La forma en que se presentó el reglamento a la Ley General de Control de Tabaco que entró en vigor el 15 de enero de 2023 es “negativa”, nos dijo Felipe Gaytán Alcalá, investigador de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de La Salle. “Vuelve delincuente al fumador” porque en esa búsqueda por reducir el consumo de tabaco, lo que hace es “castigar” al consumidor y provocar “miedo” con “sanciones excesivas”.
La reforma a la llamada “ley antitabaco” es aplaudida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la destaca como un “avance histórico de México en sus políticas de lucha contra el tabaquismo”. En México hay cerca de 16,000,000 de fumadores. Según datos de la Secretaría de Salud, “cada día fallecen más de 173 personas por enfermedades asociadas al tabaquismo”.
Gaytán Alcalá reconoce que el tabaquismo es “un tema de salud pública”. Sin embargo comentó que para la reforma a la ley “debió haber una consulta” con fumadores, tenderos, restauranteros, con los afectados directamente, y esto no sucedió. Lo que sí ocurrió fue una “imposición”.
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Castiga antes que desanima a fumar
Desde el domingo 15 de enero de 2023 está prohibido fumar en espacios cerrados, lugares de trabajo, el transporte público, escuelas públicas y privadas. “El caso de las buenas intenciones terminan siendo un efecto negativo, sobre todo porque no quedan muy claros algunos puntos del reglamento”, menciona el analista.
Cuando en 2008 se publicó la Ley General para el Control del Tabaco, explicó Gaytán Alcalá, “quedaron bien definidas cuáles eran las zonas exclusivas para fumar y cuáles no” y a pesar de que “los fumadores se sentían perseguidos, en el mediano plazo se aceptó la convivencia en esos espacios compartidos”.
A partir de ahora “fumar en un espacio público, como puede ser un restaurante está mal visto”, comentó el académico de La Salle, esto se extiende a “hoteles, bares, salones de fiestas, centros comerciales, patios, terrazas, balcones, parques de diversión, deportivos, playas, estadios, mercados, iglesia o cualquier comercio”.
Aquí hay un problema porque no está claro “cuando hablas de los balcones, ¿son los de los hoteles, de los restaurantes o también los de mi casa? Ahí hay una intromisión entre lo público y lo privado. ¿No puedo fumar en la calle? Hay muchas impresiones y ambigüedad en la ley”, señaló Gaytán Alcalá.
Con la ley antitabaco lo que se busca es “castigar por todos lados” al fumador e insiste en que “lo vuelve un delincuente”. Lejos de impulsar a dejar el cigarrillo, la norma termina “generando miedo y un medio para aplicar sanciones”.
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Castigos van desde multas hasta arrestos
El académico de la Universidad La Salle insiste en los “vacíos” de la ley antitabaco, es decir, la interpretación que le den las autoridades a la norma “podría prestarse a un incremento en los actos de corrupción”.
El fumador está “expuesto a cualquier sanción administrativa”, advirtió el investigador. Los castigos van desde una advertencia a multas de $10,374 y arrestos de hasta 36 horas, según datos publicados por la organización civil, Salud Justa.
“Los que se encarguen de vigilar que se cumpla con la norma te van a poder levantar una multa en cualquier momento. Seguramente vas a tratar de evitar ese pago excesivo por la falta cometida y el recurso al que muchos recurren, es pagar para que no te sancionen”, dijo Gaytán Alcalá.
En la Ciudad de México, desde el 31 de mayo de 2022, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, dio a conocer que se tienen once espacios en el Centro Histórico libres de humo de tabaco. Esto, dijo la mandataria, es para “no interferir con el derecho de las personas no fumadoras”.
Surgen los amparos ante ley antitabaco
En la ley antitabaco también se prohíbe a los comercios la exhibición directa o indirecta de cigarros y a las tabacaleras se les impide hacer publicidad de cualquier tipo y patrocinios. “Se viene una ola de amparos con esta medida. Lo que pudo haber sido una buena acción o decisión de política pública va a terminar siendo un pleito judicial”, anticipó Gaytán Alcalá.
El analista prevé que varios comerciantes y restauranteros van a recurrir al amparo al ver afectados sus ingresos económicos. El 19 de enero se hizo público que Walmart de México y Habano 2000 SA de CV promovieron amparos en contra de la ley antitabaco.
El reclamo de la cadena de tiendas de origen estadounidense es por no permitirle “colocar productos del tabaco en exhibidores de los establecimientos y puntos de venta, que permitan al consumidor observar directamente dichos productos y, en su caso, tomarlos”, publicó el periódico La Jornada. La juez Celina Angélica Quintero Rico pidió a Walmart de México corregir algunas inconsistencias y tienen hasta este 21 de enero para su entrega.
La tabacalera recurrió al amparo para mantener la publicidad, promoción y patrocinio de los productos que elabora en medios de comunicación y difusión, así como su exhibición. La respuesta a la solicitud será dada a conocer el próximo 26 de enero.
Restauranteros en guardia
En Mazatlán la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados, (Canirac), anunció el 2 de enero que “abrirá un espacio de asesoría jurídica para ampararse ante las multas” que marca la ley antitabaco.
El presidente de la Canirac en Mazatlán, Rodrigo Becerra Rodríguez, dijo al portal Punto que ante las “altas sanciones económicas”, lo que perciben es una situación difícil, “porque están dejando al restaurantero la responsabilidad de impedir que los comensales enciendan un cigarrillo”.
La ley antitabaco establece multas a los dueños o responsables de establecimientos, que pueden ir desde los $103,740 pesos hasta los $414,960 pesos, según Salud Justa.
¿Cómo se vive la ley antitabaco en restaurantes?
El gerente del Salón Corona sucursal Diana, José Antonio Noguez, no ve mucho margen de diferencia. “Las áreas de fumadores estaban totalmente anuladas por el tema de la COVID por las normas de prevención. Ya no había forma de cómo dejarlos fumar”, explicó.
Noguez dijo que antes de la pandemia “se les permitía fumar fuera del establecimiento, pero ahora la ley prohíbe que estés a menos de 10 metros de distancia”. Ellos, contó, están en una vía de tránsito peatonal por lo que “no creo que queden fuera de alguna multa por parte de la autoridad sanitaria, pero eso ya será un tema de los comensales”.
En cuanto a las sanciones, Noguez no descarta varias clausuras de establecimientos, sobre todo, “bares de en Polanco o en la Condesa donde están de alguna manera más fuera de la ley porque están permitiendo a la gente que fume”. Prevé que tanto “el Instituto de Verificación Administrativa (Invea), Cofepris y la Secretaría de Salud van a estar muy al pendiente de que se cumpla con la ley”.
El gobierno trata a las y los consumidores como menores de edad
De acuerdo al académico de La Salle, el hecho de que el gobierno vea a las y los consumidores como menores de edad es porque según éste “necesitan ser tutelados y no les reconoce todos los derechos y toda la condición plena de madurez”.
“Los gobiernos populistas y autoritarios tienen ese rasgo de señalar lo que le conviene al pueblo y lo que no debe de elegir”, finalizó el especialista.
