la tarde del pasado 5 de marzo el juego de la jornada nueve de la Liga MX entre el Querétaro Futbol Club y el Club Atlas de Guadalajara y tuvo que ser suspendido al minuto 62 porque la violencia se salió de control en las gradas.
Los 608 elementos de seguridad tanto privada como pública que debían proteger a quienes asistieron al estadio La Corregidora de la ciudad de Querétaro no solo no pudieron controlar la violencia sino que algunos elementos participaron en ella al abrir zonas de acceso e incluso golpear a aficionados.
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“Lamentablemente otra vez se alcanzaron a cruzar los aficionados de Querétaro a donde están los del Atlas. Qué triste”, dijo el narrador del encuentro en el canal Fox Sports, Gustavo Mendoza, mientras los gritos y las rechiflas aumentaron de volumen y familias invadieron la cancha para protegerse de acciones violentas que ya eran incontrolables en la tribuna.
“No hay seguridad o qué onda”, agregó el comentarista Eduardo de la Torre, “ante la historia que tiene esta rivalidad, los grupos radicales de ambos equipos, no queda más que pensar que no tuvieron una buena previsión”.
La transmisión televisiva se terminó y las redes sociales se llenaron de videos sobre lo que ocurría al interior del estadio: persecuciones, golpes, patadas contra personas tiradas en el suelo, cuerpos desnudos tendidos sobre las áreas de acceso a las gradas.
A pesar de la crudeza de las imágenes que circulan en redes sociales, la cifra oficial es de 26 personas lesionadas de acuerdo con Mauricio Kuri, el gobernador panista del estado de Querétaro, en un mensaje emitido a la mañana siguiente.
“El saldo es de 26 personas que requieren atención médica hospitalaria (24 hombres y dos mujeres), de esos 26, tres ya fueron dados de alta. De los 23 aún hospitalizados, tres se encuentran graves, 10 delicados y los 10 restantes sin gravedad”, dijo Kuri el 6 de marzo.
También aseguró que se le dará prioridad a esta investigación y se usará toda la tecnología necesaria para castigar a los responsables y dar un mensaje de que este tipo de agravios no van a volver a ocurrir.
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La autoridad no hizo nada
De acuerdo con imágenes que circulan en redes sociales, los elementos de seguridad no solo se vieron rebasados por los disturbios, sino que abrieron las puertas que separaban a las barras del Club Querétaro y Club Atlas, no actuaron ante lo que sucedía o de plano fueron parte de los actos de violencia.
El presidente del Querétaro F.C, Gabriel Solares, aseguró que en el estadio La Corregidora se encontraban 358 elementos de seguridad privada, 100 policías estatales y 150 policías municipales para un estadio que tiene una capacidad de 32,130 espectadores y ante una rivalidad con antecedentes de violencia.
Sin embargo según el reportero Yussif Caro de TUDN los elementos de seguridad pública llegaron al estadio “cuando ya todo estaba tranquilo, cuando el caos había pasado o estaba por terminar (…) al final de la bronca llegó la policía”.
Gabriel Solares explicó en conferencia de prensa del 6 de marzo que el número de elementos de seguridad se acuerda durante la semana entre la directiva del club y las autoridades estatales y municipales.
“Es evidente que el protocolo fue superado y que hay que revisarlo para hacer las adecuaciones necesarias”, dijo Solares.
En la misma conferencia de prensa el presidente de la Liga MX, Mikel Arriola –ex titular de Cofepris en el sexenio de Felipe Calderón y director del IMSS en el sexenio de Enrique Peña Nieto– confirmó que se suspendieron el resto de partidos de la jornada nueve.
También informó que a partir del 6 de marzo no se puede volver a jugar en el estadio La Corregidora pero sin aclarar durante cuánto tiempo porque eso se confirmará en la asamblea extraordinaria de dueños de equipos de la Liga MX que se va a realizar el martes 8 de marzo.
Arriola dijo que otra de las medidas es prohibir que las barras de los equipos asistan a los estadios cuando sus clubes jueguen como visitantes, aunque aclaró que también se debe confirmar en la próxima asamblea.
Además aseguró que la Liga MX colaborará con las autoridades y confirmó que las decisiones sobre seguridad en los estadios se toman entre las directivas de los clubes y las autoridades estatales y municipales.
“Se tiene un protocolo de estadio seguro. Ese protocolo se revisa unos días antes, que fue lo que ocurrió aquí en Querétaro, con las autoridades de Protección Civil, con las autoridades de Seguridad Pública, con las autoridades del municipio, que emiten los permisos (…) y se determinan las cantidades de elementos de seguridad pública o de seguridad privada que tendrán que estar en el operativo”, explicó.
La Fiscalía General del estado de Querétaro abrió una carpeta de investigación por tentativa de homicidio y violencia en espectáculos deportivos.
El 6 marzo el hashtag #SíHayMuertos fue tendencia en Twitter en protesta por las cifras oficiales que aseguran que no ocurrió ningún asesinato en el estadio.
¿Crees que realmente se tomen acciones entre la Liga MX y las autoridades de todos los niveles para que esto no vuelva a ocurrir?
