Cuestione obtuvo el acceso al contrato que formaliza la relación entre la empresa de aviación Redwings y la administración de las operaciones de base fija en el Aeropuerto de Santa Lucía.
Esta vez, lo que añade una capa de preocupación adicional a esta situación no es la conexión de Redwings con el exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, y la participación de dos individuos supuestamente vinculados a él en la empresa, sino el lazo con figuras políticas de alto calibre en este contrato adjudicado con tanta rapidez.
La expansión continua de Redwings es un tema que sigue atrayendo la atención, ya que ahora también se harán cargo de las operaciones de base fija en el estado de Puebla y, según fuentes de la misma empresa, Quintana Roo en un futuro.
Esta situación plantea preguntas sobre la transparencia y la relación entre empresas de aviación privada y figuras políticas, lo que subraya la necesidad de una mayor supervisión y escrutinio en este ámbito.
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La reaparición de Redwings
Como te mencionamos en esta nota, Redwings es una empresa de aviación vinculada al exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, y propiedad de dos de sus presuntos prestanombres. Esta se encargará de las operaciones de base fija (FBO) en el Aeropuerto de Santa Lucía, es decir, de las operaciones de vuelos privados del AIFA.
La compañía, especializada en jets privados y operaciones aeroportuarias, ha experimentado un rápido crecimiento desde 2013, con una flota de al menos siete aviones de lujo, incluido uno utilizado en el traslado de familiares de Duarte en 2017.
A pesar de investigaciones previas sobre sus actividades y los señalamientos, Redwings asumió un papel crucial en el FBO de Santa Lucía y ganó una adjudicación express.
El AIFA fue el inicio
El contrato de arrendamiento al que Cuestione tuvo acceso se firmó el 16 de febrero de este año entre el Aeropuerto de Santa Lucía y Redwings, apenas unos días antes del evento de su inauguración.
Uno de los aspectos más notables y dignos de cuestionamiento en este contrato es su naturaleza express. De acuerdo con la información contenida en el propio contrato, el acuerdo para lanzar el concurso se tomó el 10 de enero de 2023, y en tan solo treinta y cinco días, ya se había designado un ganador.
Este contrato de adjudicación se refiere al “arrendamiento de la Base Fija de Operaciones y un hangar de guardia y mantenimiento” y fue celebrado por Redwings, representado por Bernardo Moreno, quien se presume como un posible prestanombres de Duarte, con la empresa estatal del AIFA.
La rapidez con la que se llevó a cabo todo el proceso sugiere que, desde el principio, podría haber existido un interés previo en que Redwings fuera la ganadora del concurso. Y solo el inicio de su expansión, según fuentes internas de la propia empresa.
Expansión a costa de escándalos
Aún con los señalamientos y escándalos, Redwings se sigue expandiendo. Según el piloto de Redwings Mauro Ochoa, también tendrán FBO en Puebla y en un futuro, Tulum. Según Ochoa, ya operan en tierras poblanas desde el verano para vuelos privados nacionales y en próximamente internacionales, dijo en entrevista con Mexico Business News.
“Nuestro FBO es una terminal privada dentro del aeropuerto de Puebla. Esta terminal personalizada ofrece los mismos servicios aeroportuarios, pero están diseñados a medida para nuestros clientes que eligen volar en jets privados. Nuestro FBO ofrece servicios de manejo para vuelos nacionales e internacionales de llegada y salida”, mencionó en la entrevista citada.
Su objetivo es alcanzar la cifra de 120 vuelos al mes en este nuevo destino dentro de un año. Para lograrlo, la compañía planea colaborar con otros operadores y trabajar en estrecha asociación con el Ministerio de Turismo y las cámaras de comercio locales para promover su flota ejecutiva y, de nuevo, construir más relaciones políticas.
En términos de proyecciones de mercado para los próximos cinco años, Redwings quiere consolidar su negocio de taxis aéreos en Querétaro y Puebla, y también busca atender otros destinos turísticos destacados, como Tulum, Los Cabos, La Paz y Loreto.
Según el capitán, la empresa tiene planes sólidos para comprar 10 aeronaves eVTOL este año y está desarrollando un nuevo negocio centrado en vuelos ejecutivos utilizando el KingAir C90, con planes para iniciar el servicio a finales de año, volando de lunes a viernes con un vuelo al día.
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Contratos con la 4T
La expansión meteórica de Redwings en la industria de la aviación plantea preguntas legítimas sobre el origen y la disponibilidad de los fondos necesarios para llevar a cabo tantas operaciones a gran escala.
Desde su creación en 2013, la empresa ha adquirido una flota significativa de aeronaves y ha establecido su presencia en múltiples aeropuertos clave en México.Una posible fuente de financiación que podría explicar la expansión de Redwings sería la celebración de contratos con gobiernos locales y federales para operar vuelos privados.
Dado su historial y conexiones con figuras políticas influyentes, es razonable cuestionar si la empresa ha obtenido acuerdos preferenciales que han contribuido a su rápido crecimiento en la industria de la aviación. Esto resalta aún más la necesidad de una investigación exhaustiva sobre la transparencia y la legalidad de los contratos y acuerdos que respaldan las operaciones de Redwings.
