En lo que parece un esfuerzo para demostrar su compromiso en la lucha contra el tráfico de fentanilo, el pasado viernes 5 de mayo la Administración para el Control de Drogas del Departamento de Justicia de los Estados Unidos (DEA por sus siglas en inglés) dio a conocer los resultados de lo que ha sido una operación de un año que comenzó el 1 de mayo de 2022 y finalizó el 1 de mayo de 2023.
La Operación Última Milla tiene como objetivo detener en el último tramo el camino que las drogas sintéticas siguen para llegar a las calles de Estados Unidos. En el último año la agencia logró confiscar más de 193,000,000 de dosis mortales de fentanilo entre polvo y píldoras, de igual forma se reportaron más de 3,000 arrestos.
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Como te contamos en esta nota la epidemia de fentanilo es un problema que ha arrasado con ciudades completas en el país vecino.
Las muertes por fentanilo se dispararon durante la pandemia por COVID-19. En 2021 se superaron las 106,000 defunciones por sobredosis. Además, se estima que por lo menos 72,000 estadounidenses murieron a causa del fentanilo en 2022.
Operación Última Milla
La letalidad de 2021 llevó a la DEA a cambiar su estrategia de combate, y a partir de 2022 se han dedicado a atacar toda la red de suministro de drogas, explicó Anne Milgram, la administradora de esta agencia.
Última Milla es una operación que consistió en 1,436 investigaciones que se llevaron a cabo a lo largo de un año en Estados Unidos. La mayoría de las investigaciones -más del 70%- encontraron vínculos con el Cártel de Sinaloa, aunque también hay una presencia importante del Cártel Jalisco Nueva Generación en el tráfico de fentanilo, este grupo estuvo involucrado en alrededor del 30% de las investigaciones.
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Los hijos de Joaquín El Chapo Guzman han negado estar involucrados con el tráfico de fentanilo y han declarado que muchos grupos en Sinaloa usan sus nombres para traficar la droga.
Gracias a la operación se decomisaron más de 43,000,000 pastillas de fentanilo y más de 6,500 libras de polvo de fentanilo, lo cual equivale a 193,000,000 dosis mortales de fentanilo. Esta droga puede ser hasta 50 veces más potente que la heroína y 100 veces más que la morfina.
El uso de las redes sociales para la distribución de fentanilo
Las investigaciones de la DEA arrojaron que los cárteles mexicanos están utilizando las redes sociales para vender estas drogas en Estados Unidos. Encontraron casi 600 vínculos entre cárteles y compradores en estos medios, sobre todo en Facebook.
De igual forma encontraron que los cárteles usan apps encriptadas como Whatsapp y Telegram para realizar su coordinación interna.
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“Los cárteles de Sinaloa y Jalisco utilizan redes de distribución en varias ciudades, pandillas callejeras locales violentas y traficantes individuales en los Estados Unidos para inundar las comunidades estadounidenses con fentanilo y metanfetamina, generar adicción, fomentar la violencia y matar estadounidenses. Las plataformas de redes sociales estadounidenses son los medios por los cuales lo hacen. Los cárteles utilizan las redes sociales y las plataformas encriptadas para llevar a cabo sus operaciones y llegar a las víctimas, y cuando su producto mata a los estadounidenses, simplemente pasan a victimizar a los otros millones de estadounidenses que son usuarios de las redes sociales”, dijo Milgram.
¿Intervencionismo?
A raíz de la epidemia de fentanilo en Estados Unidos y la desaparición de ciudadanos norteamericanos en Tamaulipas a principios de 2023, congresistas republicanos han comenzado a presionar al presidente Joe Biden para tomar acciones concretas y combatir a los cárteles de drogas mexicanos como grupos terroristas.
El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador ha descalificado el llamado de estos congresistas como un intento de intervencionismo y ha dejado claro que no permitirá que Estados Unidos actuar en México. También cuestionó la autoridad de este país para decidir que es o no un terrorista.
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El mandatario mexicano también hizo un llamado al vecino del norte a que atienda el problema de las drogas de raíz y ataque las causas que llevan a la adicción.
Por otra parte, China también ha rechazado los intentos de Estados Unidos para detener la producción de esta droga desde el principio de la cadena.
A diferencia de las drogas que derivan de plantas, el fentanilo es mucho más fácil y rápido de hacer ya que solo requiere de una receta química, la combinación de algunos ingredientes, un laboratorio pequeño y unas cuantas personas. China es fundamental en este proceso, ya que si bien hay indicios de que la elaboración de esta sustancia se lleva a cabo en suelo mexicano, los precursores químicos necesarios son de origen chino.
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Estados Unidos ha sancionado empresarios chinos a quienes acusa de ser los proveedores originales de los componentes del fentanilo, sin el apoyo ni la cooperación de China.
A pesar de que China ha prohibido el fentanilo, es difícil controlar el envío de precursores a cárteles mexicanos ya que estas sustancias tienen varios usos más allá de la creación de drogas.
México y China
México por su parte ha tomado algunas acciones para combatir el tráfico de fentanilo. El presidente Andrés Manuel López Obrador promulgó la reforma a la Ley Federal para el Control de Precursores Químicos y ha solicitado al gobierno chino su cooperación para detener el tráfico de estos.
El gobierno de Xi Jinping negó que los precursores vinieran de China.
Sin embargo, la semana pasada el mandatario mexicano anunció que se decomisó un contenedor proveniente de China que contenía 20 toneladas de resina combustible la cual contenía fentanilo y metanfetaminas.
López Obrador dijo en su conferencia matutina que este cargamento sería la prueba de que en efecto China es el país de origen de estas drogas.
Pero, ¿será suficiente combatir cárteles y decomisar drogas para poner fin a la epidemia que está sufriendo Estados Unidos o será necesario comenzar a ver las adicciones como un tema de salud pública?
